Las autonomías plurilingües piden al próximo Gobierno de España apoyo a la diversidad idiomática
En el año 2007 los gobiernos de Galicia, Euskadi y Catalunya se unieron para impulsar la protección y promoción del gallego, el euskera y el catalán mediante un protocolo general de colaboración en materia lingüística que tenía en su centro la defensa de los derechos contemplados en la Carta Europea de las Lenguas, a la que España se había incorporado en 2001. Ese documento se fue renovando con reivindicaciones concretas y, nos últimos años, también con la incorporación de los gobiernos de las demás autonomías plurilingües. Todas ellas se han reunido este miércoles en Bilbao para realizar el seguimiento anual del protocolo, pero también para dirigir reivindicaciones concretas al próximo Gobierno de España.
El Gobierno vasco fue en esta ocasión anfitrión del encuentro. Más allá de cuestiones ordinarias como la preparación del próximo informe de seguimiento de la Carta Europea de las Lenguas y el plan de trabajo conjunto para 2020, los gobiernos gallego, vasco, catalán, navarro, balear y valenciano han consensuado un documento de carácter más político con la vista puesta en la conformación del Ejecutivo estatal: la Declaración de Bilbao.
En este documento los seis gobiernos explican que, a las puertas del vigésimo aniversario de la ratificación de la Carta Europea de las Lenguas por parte del Gobierno de España, “es innegable que son muchos los factores de riesgo que comprometen el desarrollo presente y futuro de nuestras lenguas” y “de la realidad plurilingüe que el propio Estado español reconoce en su Constitución”. Por eso, dice el documento, “es más necesario que nunca que la Administración del Estado, con la coherencia exigible a todo Estado democrático, vele por la protección y la salvaguarda de los derechos lingüísticos” también de la población que habla idiomas oficiales diferentes del castellano.
Esta tarea, subrayan los gobiernos, “debe estar por encima de intereses políticos particulares” y muestra de esto es que “los firmantes de este protocolo y de esta declaración trabajamos desde diversas sensibilidades y opciones políticas”. “Nos mueve la certeza de que el futuro, pero también el propio presente”, vienen “de la mano del multilingüismo” y por eso los responsables de Política Lingüística de los seis ejecutivos instan “al Gobierno resultante de la reciente convocatoria electoral” a que “sin demora y en una atmósfera de entendimiento y consenso con las instituciones de nuestras comunidades”, dé “pasos efectivos para incorporar a su agenda política un plan eficaz orientado al cumplimiento” de sus deberes “con las lenguas oficiales diferentes al castellano”.
A juicio de las seis instituciones, esta es “una tarea que no admite demora” y “para la que brindamos, como hemos hecho siempre, nuestra más resuelta colaboración” y “voluntad de acuerdo”. En este sentido, creen que “una de las líneas maestras” que deberían “orientar la actitud diligente y proactiva que reclamamos del Gobierno del Estado” es que “adopte medidas pedagógicas y comunicativas eficaces en orden a la asunción por parte de todo el conjunto de la ciudadanía del Estado” de la “esencial realidad multilingüe de este”. También es necesaria, agregan, la “promoción sostenida de las lenguas oficiales en el Estado español como clave para un multilingüismo equilibrado y armónico”.
Desde la apuesta por el “acuerdo” y “la convivencia lingüística”, los gobiernos reunidos este miércoles en Bilbao han acordado además conceder el Premio a la Promoción de la Realidad Plurilingüe del Estado a la cantante y compositora gallega Guadi Galego por su último disco, Immersión, compuesto por piezas cantadas en gallego, euskera, catalán, aranés, asturiano, portugués y castellano. Como la propia Guadi Galego ha señalado recientemente en Praza.gal, este trabajo es una apuesta por situar todas las lenguas peninsulares “a la altura de los afectos”.