Una jueza de Marbella ha retirado la custodia de su hijo de un año a una mujer por vivir en “la Galicia profunda”, en donde considera que no hay “múltiples posibilidades para el adecuado desarrollo de la personalidad de un niño y para que crezca en un ambiente feliz”. La titular del juzgado de primera instancia número 7 da la custodia al padre, que vive en Marbella, y prevé que los progenitores la compartan solo en el caso de que la madre se traslade a esta localidad de la costa de Málaga.
El caso lo publica La Voz de Galicia, que asegura que el escrito define Marbella como una “ciudad cosmopolita”, con infraestructuras, “un buen hospital” y “todo tipo de colegios para poder educar a un niño, públicos o privados”. Añade que ofrece posibilidades para el correcto desarrollo del menor, “lo que no sucede con la pequeñísima población en la Galicia profunda a la que se ha trasladado la madre”. Este lugar, que está en la zona de la ría de Muros y Noia, se encuentra, según la jueza, “lejos de todo” y allí no hay “opciones laborales”.
La mujer se mudó fuera de Galicia hace cuatro años por trabajo y conoció a un hombre, con el que tuvo un hijo. Hace dos años él se fue a Marbella también por motivos laborales. Fue allí donde nació el bebé. El pasado verano, la pareja puso fin a su relación y ella regresó a Galicia. Ambos pidieron la custodia compartida.
La abogada de la mujer, Claudia Traba, ha presentado una queja formal ante la comisión disciplinaria del Consejo General del Poder Judicial por el “absoluto desprecio” con el que considera que ha actuado la jueza. También va a presentar, según el periódico, un escrito para pedir la nulidad del auto de medidas previas por entender que no es imparcial y que en la vista no se tuvieron en cuenta buena parte de las pruebas que aportó la madre. La defensa cree que pudo haber una vulneración de los derechos constitucionales de tutela judicial efectiva.