La Xunta va a destinar 72.600 euros a una encuesta para saber lo que opinan los gallegos de la fusión de municipios, una vía por la que el presidente, Alberto Núñez Feijóo, apostó con entusiasmo hace una década, pero que solo ha fructificado en dos casos: Oza-Cesuras (A Coruña) y Cerdedo-Cotobade (Pontevedra):
El sondeo arranca la próxima semana, con la colaboración de la Fundación Juana de Vega, ha informado el Gobierno gallego. A los encuestados se les va a preguntar por su opinión sobre el tamaño actual de los municipios, por su interés en las fusiones y sobre otros procesos de “redimensionamiento” municipal. También habrá cuestiones sobre la percepción que tienen los ciudadanos de la remodelación de la planta municipal.
Dentro del proyecto se van a incluir entrevistas a representantes políticos y expertos para que den su visión de las alternativas con las que “racionalizar el mapa local actual”. La apuesta de la Xunta es la de reducir el número de municipios y promover que haya servicios e instalaciones compartidas entre varios para adelgazar la administración.
Cuando en 2012 Feijóo se reservó el anuncio de la fusión de Oza y Cesuras para el debate sobre el estado de la Autonomía, quiso lanzar una estrategia de uniones alimentada con el discurso de la austeridad en un momento de crisis económica. Su previsión era que a estos dos pequeños ayuntamientos de la provincia de A Coruña les seguirían muchos más. Lo cierto es que, diez años después, solo otros dos se han fusionado. Son los también poco populosos Cerdedo y Cotobade, que pasaron a ser uno en 2017.
El Gobierno gallego quiere promover nuevas fusiones y para ello ha consignado en sus presupuestos para 2022 una partida de 1,5 millones de euros. Antes de dar otros pasos, espera que la colaboración con la Fundación Juana de Vega sirva para abrir el debate sobre “la necesidad de actualizar el mapa político-administrativo” de Galicia.
En toda España solo otros dos municipios han dado muestras de querer seguir el ejemplo de las fusiones gallegas. Las localidades extremeñas de Don Benito y Villanueva de la Serena, con mucha más población que Oza-Cesuras y Cerdedo-Cotobade, han presentado una propuesta que está, por el momento, en fase de proyecto.