Valverde de la Vera se ha despertado para reanudar las labores de recuperación después de la riada de agua, barro y piedras que ayer atravesó la localidad, ladera abajo, tras la rotura de una pequeña presa de abastecimiento de agua.
Los daños principales se han registrado en general en las dotaciones urbanas (calles, tuberías), en la piscina municipal, el velatorio y la ermita, según contabilizaron Ayuntamiento y Junta.
Las avenidas de agua y barro que han atravesado el núcleo urbano de Valverde de la Vera tuvieron su origen en una fisura de la balsa de abastecimiento de agua de este municipio, que en ese momento almacenaba 60.000 de sus 100.000 metros cúbicos de agua.
La consejera de Medio Ambiente, Begoña García Bernal, recalcaba que no es una presa ni un pantano, como en un primer momento había apuntado la alcaldesa, Nathalie Victoria Deprez, sino algo de menor tamaño, la “balsa” de abastecimiento de agua, que ha quedado completamente vacía.
Aunque en principio el abastecimiento de agua potable a este municipio estaba “plenamente garantizado”, y luego por posible contaminación de barro se iban a mandar cisternas, éstas finalmente no han sido necesarias.
En una rueda de prensa celebrada en Mérida para informar del suceso, García Bernal confirmó desde los primeros momentos que no había daños personales, aunque dos personas mayores sí han tenido que ser atendidas por ansiedad “y los lógicos nervios”.
La avenida de agua y barro sí causó importantes daños materiales, que por el momento no se pueden cuantificar, entre ellos el corte de la carretera EX-203, entre Valverde de la Vera y Villanueva de la Vera, entre los kilómetros 68 y 69, por los destrozos sufridos en un tramo de unos 300 metros; la carretera reabrió al tránsito posteriormente, en la tarde-noche.
A las ocho menos diez
García Bernal precisaba que a las 7:50 horas del miércoles el 112 recibía la llamada de la alcaldesa de Valverde de la Vera y dos minutos más tarde ya se activaron todos los servicios de emergencia que incluye el Plan de Inundaciones (INUNCAEX) en su nivel 1.
Aunque este “accidente” ha provocado la lógica alarma en la población “porque el agua, el barro y el lodo causan mucho impacto”, la situación quedó controlada y las labores se centran la limpieza, reparación de la carretera y evaluación de daños.
Efectivos trabajando
A la zona se desplazaron 4 dotaciones de bomberos de los parques de Plasencia (2), Navalmoral de la Mata y Cáceres, Policía Local de Villanueva de la Vera y Losar, 12 patrullas de la Guardia Civil y efectivos de Cruz Roja, entre ellos tres equipos acuáticos, que no ha sido necesario utilizar.
García Bernal no ha querido pronunciarse sobre las posibles causas de la rotura o sobre la existencia de denuncias por “serias deficiencias” en la infraestructura como ha indicado hoy Podemos, ya que lo importante ahora es desplegar los medios necesarios, asegurar a las personas y evaluar daños.
“Lo demás ya se verá”, ha dicho la consejera, que en cuanto a la dimensión de los daños ha indicado que es una cuestión que compete a la Dirección General de Infraestructuras, “porque en lo que a nosotros compete los importante es que el 112 ha coordinador todos los medios dos minutos después de recibir la primera llamada de la alcaldesa y que se han puesto todos los medios en el terreno”.
Agua y lodo corrieron por las calles de este municipio cacereño, aunque no hubo que lamentar daños personales.
Según ha confirmado a Efe la alcaldesa, Nathalie Deprez, la presa, situada en la parte alta de este municipio cacereño, ya había dado problemas y que recientemente había sido sometida a algunos arreglos.
La rotura provocó que el agua y lodo hayan corrido por las calles del pueblo, causando daños en piscinas, casas e incluso ha afectado a la carretera EX-203, que une este municipio con el de Villanueva de la Vera.
La alcaldesa de Valverde también ha explicado que en un primer momento quedaron algunos vecinos atrapados en sus casas, aunque ya han podido ser rescatados por los bomberos, que ya se encuentran en la zona, así como efectivos del 112, Protección Civil y de la Guardia Civil.
La primera edil se ha alegrado de que no haya que lamentar daños personales y que, “una vez pasado el gran susto y el caos inicial” solo haya daños materiales, pero ha aprovechado para agradecer “la coordinación” con la que han trabajado los diferentes servicios.
Plan preventivo
La Administración autonómica activó el nivel 1 del Plan Especial de Protección Civil ante inundaciones (Inuncaex) tras las avenidas de agua registradas en la localidad cacereña de Valverde de la Vera por, reiteran, una “fisura en una balsa” de abastecimiento de agua de la zona; ese nivel fue posteriormente desactivado.
Este nivel, el primer escalón de emergencias de los tres que conforman este plan, está destinado, sobre todo, a establecer medidas especiales de protección, coordinación y apoyo al municipio.
Fuentes del Gobierno regional han asegurado, a través de un comunicado de prensa, que “no se ha registrado ningún herido ni desaparecido hasta el momento”.
En la zona se encontraban movilizados en los primeros momentos cuatro dotaciones del Servicio de Prevención, Salvamento y rescate (Sepei), 12 patrullas de la Guardia Civil, Policía Local y personal de mantenimiento.
El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, se trasladó a la sede del Centro 112 de Emergencias, en Mérida, para conocer de primera mano la evolución y alcance de la inundación, y por la tarde visitó Valverde de la Vera.