El presunto líder de la trama Zeta actuó de “intermediario” ante el alcalde de A Coruña

El alcalde de A Coruña y presidente del PP en la provincia, Carlos Negreira, negó este mismo miércoles en una entrevista en Radio Coruña tener alguna vinculación con el empresario Gerardo Crespo, el líder de la trama de corrupción de cursos falsos que investiga la operación Zeta, “más allá de la que se mantiene con cualquier otro representante de vecinos”. No opinan lo mismo los investigadores, que en el sumario –al que ha tenido acceso este diario– dan cuenta del “nivel de relaciones” que tiene el empresario con importantes cargos públicos, entre ellos el regidor coruñés, a quien llega para “realizar funciones de intermediación de su agenda”.

Llega a esta conclusión la policía después de que Crespo ejerciera de intermediario entre el responsable del sindicato USO en Galicia y el alcalde de A Coruña para lograrle al primero de ellos una cita con el regidor. “Que hablaremos, le dije... Esta semana estoy a tope”, le responde al líder de la trama Carlos Negreira, que admite que existen en el sumario once mensajes telefónicos enviadas por Crespo a su teléfono, “la mayoría no contestados”. Este, sí.

“Me dejó tirado cuando comenzaron las escuchas”, revela Crespo sobre Negreira en una entrevista em el diario local La Opinión A Coruña. Es cierto que el sumario no da cuenta de una relación demasiado fluida, pero sí deja entrever una anterior mucho más estrecha. Son los investigadores los que hablan de una “posible labor de intermediación” por parte del empresario entre las personas interesadas en contactar con el alcalde y el propio regidor. En una conversación grabada, le ofrece colaboración a un conocido para hacer “gestiones con Carlos [Negreira] y con quien veas”. “Tras tu reunión con Negreira, ¿puedo yo mantener la mía?”, le pregunta el interlocutor.

La confianza y la petición de favores era tal que Gerardo Crespo llama directamente a la secretaria del alcalde de A Coruña para informarla de la situación de diferentes procesos de adjudicación de servicios municipales, advirtiéndole de que su empresa se presentó a uno de Consumo “Para que lo sepa”, le dice. “Hay un proceso negociado que durante años estábamos llevando nosotros, el de bibliotecas, y no nos han invitado. Cuando nos hemos enterado... Se lo han dado a otra empresa [...] y el técnico del ayuntamiento es el primer sorprendido. Ahora nos hemos presentado a otro tema de la Oficina de Consumo, para que lo sepa”.

Antes, el empresario ya se había encargado de mandarle un SMS al regidor: “Hola. Desde hace años llevamos los cursos de bibliotecas del ayunt. y siempre nos invitaban al negociado; lo sabe el técnico... Y este año no. Un abrazo”.

Tan solo unos días más tarde, y según las conversaciones telefónicas intervenidas, los propios investigadores advierten de que se intenta “arreglar” un proceso de adjudicación “de un servicio vinculado con Consumo, a realizar a través de un procedimiento negociado sin publicidad y en el que se va a presentar alguna de las empresas de Gerardo Crespo”. Se refieren a la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC). Tal y como revela la policía, la idea es presentar a otras dos “empresas amigas” para “formalizar una apariencia de concurrencia en un proceso de adjudicación ya decidido, que finalmente recaerá presuntamente a favor de la empresa de Gerardo”.

La conversación es entre una empleada de su empresa y el propio Crespo. “Estamos con el tema de Consumo y nos piden dos empresas más [...] Nos vamos a presentar nosotros y dos empresas más... amigas”, admite, suponiendo que es en el propio Ayuntamiento donde se lo solicitan. De hecho, los investigadores aseguran que esta llamada “hay que ponerla en relación con los sms enviados por Gerardo Crespo a Negreira y con la llamada de ese mesmo día mantenida entre el propio Crespo y la secretaria del alcalde”.

Dos horas “con el señor alcalde de La Coruña”

La CoruñaAdemás, Eliseo Calviño, otro de los implicados en la operación Zeta –responsable de Caype y otro de los líderes de la trama–, presume también de su relación con Negreira. En una llamada a su amigo y socio, Gerardo Crespo, le anuncia que estuvo “como de los horas y media con nuestro amigo... Con Carlos, con el señor alcalde de La Coruña” y lo hace “mostrando su satisfacción”, tal y como dicen los investigadores. “¿De dos horas y media, eh? Muy bien, él muy bien como siempre, lo que pasa es que, claro, él tiene que ser muy bien, pues con todos. Yo creo que hay algunas cosas que le quedaron claras, eh... De alguna le sorprendió mucho... Y vamos a ver... Pero ya hablaremos de eso”.

La reunión entre Negreira y Calviño, así como la conversación telefónica con su socio, tienen lugar pocos días después de que Gerardo Crespo advierta a la secretaria del alcalde de que una de sus compañías se presentó a un proceso de la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) y tan solo unos días antes de que una empleada advierta al empresario de que hay que presentar “dos empresas amigas” a un proceso de adjudicación. Según conversaciones posteriores, el líder de la trama lamenta que no lograra la adjudicación de este proceso y así se lo recrimina a responsables del Ayuntamiento.

Según otras informaciones ya publicadas, este no es el primer intento de amaño de contratos relacionados con instituciones de Consumo por parte de Crespo. Correos encontrados por la policía demuestran cómo responsables del Instituto Galego de Consumo amañaron contratos con Crespo, que pactaba las condiciones para que sus empresas fueran las adjudicatarias.

Lo que es evidente para los investigadores es que Crespo pasa tiempo “presionando” a Carlos Negreira “con el objeto de conseguir más adjudicaciones”. “Me siento abandonado [...] Abrazos”, le dice el empresario, después de que el líder de la trama advierta en el Ayuntamiento de que no está siendo informado de diferentes concursos. Poco después, el regidor le envía otro SMS: “Ok Gerardo... Abrazos”. En otra conversación posterior con responsables en María Pita, el líder de la trama asegura que “al alcalde le joroba” que él no sea informado de diferentes procesos.

Después de que el líder de la trama corrupta insista en varias conversaciones con personal del Ayuntamiento pŕoximo al alcalde, decide enviarle otro mensaje telefónico a Negreira. “Me siento amparado y muy feliz del alcalde amigo que tengo”, le pone en uno de esos sms. Los investigadores entienden que Crespo “parece estar más contento con el alcalde” después de contactar con la administración local, “aunque este no le contesta”. No lo hace en ese momento, pero sí horas después: “Abrazos... le paso el mensaje a ”programación“... Nos vemos pronto!! Buen fin de semana!!”. Una relación que parece demasiado cordial para ser la que se mantiene “con cualquier dirigente vecinal”.

El alcalde de A Coruña, en la entrevista en Radio Coruña, le pide a Crespo que deje “el resentimiento y remordimiento” y que se centre “en su defensa”. El empresario, por su parte, asegura en la entrevista en La Opinión A Coruña que hizo muchos favores políticos y carga con dureza contra el alcalde, advirtiendo además de que dará cuenta de todo al juez cuando sea llamado a declarar.