El PP de Vigo ha elegido a Marta Fernández-Tapias, la delegada territorial de la Xunta en la ciudad, como su nueva presidenta. Ha recibido el 57% de los votos: 300 de los 523 emitidos -tenían derecho a votar 615 militantes-. Su oponente, el exconselleiro y senador Javier Guerra, logró 222. Una de las papeletas estaba en blanco. La formación pone fin de este modo a una campaña caracterizada por los enfrentamientos y la tensión entre las dos alternativas y sitúa al frente a la candidata oficialista.
El congreso del PP vigués ha estado impregnado de desencuentros y polémicas. La comisión organizadora acusó a Javier Guerra de “afiliaciones irregulares” al partido. En un documento remitido a Alfonso Rueda, presidente de los populares en la provincia de Pontevedra y vicepresidente del Gobierno gallego, aseguraba que se domiciliaron cuotas “en una cuenta cuya titularidad no pertenecía a la persona que solicitaba la afiliación”. Entre los implicados, 19, no existía, afirma, “ningún tipo de vinculación familiar o análoga”. Y la persona titular de la cuenta bancaria en la que estos domiciliaban sus cuotas era la misma: el senador y exconselleiro Javier Guerra.
La tensión no se ha terminado con el recuento de los votos. Algunos militantes presentaron cartas en las que anunciaban la impugnación del congreso y con protestar por que algunos afiliados no pudieron votar pese a que sostienen que cumplían los requisitos. El censo se cerró el pasado mes de julio y para poder depositar la papeleta se exigía estar al corriente en el pago de las cuotas.
Fernández-Tapias lanzó en los últimos días mensajes para la integración de las dos alternativas y, tras saberse ganadora este sábado, insistió en que las puertas están “abiertas” para Guerra y su equipo. Sin embargo, los dos candidatos no hablaron y no llegaron a saludarse ni durante ni después del acto.
La nueva presidenta se pone al frente del PP en la ciudad para terminar dos años de interinidad, en los que la formación estuvo a cargo de una gestora liderada por la exalcaldesa Corina Porro. Fernández-Tapias ha afirmado que empieza “un camino desde Vigo, por Vigo y para Vigo” con la intención de medirse en las urnas con un Abel Caballero que parece difícil de alcanzar. Obtuvo en las elecciones de 2019 el 68% de los votos y 20 de los 27 concejales del Ayuntamiento. Fue a raíz de aquella cita electoral que el PP se quedó descabezado en la ciudad. Cayó de siete a cuatro concejales y su entonces presidenta, Elena Muñoz -exconselleira con Feijóo, senadora y ahora integrada en el equipo de Guerra- dimitió por los malos resultados.
El XIII Congreso Local del PP de Vigo pone como líder a Fernández-Tapias, una abogada que fue directora xeral de Administración Local de la Xunta, a las órdenes de Alfonso Rueda, antes de convertirse en la delegada territorial en Vigo. En su discurso tras ser elegida reiteró su “lealtad” a Rueda y al presidente del PP y del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo.
De hecho, su candidatura ha estado apoyada por varios directores generales y el exalcalde Manuel Pérez, mientras los concejales del PP en la ciudad, la senadora Elena Muñoz y el diputado Diego Gago han secundado la de Guerra.
En línea con el mensaje transmitido durante su campaña, ha vuelto a reivindicar su vinculación con la ciudad y se ha comprometido a trabajar para que “los vigueses recuperen el orgullo de ser del PP” y el partido sienta lo mismo respecto a la urbe.
En la clausura intervino Feijóo, que puso como ejemplo el congreso que lo eligió a él presidente del PPdeG en 2006. Defendió que la unidad alcanzada tras el mismo le permitió alcanzar cuatro mayorías absolutas consecutivas. Pidió superar los “humillantes” resultados de las pasadas elecciones municipales: “La primera decisión que se toma en un congreso no es elegir a un presidente del partido, es responder a la pregunta de si queremos ganar todos o perder todos”. Si no hay unidad, advirtió, el partido volverá a fallar.
“Me acuerdo del congreso anterior y todos nos acordamos de lo que pasó y de los resultados que produjeron lo que pasó posteriormente”, insistió, en alusión al evento en el que Elena Muñoz venció frente a Guerra y pasó a liderar un PP que se quedó con cuatro concejales en la ciudad.