Las autoridades marítimas de la República de Irlanda mantienen retenido al pesquero gallego Punta Candieira por supuestas deficiencias técnicas en el barco que no lo harían apto para navegar, según han informado fuentes del Ministerio de Exteriores español a elDiario.es. El buque se encuentra a la espera de ser sometido a una segunda inspección técnica, para la que todavía no hay fecha, necesaria para verificar que los problemas fueron subsanados y permitir su regreso a Galicia. Desde Exteriores aseguran que están realizando gestiones para que esta segunda revisión se realice “lo antes posible”.
El barco es un palangrero que fue arrestado el 31 de mayo por la Marina irlandesa, tres días después de haber sido acusado por pescadores irlandeses que operaban en la bahía de Bantry de echar sus artes de pesca en aguas reservadas para buques con bandera de Irlanda. La embarcación gallega tuvo un incidente con el barco irlandés Lours de Mers, supuestamente tras una maniobra peligrosa realizada por el Punta Candieira para evitar que esta otra embarcación le cortara sus líneas de anzuelos.
La armadora del barco gallego pagó el pasado viernes la fianza de 170.000 euros impuesta por el juzgado de Middleton, en el condado de Cork, para liberar al pesquero con puerto base en Celeiro, en el municipio de Viveiro (Lugo). El capitán del Punta Candieira se enfrentó este martes a una vista acusado de tres delitos relacionados con “infracciones” de las normas pesqueras por presuntamente faenar dentro de las 12 millas de jurisdicción de Irlanda. El capitán de la embarcación gallega alega, sin embargo, que no llegaron a estar a menos de 15 millas.
Los quince miembros de la tripulación no fueron arrestados por las autoridades irlandesas y disponen de libertad total de movimiento, a la espera de que el barco reciba luz verde para abandonar el puerto de Cobh, al sur de la isla, donde se encuentra retenido.
La vista del martes fue un mero trámite para confirmar que será el Tribunal Penal de Cork el encargado de investigar este incidente. Según fuentes del despacho de abogados Conways Solicitors que defiende al capitán gallego, el juicio está previsto que comience el 2 de julio, lo que daría el pistoletazo de salida a un proceso judicial que desde Exteriores anticipan que será “largo”.
El choque entre el palangrero gallego y los pescadores irlandeses ha tenido repercusión en el debate político de Irlanda. El diputado independiente en el Parlamento de Dublín Michael Collins criticó al Gobierno de la isla por haber tardado tres días en apresar al Punta Candieira desde el momento en que los pescadores irlandeses denunciaron los hechos y reclamó a la Marina del país mejorar la protección de sus aguas territoriales ante posibles futuras incursiones de barcos españoles.
El arresto del Punta Candieira tiene lugar en medio de un clima de crecientes protestas por parte del sector pesquero irlandés, que denuncia que los caladeros de la isla son mayoritariamente explotados por flotas de otros países de la Unión Europea y reclama renegociar el reparto de las cuotas pesqueras para favorecer a los pescadores nacionales. El Brexit ha echado más gasolina al fuego, ya que la salida del Reino Unido de la UE supondrá de aquí a 2026 una reducción del 15% de la cuota pesquera a la que tenían derecho los pescadores irlandeses en 2020. Esta bajada sería la mayor de los países de la UE y equivaldría a una caída de la facturación de 43 millones de euros, de acuerdo con los cálculos del propio Gobierno de Irlanda.