Galicia lucha en la extinción de seis incendios que afectan principalmente a la provincia de Ourense

Los equipos de extinción trabajan para acabar con los seis incendios que afectan principalmente a la provincia de Ourense. La Xunta asegura que la mayoría están estabilizados y el único que consideran activo es el que afecta al municipio ourensano de Laza. Hace 24 horas que la administración gallega decía que el pronóstico de este fuego es favorable y próximo a su control, pero esta circunstancia todavía no se ha producido. El pronóstico del tiempo anuncia lluvias para este domingo en Galicia, una circunstancia que podría colaborar con unas labores de extinción que se han prolongado durante días. El de Laza es un fuego resultante de la unión de dos incedios (Laza y Chandrexa de Queixa). Ya ha quemado ya más de 2.100 hectáreas, según las últimas estimaciones provisionales. Al igual que en el día de ayer la Consellería do Medio Rural ha asegurado que este fuego se encuentra ya “prácticamente perimetrado” y que “evoluciona favorablemente hacia su estabilización”.

La Xunta ha dado por estabilizado a las 23:47 horas el incendio iniciado a última hora de la tarde de este sábado en la parroquia de Torbeo, en el ayuntamiento lucense de Ribas de Sil que, según las últimas mediciones provisionales, ha quemado más de 20 hectáreas.

En la provincia de Ourense permanecen controlados los incendios de Casaio, en Carballeda de Valdeorras, que ha quemado alrededor de 440 hectáreas; el de Astureses, en Boborás, con unas 120 hectáreas calcinadas; y, desde las 23:29 de este sábado, el de San Cosmede de Cusanca, en O Irixo, donde han ardido unas 680 hectáreas.

También se ha dado por controlado en la mañana de este domingo el fuego de la parroquia de Pentes, en el municipio ourensano de A Gudiña, que según las últimas estimaciones ha calcinado una superficie superior a 20 hectáreas.

En el último parte con información recogida hasta las 08:30 horas de este domingo, también se ha dado por extinguido un incendio activo en Vilardá, parroquia de San Xoán de Río (Ourense). Este fuego finalmente ha quemado unas 8,2 hectáreas: ocho de monte raso y 0,2 de arbolado.