Este lunes el presidente ruso, Vladímir Putin, tomó tres decisiones fundamentales: reconoció la independencia de las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk; firmó un tratado de cooperación militar con ellas y ordenó a su ministerio de Defensa que enviara tropas para el “mantenimiento de la paz” en el Donbás.
Cuarenta y ocho horas después, los líderes de ambas repúblicas han escrito al Kremlin reclamando ayuda “para repeler la agresión de las Fuerzas Armadas de Ucrania y así evitar víctimas civiles y prevenir una catástrofe humana” en el Donbás. Y todo esto en el mismo día en que están entrando en vigor los primeros paquetes de sanciones aprobados por la Unión Europea, Estados Unidos, Canadá y Reino Unido contra Rusia por haber reconocido la independencia de las repúblicas separatistas de Donetsk y Lugansk.
Para el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, la decisión supone “un paso peligroso que amenaza la vida de miles de personas”.
Ucrania, por su parte, ha pedido una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU para discutir “la escalada” que supone la petición al Kremlin de Donetsk y Lugansk.
En las últimas horas, las autoridades rusas han venido insistiendo en que el Donbás estaba sufriendo bombardeos por parte de las tropas ucranianas, que por otro lado desmienten Ucrania, la UE, la OTAN y EEUU. El representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasily Nebenzya, en la reunión de la Asamblea General de la ONU sobre Ucrania decía este martes por la noche: “Hicimos todo lo posible para preservar la soberanía y la integridad territorial de Ucrania. Es precisamente la falta de voluntad de Kiev para tener en cuenta los intereses de toda la población lo que llevado a Ucrania a estar en guerra desde 2014 con aquellos ciudadanos que no están de acuerdo con los valores de Maidan y la política actual de las autoridades ucranianas”.
Nebenzya, además, ha reprochado al secretario general de la ONU, António Guterres, quien ha criticado la entrada de tropas rusas en el Donbás, que “nunca haya alzado la voz a favor de la necesidad de cumplir con los pactos que exigen resolver todos los problemas por acuerdo entre Kiev, Donetsk y Lugansk”.
Washington, 23 feb (EFE).- El Pentágono se mostró hoy convencido de que Rusia ha comenzado la invasión de Ucrania, a la luz de los movimientos que ha adoptado en los últimos días.
El portavoz del Departamento de Defensa, John Kirby, ha dicho en una rueda de prensa que Moscú ha enviado soldados adicionales a la zona de Donetsk, en el este de Ucrania, y que estos militares no han avanzado más allá de esta zona. “Lo que vemos es que las fuerzas rusas han continuado concentrándose más cerca de la frontera y se encuentran en una fase avanzada de preparación para actuar o llevar a cabo una acción en Ucrania”, subrayó. Kirby indicó que en estos momentos el Pentágono cree que las fuerzas armadas rusas “están listas” para llevar a cabo en cualquier momento un ataque en territorio ucraniano.
El Pentágono ha anunciado el despliegue de 800 soldados estadounidenses más en los países bálticos –Estonia, Letonia y Lituania– para reforzar el flanco este de la OTAN. Los 800 efectivos forman parte de un batallón de infantería que se encuentran actualmente en Italia, y que será desplegado en la región báltica.
Además, EEUU trasladará desde Alemania 20 helicópteros de combate AH-64 a Estonia, Letonia y Lituania. En paralelo, el Pentágono enviará a “varias localizaciones” del flanco este de la OTAN ocho cazabombarderos F-35, que se hallan en Alemania; y ha dado luz verde a la transferencia de doce helicópteros AH-64 de Grecia a Polonia.
Estos movimientos de tropas y de equipamiento se suman a los más de 90.000 soldados que EEUU tiene desplegados en Europa bajo mandatos rotatorios y permanentes.
Violaciones del alto el fuego
Las violaciones del alto el fuego continuaron el martes en el este de Ucrania, un día después de que Rusia reconociera la independencia de las regiones de Lugansk y Donetsk, donde separatistas prorusos se enfrentan desde 2014 al Gobierno central, según informó la OSCE y ha recogido Efe.
En las dos provincias se contabilizaron el martes 1.710 violaciones del alto el fuego en vigor desde hace siete años, pero que nunca se ha cumplido plenamente, entre ellas 1.420 explosiones. En la jornada anterior se registraron 1.927 violaciones del alto el fuego y 1.481 explosiones. Esas cifras suponen una estabilización del número de incidentes documentados tras varios días en los que la OSCE reportó un progresivo aumento de la violencia, pero siguen estando por encima de la media de la última semana y son casi cuatro veces más altas que el promedio de lo que va de año.
Estado de excepción en Ucrania
Mientras, la Rada Suprema o Parlamento de Ucrania ha aprobado la implantación del estado de excepción decretado por el presidente, Volodímir Zelenski, ante el agravamiento de la situación en el este del país y la amenaza militar rusa, informa Efe.
La medida extraordinaria, de aplicación en todo el país, salvo en las regiones de Donetsk y Lugansk, fue adoptada con los votos de 335 diputados de 339 presentes. El decreto de Zelenski establece que el estado de excepción entre en vigor a partir de la medianoche del 24 de febrero por un período de 30 días en 22 regiones de Ucrania (todas menos las de Donetsk y Lugansk) y su capital Kiev.
Los jefes de las administraciones regionales de Kiev deben crear gabinetes operativos para la coordinación de acciones para la implantación del estado de excepción y garantizar su régimen jurídico.
El estado de excepción establece la prohibición de reuniones masivas y huelgas, el cambio de domicilio de militares y reservistas, el funcionamiento equipos de radioaficionados, así como la preparación de materiales informativos que puedan desestabilizar la situación en el país.
Además, incluye la evacuación de los habitantes de lugares peligrosos, el control de documentación de los ciudadanos, la regulación de las estaciones de radio y televisión civiles y la posibilidad de plantear la prohibición de las actividades de partidos políticos y organizaciones sociales en interés de la seguridad nacional y el orden público.