A tres semanas del comienzo de las primarias demócratas, el debate entre los principales candidatos del pasado martes dejó una imagen muy significativa. Una vez acabado, la senadora Elizabeth Warren se acercó a Bernie Sanders, este le estrechó la mano, pero ella, sin devolver el gesto, le reprendió por su comportamiento en el debate. Unos segundos después, se marcharon en direcciones opuestas.
En el vídeo inicial no se podía descifrar aquel cruce de palabras entre los dos candidatos más progresistas del Partido Demócrata. Menos de 24 horas después, la CNN publicó el audio. “¿Creo que me has llamado mentirosa en la televisión nacional?”, pregunta Warren. Ante el desconcierto de Sanders, Warren repite la frase. “No lo hagamos ahora. Si quieres tener esa discusión, la tendremos”, responde Sanders. “En cualquier momento”, le reta la senadora. Sanders continúa: “Tú me has llamado mentiroso. Has dicho que yo... No lo hagamos ahora”.
El candidato Tom Steyer se ve en medio del enfrentamiento cuando iba a saludar a los candidatos. “No quiero meterme, solo te quería saludar, Bernie”, dice al final. “Ah, vale”, responde el senador de Vermont.
El pacto entre Sanders y Warren para no atacarse en los debates llegó a su fin esta semana a raíz de un artículo de la CNN que cuenta que, en una reunión privada en 2018, Sanders supuestamente dijo a Warren que una mujer no podría vencer a Trump, que opta a la reelección. El lunes, la directora de comunicación de Warren compartió un comunicado de la senadora en Twitter confirmando lo ocurrido: “Yo pensé que una mujer podía ganar; él no estaba de acuerdo”, han sido sus palabras.
Este martes, como ya había hecho anteriormente, Sanders aseguró que el evento no tuvo lugar, mientras que Warren reiteró que ocurrió, aunque intentó restarle importancia. “Bernie es mi amigo, no estoy aquí para pelearme con Bernie”, intentó conciliar Warren. Pero, a continuación, propinó otro golpe: afirmó que los cuatro hombres que se encontraban en el escenario habían perdido en total diez elecciones, mientras que ella y la senadora Amy Klobuchar siempre habían vencido.