Los emoticonos cada vez son más utilizados. Ya sea para expresar nuestras ideas, ahorrarnos palabras o matizar aquello que decimos, siempre resulta recurrente acudir a estos dibujitos. De ahí que cada vez se valoren más su calidad y su variedad. Cuantos más haya y mayor sea su expresividad, más cosas podremos decir a través de ellos.
Es por esto que Facebook está apostando por la mejora en su servicio de chat de la comunicación a través de este tipo de imagenes. Su último esfuerzo para lograrlo ha sido contratar nada más y nada menos que a un dibujante de Pixar para que cree los emoticonos más expresivos que hayan existido nunca.
El origen
El 19 de septiembre de 1982 nacían, casi sin quererlo, estas entrañables figuras. Fue en la Carnegie Mellon University, en Pensilvania, y su padre fue Scott Fahlman. Este profesor de computación propuso utilizar una cadena de símbolos en el tablón de mensajes electrónicos utilizado por los estudiantes para debatir online, y así poder distinguir las bromas de los mensajes serios. El nacimiento del emoticono fue exactamente así:
Propongo la siguiente secuencia de caracteres para marcar bromas:: - )Léase de lado. En realidad, es probable que sea más económico marcar cosas que NO sean bromas, dadas las tendencias actuales. Para esto, úsese : - (
El propio Fahlam explica en su web qué le llevó a crear estos símbolos. “Dada la naturaleza de la comunidad, una buena parte de los posts eran de humor (o intento de humor). El problema era que si alguien hacía un comentario sarcástico, algunos lectores no captaban la broma”, dice el padre de los emoticonos.
Fahlam no podía imaginar lo que supondría su invento para el mundo de la comunicación. Once años después, David Sanderson creaba en su libro 'Smileys' el término ‘emoticono’, una palabra que ya hasta la RAE – por increíble que parezca - recoge en su diccionario.
Treinta años después…
En pleno 2013, los emoticonos han evolucionado y se han convertido, cómo no, en una herramienta más de las muchas que las empresas tecnológicas utilizan para luchar entre ellas.
En la batalla por el mercado de las aplicaciones de mensajería instantánea los emoticonos parecen jugar un papel fundamental. Si bien Whatsapp incluye una buena cantidad de emoticonos e iconos ‘emoji’, Line ha supuesto una revolución gracias a sus ‘stickers’. Que sí, que Line es gratuito y Whatsapp no. Y sí, Line permite hacer llamadas gratuitas y Whatsapp no. Pero muchos nos hemos descargado Line por el simple hecho de que sus stickers son, sencillamente, desternillantes. Tanto es así que 17 de los 58 millones de dólares de beneficios que tuvo la compañía asiática en el primer trimestre de 2013 proceden de la venta de estas graciosas imágenes – aunque Apple ya no permita comprarlas para regalárselas a otros usuarios.
…Facebook quiere reinventar los emoticonos
La red social de Mark Zuckerberg quiere dar un paso más en la evolución de los emoticonos. Al menos, así lo demuestra el trabajo que han llevado a cabo en la red social durante el último año.
Incluso viene de antes. El pasado agosto, Facebook incluyó iconos ‘emoji’ para su servicio de chat. Hace unos tres meses lo actualizó de nuevo, esta vez con la posibilidad de insertar ‘stickers’. Pero los de Menlo Park no quieren detenerse ahí. Y es que si los emoticonos nacieron ante la necesidad de aclarar el sentido sarcástico de algunas afirmaciones, ahora se les pide mucho más a estas imágenes. Cuantas más emociones puedan expresar, mejor.
Actualmente, el emoticono es una imagen tan pequeña que difícilmente permite distinguir las sutiles diferencias que hay entre, por ejemplo, el remordimiento, la vergüenza y la modestia. En la vida real, nuestros más de treinta músculos faciales – además de los gestos que podemos hacer con el resto del cuerpo - nos permiten distinguir perfectamente unos de otros. Pero en una imagen digital como los emoticonos es, a día de hoy, poco menos que imposible.
Facebook, no obstante, ha aceptado el reto y pretende conseguirlo. La red social quiere que sus emoticonos expresen a la perfección emociones humanas perfectamente comprensibles para sus usuarios. Pero, ¿cómo expresar la incomodidad, la debilidad, la felicidad, el asombro o la admiración en todos sus grados?
Pixar y Darwin como aliados
Para esta complicada misión Facebook ha contratado a un experto en transmitir en emociones: Matt Jones, dibujante de Pixar. El ilustrador, que trabajó en la película ¡Piratas!, será el encargado de dar vida a una nueva generación de emoticonos. ¿Pero cómo llegó Jones hasta Facebook?
Jones accedió a la oportunidad de trabajar para la red social mientras participaba en la nueva película de Pixar, 'Inside Out', dirigida por el director de 'Up'. El film, que será estrenado en Estados Unidos en junio de 2015, se desarrolla en el interior de la mente de una niña y sus emociones serán los personajes principales de la historia. Allí coincidió con Paul Ekman, psicólogo especializado en el estudio de las expresiones faciales.
Quiso la casualidad que uno de los protegidos de Ekman, Dacher Keltner, profesor de la Universidad de Berkeley, estuviera trabajando en colaboración con Facebook para mejorar sus emoticonos. Keltner, conocedor del nuevo proyecto de Pixar, fue a la compañía para interesarse por la adaptación de las expresiones faciales al mundo de la animación. Keltner y Jones se conocieron y empezaron a trabajar juntos para diseñar los nuevos emoticonos de la web de Zuckerberg.
Para empezar, Keltner le pidió a Jones que trabajara algunas de las emociones básicas – ira, miedo, alegría o tristeza - y el resultado fue más que satisfactorio. La siguiente fase pasaba, sorprendentemente, por Darwin.
Trece años después de publicar su revolucionario 'El origen de las especies', Darwin escribió 'La expresión de las emociones en el hombre y los animales', un estudio en el que el británico exploraba las similitudes entre los movimientos faciales humanos y los de los animales.
Cierto es que, a día de hoy, algunas de las expresiones recogidas por Darwin ya no se pueden considerar como movimientos faciales universales, utilizados por todos los humanos para expresar emociones. Aún así, el estudio es un amplio catálogo de movimientos faciales que, pese a los numerosos cambios que se han producido en la friolera de doscientos años, fueron muy útiles para el trabajo de Jones.
¿Cómo hacerlo?
Una vez estudiadas las expresiones faciales quedaba lo más difícil. ¿Cómo trasladarlas a un emoticono? Matt Jones experimentó con varias posibilidades: añadió nariz y hombro a los emoticonos, pero no funcionó. También probó a combinar otros colores que no fueran los tradicionales amarillo y rojo para ver cuál era el resultado con emoticonos de otro color, pero tampoco le convenció. Tuvo que trabajar las distintas expresiones modificando únicamente la inclinación de la cabeza, la posición de las cejas y de la boca y la posición de los ojos.
A partir de ahí, Jones ha sido capaz de crear una amplia variedad de emoticonos capaces de expresar emociones como el amor en distintos grados. El resto del camino por recorrer no es fácil. Ahora hay que reducir los bocetos al tamaño habitual del emoticono sin que pierda expresividad.
Además, Jones, como buen dibujante de Pixar, reconoce que le encantaría incluir movimientos para que los emoticonos estuvieran animados. Pronto podremos ver cuál es el resultado de su trabajo.