El futuro comisario de Comercio, Seguridad Económica y Transparencia, Maros Sefcovic, se ha puesto de perfil sobre la revisión del acuerdo de Asociación entre la UE e Israel durante su examen ante el Parlamento Europeo. Interrogado por el grupo de La Izquierda sobre la ruptura de ese pacto en virtud del artículo 2, que obliga a las partes a cumplir las exigencias del derecho internacional, el político eslovaco se ha limitado a decir que la “modificación” de los acuerdos comerciales requiere de la “unanimidad” de los estados miembros.
La petición de revisar el acuerdo de asociación con Israel la formularon en febrero Pedro Sánchez y su homólogo irlandés por las vulneraciones del derecho internacional en la masacre en Gaza. La UE acogió con frialdad esa medida por la equidistancia de muchas capitales con Tel Aviv. Ante la negativa del Gobierno de Benjamín Netanyahu a cumplir con la orden de la justicia internacional de parar la operación en Rafah, el club comunitario dio un paso al aceptar que se convocara al ministro de Exteriores en virtud de ese acuerdo, pero desde entonces el asunto está prácticamente paralizado porque se requiere pactar la agenda del encuentro y es complicado. El alto representante, Josep Borrell, forzará un debate sobre la revisión de ese acuerdo en la última reunión con los ministros de Exteriores que presidirá en noviembre.
“¿Cuándo van a suspender el acuerdo?”, le ha preguntado a Sefcovic la eurodiputada de La Izquierda Lynn Boylan (del irlandés Sinn Fein), que ha asegurado que Israel está cometiendo un “genocidio” en Gaza.
“La situación en Gaza es sobrecogedora y estamos presenciando una crisis humanitaria sin precedentes”, ha comenzado a responder el político eslovaco, que ha asegurado que la UE aplica los “instrumentos” de los que dispone para “impulsar un alto el fuego, canalizar la ayuda humanitaria para que llegue a Gaza” y trasladar a las autoridades israelíes la “prioridad” de la solución de dos estados. aplicamos instrumentos de que disponemos para asegurarnos para impulsar un alto el fuego tratando de canalizar ayuda humaniatria que llegue a gaza. dejamos ante los representantes del gob israeli que nuestra prioridad es la solucion de dos estados. “En cuanto a los acuerdos de asociación, sólo puede ser modificado por unanimidad en el Consejo”, ha zanjado.
La respuesta ha sido insuficiente para la parlamentaria, que ha acusado a la UE de actuar con una “doble vara de medir” al recordar que “no se están aplicando las mismas medidas contra Israel” que contra Rusia.
“Nosotros vemos los acuerdos de asociación como instrumentos o plataformas que nos permiten tener un diálogo abierto y franco con nuestros socios”, ha respondido Sefcovic, que lleva cuatro mandatos en la Comisión Europea. “Aprovechamos estas plataformas para trasmitir nuestra posición”, ha dicho sobre el caso de Israel, antes de reiterar que pasa por canalizar la ayuda humanitaria, el cese de la violencia, un alto el fuego y la solución de los dos estados.
Sefcovic también se ha remitido a la futura jefa de la diplomacia europea, Kaja Kallas, en quien recaerá en buena medida la posición al respecto. Lo que siempre ha explicado Borrell es que antes de llegar a la revisión del acuerdo comercial, son los estados miembros, a través de los ministros de Exteriores, los que tienen que determinar si se ha producido una vulneración del derecho internacional que suponga una brecha del pacto suscrito por parte de Tel Aviv. Y la UE, aunque ha ido endureciendo el tono, está dividida al respecto.
En el caso de la “prohibición” de importar productos de los territorios ocupados que le ha planteado la eurodiputado de Los Verdes Majdouline Sbai, Sefcovic ha asegurado que “los productos exportados por Israel desde los territorios oupados no disfrutan de ninguna de las ventajas de los acuerdos entre la UE e Israel”.
Sobre las relaciones con Estados Unidos y la preocupación de que una victoria de Donald Trump recrudezca la guerra comercial, el candidato ha dicho que ese país es un “aliado natural” y el principal socio comercial de la UE. “Sin duda, sigue siendo ventajoso para la Unión Europea y Estados Unidos trabajar juntos en vez de uno contra el otro. Así pues, independientemente del resultado de las elecciones estadounidenses, presentaré una oferta de cooperación”, ha aseverado.
A China la ha calificado como un socio “complicado” y “el que plantea más retos”, por lo que ha apostado por “reequilibrar esta relación en torno a la transparencia, la previsibilidad y la reciprocidad”. “Esto significa ser más firmes a la hora de cuestionar los desequilibrios estructurales y las prácticas desleales de China”, entre las que ha citado el exceso de capacidad, la falta de igualdad de condiciones o los problemas con los contratos públicos.
Otro de los asuntos sobre los que le han preguntado los eurodiputados ha sido el acuerdo con Mercosur. “Estamos en negociaciones de nivel técnico. Puede haber un momento en el que tenga que involucrarse el nivel político y espero que este acuerdo pueda finalizarse en condiciones muy justas”, ha defendido.
Sefcovic ha pasado el examen de la Eurocámara, para lo que requería el apoyo de al menos dos tercios de los coordinadores de los grupos. También lo ha hecho el maltés Glenn Micallef, nominado para Justicia Intergeneracional, Juventud, Cultura y Deporte. Han sido los primeros en someterse a las audiencias en el Parlamento Europeo, que seguirán este martes con los aspirantes para carteras como la de Vivienda, Medio Ambiente o Migración, entre otros.
Los platos fuertes serán el próximo martes 12, cuando pasarán por la Eurocámara los candidatos a la vicepresidencia, entre ellos Teresa Ribera. El calendario lo pactó el Partido Popular Europeo con todas las fuerzas de la ultraderecha precisamente para minimizar las tentaciones de tumbar a candidatos -que son mayoritariamente de su familia política ya que gobierna en la gran mayoría de estados miembros-. El PPE busca así que socialistas y liberales apoyen a sus candidatos, incluso al de la ultraderechista italiana Giorgia Meloni, a quien Ursula von der Leyen le ha reservado una vicepresidencia, bajo la amenaza de que pueden tumbar con sus votos a candidatos como Ribera o el francés Stéphane Séjourné, que también se examinará en la recta final.