Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
ENTREVISTA

Joan Benejam, doctor: “La integración de la inteligencia artificial en la cirugía y el diagnóstico será el futuro de la urología”

Joan Benejam.

Martí Gelabert

0

El doctor Joan Maria Benejam Gual (Inca, 1967) es uno de los urólogos de referencia en las Illes Balears, trabaja en la clínica Juaneda y es uno de los pioneros en la cirugía laparoscópica de alta precisión, aplicada a patologías de la próstata, del riñón y de la vejiga. En 2020 fue nombrado coordinador del Grupo de Endourología Laparoscópica y robótica de la Sociedad Española de Urología.

Con motivo del LXXXVII Congreso Nacional de Urología que se celebra en Palma del 12 al 14 de junio, Benejam explica a elDiario.es las principales afectaciones de su especialidad, desde la importancia del tratamiento individualizado para las piedras en los riñones hasta los tres factores de riesgo para padecer un cáncer de próstata: la edad, la genética e incluso la raza. También cuenta cómo la IA cambiará la manera de diagnosticar y de operar a los pacientes, una revolución que será uno de los temas más recurrentes durante el congreso. 

Cuando hablamos de urología, ¿cuáles son las enfermedades más comunes que nos encontramos?

Todo lo relacionado con la patología prostática, tanto el crecimiento benigno de próstata como la preocupación de pacientes que pueden tener un cáncer. De hecho, mucha parte de nuestro trabajo va orientado hacia la oncología. Tenemos tres de los tumores que están en el nefasto top ten de los más prevalentes en el hombre y en la mujer: el de próstata, que es el más frecuente entre los hombres en España, el de riñón y el de vejiga. Pero también hay mucha patología infecciosa, trastornos funcionales, como la andrología, y la litiasis, las famosas piedras. Es una especialidad muy amplia.

Vayamos por partes y empecemos por esto último, las piedras.

La verdad es que es un problema de salud pública. De hecho, en Balears hasta un 14% de la población ha tenido un proceso de formación de piedras. Es una de las incidencias más altas del mundo, es mucha gente. Se han estudiado los factores y quizá el medioambiental es uno de ellos, porque aquí sudamos mucho y hace más calor que en otros sitios y formamos menos orina, pero también pueden influir ciertos factores hereditarios o algún tóxico que no sepamos. En Balears tenemos los científicos más importantes de Europa, y casi del mundo, que han estudiado las claves de la formación de las piedras y cómo prevenirlas, el doctor Feliciano Grases y su equipo de la Universitat de les Illes Balears (UIB).

¿Hablamos de una de las patologías que se puede prevenir mejor? 

Está muy bien estudiado que la medida universal para prevenir cualquier tipo de piedra es aumentar la ingesta de agua por encima de los dos litros diarios. Hace muchos años me pidieron qué tipo de agua, porque en algunos lugares es más mala, y yo contesté: agua, aunque sea del grifo. Otros líquidos pueden tener otras sustancias contraproducentes por un tipo u otro de piedra.

¿Hay que ir mucho al lavabo?

El número de micciones no tiene importancia, lo que tiene importancia es estar bien hidratado. Lo que sí aconsejamos a nuestros pacientes es que no aguanten mucho las ganas de orinar y, esto, es una medida que funciona mucho para las mujeres que tienen infecciones de orina. 

¿Cuáles son los signos de alerta cuando tenemos piedras?

Cuando uno ha tenido un cólico de riñón no se olvida. Cuando ya ha tenido uno y repite, ya entra por la puerta diciendo: “Tengo otro cólico”. Es uno de los dolores más fuertes. Le llaman el parto de la piedra, porque mucha gente lo compara al dolor de ponerse de parto. Si este cólico va asociado a una infección de orina, puede ser un cuadro especialmente grave. Hay mujeres, especialmente porque tienen más fácil establecer un cuadro de sepsis, que por desgracia han muerto por una pequeña piedra que había sobreinfectado la orina del riñón. 

¿Y cómo pueden llegar a condicionar?

A más de la calidad de vida, se pueden convertir en una pesadilla porque suelen ser patologías que se repiten. Un paciente diagnosticado con piedras tiene un 50% de posibilidades de volver a tenerlas. Son pacientes reiterativos y por eso es muy importante el identificar el tipo de litiasis e individualizar el tratamiento a cada paciente. Por ejemplo, hay piedras que se sabe, por su composición, que tienen más tendencia a reproducirse. Y las conductas dietéticas o el tratamiento individualizado a este tipo de piedra de este enfermo ayuda. Pero no a todos los enfermos les sirve la misma dieta. 

Un paciente diagnosticado con piedras tiene un 50% de posibilidades de volver a tenerlas. Son pacientes reiterativos y por eso es muy importante el identificar el tipo de litiasis e individualizar el tratamiento a cada paciente

Comentaba que las infecciones de orina afectan mucho más a las mujeres. ¿Por qué?

Tienen un cuadro que se llama ‘infecciones urinarias de repetición’. Consideramos que es aquella infección de orina de la que tienes más de tres episodios por año. Las mujeres, por su propia anatomía, tienen más predisposición a tener más infecciones. Es una causa muy frecuente de asistencia a cualquier consulta de médico de cabecera o urgencias: hasta un 20% de las urgencias de los hospitales son patología urológica y, dentro de ésta, las infecciones y los cólicos son las más habituales. 

¿Cómo se provocan estas infecciones?

Es difícil de generalizar, pero se basa en un equilibrio entre el sistema inmunitario y la agresión externa que puedas tener. Las mujeres tienen la uretra muy corta y es muy fácil que cualquier ‘bichito’ pase al orín y provoque una infección.

Por lo que respecta al cáncer, decía que el de próstata es el más común entre los hombres. ¿Se puede saber si hay algún factor concreto que lo cause?

Los factores de riesgo son tres: a más edad, más fácil padecerlo; si tienes un padre, un hermano o un tío con cáncer de próstata, tendrás muchas más posibilidades, y el otro es la etnia, los hombres negros tienen más frecuencia de tenerlo que los blancos. Fíjate que ninguno de estos factores son modificables: ni la edad, ni la raza, ni los factores hereditarios. Es decir, no es como el cáncer de pulmón o, en nuestra especialidad, el de vejiga o riñón, en los cuales está asociado que fumar es el factor de riesgo más importante y puedes hacer una prevención primaria. No podemos modificar nada, ni de la dieta ni de los hábitos de vida, para prevenirlo. Por lo tanto, tenemos que hacer una previsión secundaria, eso es un diagnóstico lo más temprano posible, sobre todo si se padece alguno de estos tres factores.

Los factores de riesgo son tres: a más edad, más fácil padecerlo; si tienes un padre, un hermano o un tío con cáncer de próstata, tendrás muchas más posibilidades, y el otro es la etnia, los hombres negros tienen más frecuencia de tenerlo. Ninguno de estos factores son modificables. La clave es un diagnóstico lo más temprano posible

¿Qué signos de alerta se deben tener? 

Dentro del campo de la urología hay un signo de alarma con el que la gente debe tener muy claro y muy identificado que tiene que ir corriendo al urólogo: orinar sangre es sinónimo de una visita urgente al médico, en cualquier patología urológica, aunque creas que tienes algún ‘justificante’. Por ejemplo, en las mujeres es muy probable que si tienes una infección puedas orinar sangre, pero se debe ir al urólogo igualmente. Porque hay que descartar que haya una patología consecuencia de este signo.

Pero es cierto que el problema del cáncer de próstata es que no tiene síntomas que lo puedan diferenciar del crecimiento benigno. A no ser que esté en fases muy avanzadas, que hayan desarrollado un dolor óseo o las complicaciones asociadas al estado terminal del enfermo. Pero, en fases iniciales, es indistinguible una patología benigna de una maligna. Por eso es clave el concurso del urólogo.

¿Qué porcentaje de éxito hay con este tipo de cáncer?

El 90% de los enfermos diagnosticados en fases iniciales viven a los cinco años. Cuando se diagnostica precozmente tiene una tasa de supervivencia muy alta, pero hay que ir con cuidado. En Mallorca cada año se diagnostican 600 enfermos, de los cuales mueren entre 100 o 150. En España, son 35.000 pacientes cada año diagnosticados, de los que mueren unos 5.000. Por lo tanto, es un tumor muy frecuente, y aunque no es tan letal como el de colón o pulmón, es la tercera causa de muerte de cáncer entre los hombres. Por eso nuestro reto es diagnosticar temprano. Si tienes factores de riesgo, en vez de los 50 años, que es la edad que aconsejaríamos a la población en general hacer la primera revisión si no tiene ningún tipo de sintomatología, la tendríamos que bajar a los 40 o 45.   

El 90% de los enfermos diagnosticados de cáncer de próstata en fases iniciales viven a los cinco años. Cuando se diagnostica precozmente tiene una tasa de supervivencia muy alta, pero hay que ir con cuidado

La cirugía utilizada también ha avanzado mucho en los últimos años. 

Sí, aunque los resultados no han mejorado con los nuevos procedimientos como la laparoscopia o la cirugía robótica. Me explico: se consiguen los mismos resultados ahora que con la cirugía abierta, pero lo que sí se ha mejorado son los resultados funcionales. El problema del cáncer de próstata es que cuando lo operas existe una alta probabilidad de provocar disfunción eréctil o incontinencia. Éstos factores funcionales se pueden mejorar con la cirugía laparoscópica y con la cirugía robótica, ya que es una cirugía menos agresiva. Algunos centros llegan a mantener en un 90% la potencia sexual y en un 95% la continencia. Aun así, se tiene que insistir que el robot no opera solo, hay un urólogo detrás. La experiencia del urólogo es lo que siempre condiciona los buenos resultados quirúrgicos, sea cual sea el tipo de cirugía. Aquí lo que hay que buscar no es un buen robot, sino un buen urólogo.

El robot no opera solo, hay un urólogo detrás. La experiencia del urólogo es lo que siempre condiciona los buenos resultados quirúrgicos, sea cual sea el tipo de cirugía. Aquí lo que hay que buscar no es un buen robot, sino un buen urólogo

Los otros tipos de cáncer más comunes, como el de vejiga y el de riñón, sí que se pueden prevenir mejor con un estilo de vida más sano. 

Aquí es clave eliminar la toxicidad del tabaco. Sobre todo para el de vejiga. Hace 30-40 años era casi exclusivamente masculino, porque estaba totalmente relacionado con el tabaco. Ahora las mujeres fuman más y también se ha notado el incremento de su incidencia. Necesariamente, si hay más concienciación sobre el papel negativo de fumar, creo que se reducirá la incidencia de este tipo de tumor. Y, por cierto, la combinación de tabaco y alcohol, gente que bebe y fuma mucho, es letal, aumenta por mucho sus posibilidades de tener este tumor.

¿Crece la detección de estos cánceres?

Ha habido países como Estados Unidos o Inglaterra que eran muy proactivos en el diagnóstico precoz del cáncer de próstata, pero relajaron un poco su campaña porque vieron que hacían un sobretratamiento y suponía un gasto sanitario alto. Lo que ha pasado ha sido que ahora, cuando diagnostican, es mucho más tarde. En España, en estos momentos, entre el 5-10% de los enfermos diagnosticados están en fases metastásicas y posiblemente baje. Hay que ir muy alerta con esto, porque en Estados Unidos e Inglaterra se consiguió que solo fuera un 5% y ahora están en el 20%. Está demostrado que ser proactivos a la hora de diagnosticar salva vidas.

Al inicio de esta entrevista comentaba que otra de las grandes afectaciones es la hiperplasia benigna de próstata. ¿Cómo afecta?

El enfermo vive como un cambio en su calidad de vida e integra que tiene un problema que se traduce en sintomatología que no tenía antes, pero es una condición inherente al envejecimiento humano. Así como envejecemos, también crece nuestra próstata. A los 80 años, el 80% de la población tiene un crecimiento benigno de próstata, lo que pasa es que este crecimiento no siempre está asociado a la obstrucción o a una sintomatología del tracto urinario. Si se da y no mejora con tratamiento médico, se pasa a la cirugía. 

¿Y la disfunción eréctil está relacionada con todas estas enfermedades?

Es parte de nuestra especialidad, está muy correlacionado. Por ejemplo, como efecto secundario de una cirugía, como te comentaba, pero también es verdad que es como la hiperplasia: así como te haces mayor tienes más probabilidades de tener estos problemas. Por el síndrome metabólico, por muchas razones. Está íntimamente relacionado. Está claro que a nivel de salud mental afecta a todo el mundo, pero yo diría más que nada que a una persona que no tiene una buena calidad sexual, que no tiene una función sexual adecuada, le afecta mucho a la calidad de vida. Gracias a Dios, también se ha mejorado y avanzado mucho. 

¿Cuáles pueden ser los próximos avances en el terreno de la urología? ¿Es posible vaticinarlos?

Serán importantes los nuevos biomarcadores, como el PCA en el cáncer de próstata, o los marcadores predictivos de respuesta como el estudio genético, ya que tenemos identificadas más a las familias con más riesgo de desarrollar un tumor de próstata: si la hermana o la madre ha tenido un cáncer de ovario o de mama, estas personas tienen mucha más probabilidad de tener un cáncer de próstata y que este sea más agresivo. Por ejemplo, si tienes la mutación del famoso gen de Angelina Jolie, el BRCA2, tienes más posibilidades de tener el cáncer y que sea más agresivo. Lo que quiero decir es que cada vez vamos más hacia el asesoramiento genético y que nuevos biomarcadores ayuden a predecir la respuesta al tratamiento que tengamos que dar a los enfermos. Es importante porque podemos hacer una medicina más individualizada, con un tratamiento más eficaz.

¿Y qué papel puede desempeñar la inteligencia artificial en todo esto?

Será uno de los temas recurrentes en el congreso. Incluso se puede aplicar en la cirugía, porque tenemos bases de datos mega enormes de cirugías y ya se saben los pasos complicados. También se pueden integrar imágenes de realidad aumentada y modelos 3D para hacer más fácil la cirugía. Estamos en unas fases iniciales en este aspecto, pero la aplicación de la IA en el campo de la cirugía y en el del diagnóstico será el futuro. 

¿Y un ejemplo en el campo del diagnóstico?

Para diagnosticar un cáncer de próstata tenemos que hacer una biopsia y un estudio anatomopatológico, es decir, se tiene que mirar en el microscopio. Pero ahora tenemos tantas imágenes de resonancias nucleares magnéticas que hasta un programa basado en IA puede decir casi con la misma sensibilidad y especificidad que una biopsia de próstata que tienes un cáncer. ¡Eso con solo una imagen! Estamos en una revolución en este aspecto. 

Tenemos tantas imágenes de resonancias nucleares magnéticas que hasta un programa basado en IA puede decir casi con la misma sensibilidad y especificidad que una biopsia de próstata que tienes un cáncer. ¡Eso con solo una imagen! Estamos en una revolución en este aspecto

¿Y en qué más se debe avanzar?

Yo daría gran importancia a la divulgación científica y a las campañas de educación sanitaria. Hay mucho que hacer. Un dato que siempre sorprende: el cáncer de próstata tiene la misma incidencia y mortalidad que el cáncer de mama. Cada año se diagnostica el mismo número y mueren el mismo nombre de hombres y mujeres. Todos tenemos interiorizadas las campañas de diagnóstico precoz del cáncer de mama y en el de próstata queda mucho camino por hacer. La Comunidad Europea ya está sensibilizada, ya ha dicho que uno de los nuevos cánceres por los que se tendrá que hacer campaña será éste, pero aún no sabemos cómo hacerlo, estamos determinando el camino. 

Etiquetas
stats