Baltar, ante el Supremo por conducir a 215 kilómetros por hora: está citado a declarar voluntariamente este martes

El Tribunal Supremo, que abrió en noviembre una causa contra Manuel Baltar por conducir a 215 kilómetros por hora por la autovía A-52, lo ha citado a declarar este martes. El senador del PP puede acudir o no a la cita, ya que es voluntaria. Es un procedimiento habitual cuando la investigación judicial afecta a aforados, una condición que el político ourensano tiene como representante en la Cámara Alta. De este modo, la jueza encargada del caso, Ana Ferrer, puede escuchar su versión para decidir si avanza hacia un juicio sin necesidad de remitir antes un suplicatorio al Senado.

Fuentes del grupo del PP en el Senado han manifestado a esta redacción que no van a hacer comentarios sobre la citación porque consideran que se trata de un asunto privado de Baltar, que fue interceptado al volante de un coche oficial de la Diputación de Ourense, que entonces presidía, circulando muy por encima del límite de 120 kilómetros por hora. Si se presenta a declarar y la jueza ve indicios para juzgarlo, deberá remitir igualmente un suplicatorio al Senado. Si el político no acude a la cita, el suplicatorio deberá tramitarse ya.

Este proceso se aplica a los aforados. El reglamento del Senado establece que, una vez recibido un suplicatorio, debe remitirlo “acto seguido” a una comisión específica, que es la encargada de decidir si se acepta o no en un plazo de 30 días y después de haber dado audiencia al interesado. El dictamen de esta comisión debe incluirse en el orden del día del primer pleno ordinario que se celebre. Una vez haya acuerdo, el presidente del Senado debe informar en ocho días al Supremo. Si la cámara no se pronuncia en un plazo de 70 días naturales, se entiende que el suplicatorio se ha denegado.

Baltar fue detectado, como reveló elDiario.es, el pasado mes de abril por un radar de la Guardia Civil. Iba a 215 kilómetros por hora a los mandos de un coche oficial a la altura de la localidad zamorana de Asturianos. Fue multado con 600 euros y seis puntos del carnet de conducir, pero el atestado de los agentes también se tradujo en una causa penal contra él: aun teniendo en cuenta el margen de error de ese tipo de radar, según la Guardia Civil, superaba en más de 80 kilómetros por hora el límite y eso, de acuerdo con la normativa, es un delito contra la seguridad en el tráfico.

El caso le recayó inicialmente en un juzgado de Puebla de Sanabria, que convocó a Baltar a una vista rápida. Pero el entonces presidente de la Diputación ourensana maniobró para retrasar una posible condena antes de las elecciones municipales del 28 de mayo. Ante la imposibilidad de un acuerdo de conformidad, pasó a un juzgado de Zamora. En los comicios, el PP no logró recuperar la mayoría absoluta en Ourense y un par de semanas después Manuel Baltar anunciaba su renuncia a la Presidencia del ente provincial para “facilitar” que siguiese en manos de su partido.

Con un juicio pendiente por sus excesos al volante, el PP impuso en verano su mayoría absoluta en el Parlamento gallego para nombrar a Baltar senador dentro de la cuota autonómica. Al convertirse en aforado, su caso pasó al Tribunal Supremo. Ya incorporado a la Cámara Alta, a finales de octubre dio un último paso para cortar los lazos políticos de su familia con el poder en la provincia de Ourense y dejó también su puesto de presidente del PP provincial.