“A ver si cierran ya Telemadrid...”, es lo que se me ha venido a la cabeza al ver la apertura del informativo del domingo. Creo que hasta lo he dicho en alto.
Nunca creí que pronunciara esta frase. Es más, es público y notorio el plan de los malos de destruir servicios públicos en su afán de continuar con el expolio de lo de todos, y los medios públicos forman parte de esto. Por supuesto sustituirán esta tele por otra, supongo que privada e igualmente afín, claro.Hemos llegado a un punto donde Telemadrid hace daño.
Ya no es que manipule, tergiverse, mal informe... No, amigos, es que HACE DAÑO. Y con dinero publico e incumpliendo su mandato. Sí, ya sé: los trabajadores, la (muy defendida por mí, por cierto) necesidad de medios de comunicación públicos como parte de una Democracia, etc… Pero creo que aquí ya hemos perdido.Os dejo la apertura del informativo de las 14h del pasado domingo 1 de diciembre de 2013, día del 'fallecimiento', para mí, de este medio. Miradla, por favor:
Aquí tenemos a nuestro medio de comunicación público criticando como “miembros de una productora” han perseguido a una persona (criminal, sí) que ha cumplido su condena y ha salido a la calle, y no se les ocurre otra cosa que señalar dónde está esa persona y hacer una cámara oculta a los trabajadores de la pensión donde se supone que está durmiendo este señor. Y todo eso con dinero público. Innecesario, asqueroso, inmoral y mil cosas mal.
Una televisión, a la que le permitimos que hiciera esto (Otro momento en el que se me saltaron las lágrimas de rabia e impotencia, por cierto):
Que por si no os acordáis, es la nota manuscrita que le pasó Manuel Soriano, Director General de Telemadrid, al jefe de Gabinete de Esperanza Aguirre, Presidenta por entonces de la Comunidad de Madrid. La nota decía:
«“Querido Regino. Te mando la primera parte del documental que daremos el jueves y el viernes en prime time. Pásaselo a la presidenta. Creo que ha quedado bastante bien cinematográficamente e ideológicamente. Un abrazo, Manolo”.»
Al pobre Manuel Soriano, el autor de la epístola anterior al que la presión de sindicatos, trabajadores y público en general sobre la manipulación que ejercía en la televisión, consigue que en octubre de 2007 dimita de su cargo alegando “motivos personales”, pues claro, le nombran Presidente del Consejo de Administración del Ente Público Radio Televisión Madrid. Es más: en julio de 2013 es relevado del cargo de presidente, pero a día de hoy MANTIENE SU PUESTO COMO CONSEJERO DEL ENTE. Así funciona esta televisión, amigos. Así sigue funcionando. Ah, otra casualidad: el tal Manuel Soriano, antes de ser Director General de Telemadrid, fue Jefe de Prensa del Gabinete de Esperanza Aguirre, cuando fue Ministra. Empezó pronto su carrera este señor.
En otro orden de cosas, y como pequeño inciso, contaos que este episodio también supuso la constatación, por lo que a mí refiere, de la absoluta falta de empatía y humanidad de Doña Esperanza Aguirre, todo un ejemplo. Yo viví de cerca los atentados del 11M, dirigí un documental sobre ello, y la manipulación en torno al atentado (con la colaboración de Telemadrid y el liderazgo de Aznar y Ángel Acebes) fue uno de los sucesos que comenzaron a cambiar mi percepción de las cosas, y lentamente empezó a sacarme del sofá. El Chapapote y el 15M hicieron el resto.
Otro caso que fue muy famoso fue el de la emisión del reportaje “El coladero” sobre un teórica entrada irregular de inmigrantes por el aeropuerto de Barajas. Se demostro que era falso y el reportaje un burdo montaje. Es más, el reportaje se determinó que incumplió el código deontológico de la FAPE (Federación de Asociaciones de Periodistas de España), en el apartado, atentos: “compromiso de respetar la verdad”.
El presentador del informativo de Telemadrid presentó el reportaje diciendo:
“Telemadrid les va a mostrar en exclusiva cómo la T-4 es un auténtico coladero de inmigrantes ilegales”.
Casualmente aquí tengo una foto de ese momento. Mirad:
Y para acabar la historia esta, contaos que cuando se descubrió el pastel, que todo era una manipulación: que no seguía sucediendo, que la redactora había estado acompañada en todo momento por un policía... pues Telemadrid se disculpó. Bueno, no exactamente...
En micaso, ha sido en concreto esta historia señalando a una persona que ha salido de la cárcel, siguiéndola y espiándola usando una cámara oculta, la que ha “llenado mi vaso”, por decirlo así. Puede que tu estuvieras ya antes harto, o puede que no. Pero estoy convencido: no se puede salvar. Adios Telemadrid.
No penséis que cuento esta historia con alegría. Todo lo contrario. Esto lo veo como una derrota, ¿eh?. Hay mucho por lo que luchar. Entre otras cosas medios de comunicación públicos veraces y críticos. Que hagan un periodismo propio de una Democracia, necesario para que haya una democracia. Pero hoy, hemos perdido esta batalla.
Lo han conseguido. Felicidades, gobernantes. Felicidades, Partido Popular (en este caso). Objetivo cumplido: os habéis cargado las autonómicas.Todo mi apoyo al colectivo de extrabajadores de la entidad organizados en la plataforma Salvemos Telemadrid.Salvemos Telemadrid Lo que pasa, compañeros, es que como os he dicho arriba, me da que ya no se puede salvar esto. Espero equivocarme.
Para completar este post, le pedí su opinión al respecto al colectivo de extrabajadores de Telemadrid, aquí el texto que me enviaron:
Hay dos formas de actuar con respecto a un castillo desde el que se agrede a los habitantes del valle. Destruirlo completamente o reconquistarlo, detener a los agresores y utilizarlo para defender a los campesinos. Cuando un servicio público funciona mal no es cerrarlo en lo primero que deberíamos pensar. Puede que lo tengamos claro en Sanidad, Educación o la Policía, esas cosas que deberíamos tener todos aunque no dispongamos de mucho dinero.
¿Pero y las televisiones públicas? Veamos. Si una televisión pública como Telemadrid cerrara, la información local quedaría en manos de los empresarios que pudieran costearse la inversión de montar otra.
En realidad, las televisiones privadas son concesiones públicas puesto que el espectro radioeléctrico es finito. Y en Madrid resulta que todos los canales de la TDT fueron entregados a un mismo conglomerado ideológico varado en uno de los extremos. De una forma u otra, si no hay tv pública, el derecho a recibir información veraz queda a criterio de unos pocos, sin ninguna obligación concreta y que pueden optar por defender sólo sus intereses pese a utilizar unas ondas públicas. No hay que olvidar que una información plural es esencial para que haya democracia. Y muchas personas tienen en la tele su única fuente de noticias.
Una televisión pública plural y con vocación de objetividad es posible. Es fácil afirmar eso porque ya hemos tenido cosas parecidas y existen en el mundo. Basta cambiar a los gestores en unas elecciones. Puede ser que haya políticos malos gestores de lo público, pero también cabe sospechar que los haya con intereses para que la cosa no funcione y el pueblo del valle pida derribar el castillo. Puede que alguien pretenda el control de la información televisiva a perpetuidad eliminando lo público, si es que en lo privado tiene amigos para siempre. Lo público puede ser recuperado en unas votaciones y ser gestionado bien. En una televisión autonómica sirviendo de altavoz a todo tipo de demandas democráticas, recorriendo pueblos y barrios, abordando contenidos no “rentables” pero sí necesarios.
En realidad el político que manipula la televisión que le toca gestionar nos ofrece una gran ventaja. Si es capaz de utilizar el dinero público para sus fines particulares a la vista de todos, podemos deducir que en lo que no es tan obvio puede hacer lo mismo. Sólo es el canario que nos avisa de la existencia de grisú.
SalvemosTelemadrid
Espero que estos trabajadores refunden algo, inventen, cuenten historias, noticias. Espero que haya presiones, que se mueva la gente, que nos movamos en la defensa de lo de todos. Espero tener una tele pública de nuevo algún día, pero con este modelo, no.
Me sigue rondando por la cabeza este pensamiento de que si no podemos evitar que Telemadrid haga cosas como esta, tal vez mejor que no exista, peeeero...
Leyendo el texto de los compañeros de SalvemosTelemadrid tal vez pueda pensar otra cosa. ¿Hay solución a esto?. No lo sé, la verdad. Pero sus palabras me parecen sabias, insisto en la necesidad de medios de comunicación incependientes y críticos como elemento fundamental una Democracia funcione, y se me ha pasado un poco el cabreo también, la verdad.
Para acabar el post voy a repetir el gráfico con el que lo inicié, pero con una pequeña gran diferencia. Con esperanza.
Sobre este blog
Interferencia (Wikipedia): “fenómeno en el que dos o más ondas se superponen para formar una onda resultante de mayor o menor amplitud”.