El BNG ha criticado el “triunfalismo” del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tras el acuerdo en la Unión Europea que abre la puerta a que se fije un máximo al precio del gas con el fin de bajar la factura de la luz. “De lo anunciado lo único cierto que conocemos es que el coste de limitar el precio del gas lo vamos a acabar pagando las personas consumidoras en la factura de la luz, mientras que las grandes compañías seguirán manteniendo su margen de beneficio intacto”, manifestó Néstor Rego, el diputado del BNG en el Congreso.
Rego, que se reunió con un grupo de transportistas este domingo para presentarles sus propuestas para compensar la subida de precios, recordó que el BNG está promoviendo una protesta el próximo 3 de abril en Santiago. La intención, dijo, es “reclamar un giro social en la acción del Gobierno”. Al Ejecutivo central le piden que aplique de forma inmediata topes al precio de los carburantes y la electricidad y que los impuestos de gasolina y gasóleo se bajen de forma temporal y hasta que la inflación se estabilice. Los ingresos se compensarían con subidas en el impuesto del patrimonio a “quienes más tienen”.
El BNG defiende una intervención pública del mercado eléctrico y en los beneficios, que Rego calificó de “llovidos del cielo”, de las eléctricas para controlar los precios y la garantía del acceso a la energía como un bien básico. “Defendemos desvincular el mecanismo de fijación de los precios del gas en los mercados internacionales y cambiar el sistema de pool y establecer precios máximos”, añadió. Otra de las reclamaciones de la formación es fijar una tarifa eléctrica gallega que tenga en cuenta la producción de energía en Galicia.