La familia de la joven arrojada al vacío desde lo alto de la muralla de Lugo asegura que la agresión fue por LGTBIfobia. Una persona del entorno familiar de la víctima declara en el diario El Progreso de Lugo que el presunto autor “intentó matarla por ser transexual”. Mientras tanto, pese a que el hombre detenido está siendo investigado por un delito de homicidio en grado de tentativa, el titular del juzgado de instrucción número 3 lo ha dejado en libertad.
La joven, de 23 años de edad, está ingresada en estado grave en el Hospital Universitario Lucus Augusti (HULA). Supuestamente, el detenido, de 24 años y vecino de la ciudad, la empujó cuando estaban en la muralla. La Policía Nacional ha informado de que, según su investigación, el hombre empujó a la víctima.
La mujer acabó tendida en el patio interior de una vivienda de la zona de la Praza de Ferrol, después de caer 12 metros. Tiene una pierna y una muñeca rotas y dos vértebras fracturadas. El presunto agresor abandonó el lugar sin socorrerla. El juzgado le ha impuesto la prohibición de aproximarse o comunicarse con la víctima y la obligación de comparecer cada semana.
La joven no ha podido todavía prestar declaración debido a su estado, pero los datos que han trascendido apuntan a que ambos se habían conocido esa misma noche, en la madrugada del domingo, en la zona de vinos de Lugo y tomaron unas copas juntos.
Después se trasladaron a la muralla y ahí, según la investigación policial, tuvieron una discusión y él la empujó a ella al vacío desde el adarve. La víctima permaneció tendida en el suelo hasta que, en torno a las 7:00 horas una persona que pasaba por la zona escuchó a alguien pedir auxilio. Buscó en los alrededores hasta que vio a la chica tirada en el fondo de un patio interior y avisó a los servicios de emergencia.
Policía local, bomberos y personal de urgencias médicas lograron acceder al recinto a través de un bajo y llegaron hasta la mujer, que en ese momento no recordaba qué había pasado. A través del móvil de la joven y el relato de sus allegados fue identificado el presunto agresor y localizado el martes, cuando fue detenido en la propia ciudad de Lugo. Fue conducido a la comisaría de la calle Chantada y pasó a disposición judicial ayer miércoles por la tarde.
Está previsto que el juzgado se inhiba en favor del número 2, que estaba de guardia cuando se produjo la agresión.
La Asociación de Familias de Menores Trans de Galicia (Arelas) ha condenado la agresión: “Una vez más tenemos que ser testigos de lo que el odio y la intolerancia causan en nuestra sociedad”. La sociedad lanza un mensaje “terrorista y homicida” a las personas trans sobre que no se respeta mi su derecho a vivir, ha añadido en un comunicado.