El 1 de julio habrá certificado digital COVID en la Unión Europea. El Parlamento Europeo ha aprobado este miércoles –546 votos a a favor; 93 en contra; y 51 abstenciones– el acuerdo con el Consejo (los Gobiernos) para arrancar en tres semanas con el certificado, si bien ya hay países, como España, que se han adelantado a esa fecha –ya se han expedido más de un millón, según el comisario europeo de Justicia, Didier Reynders–. El acuerdo establece que la vacunación completa con inyecciones aprobadas por la UE, una PCR negativa o haber superado el coronavirus en un plazo de seis meses, habilita para viajar sin cuarentenas ni más requisitos dentro de la Unión Europea. Y, por analogía, abre las puertas a aquellos turistas de terceros países en las mismas condiciones, lo cual permitirá la llegada de personas vacunadas de países con las mismas vacunas, como Estados Unidos, Reino Unido o Israel, por ejemplo.
El Parlamento Europeo, que había defendido las PCR gratuitas, ha aprobado un reglamento que fija una financiación de la UE de al menos 100 millones de euros para tests para obtener el certificado.
“Este Parlamento es buena noticia con ocasión de una negociación completada en tiempo récord”, ha celebrado el socialista Juan Fernando López Aguilar, ponente del informe en la Eurocámara. La previsible del acuerdo supone “un mensaje positivo a la ciudadanía: el Parlamento Europeo está haciendo cuanto puede para relanzar la libre circulación en el espacio Schengen, preservando los derechos de los europeos, en particular la confidencialidad de los datos personales, respetando el derecho de igualdad, y con garantías de seguridad jurídica”.
López Aguilar también ha dicho en e pleno de Estrasburgo: “Cualquier medida adicional que puedan verse obligados a imponer [los Estados] debe hacerse en aras de la preservación de la salud pública, que justifiquen los motivos y expliquen el alcance”.
La portavoz del PP en el Parlamento Europeo, Dolors Montserrat, ha afirmado, por su parte: “La libertad de movimiento no será posible mientras las pruebas PCR sean inasumibles para muchas personas, como autónomos, estudiantes o familias. La defensa de la vida y la salud es compatible con la economía y la vacunación masiva y la expedición de los nuevos certificados COVID son las herramientas para ello”.
Podemos, por su parte, ha decidido abstenerse (como IU), y ha explicado en un comunicado: “El acuerdo alcanzado entre el Parlamento, el Consejo y la Comisión deja fuera una de las principales demandas de la Eurocámara y de la izquierda europea: pruebas gratuitas y accesibles para evitar la discriminación de quienes no hayan sido vacunados. La Comisión se ha comprometido a dedicar 100 millones de euros del Instrumento de Asistencia Urgente para facilitar que los Estados ofrezcan pruebas 'asequibles', pero se trata de una medida claramente insuficiente”.
Ernest Urtasun, eurodiputado de En Comú Podem y vicepresidente de los Verdes/ALE, ha votado a favor: “Este certificado facilitará de nuevo los viajes dentro de la UE. Es algo la ciudadanía ha estado esperando durante mucho tiempo y ahora podemos decir que la libre circulación de personas será, muy pronto, una realidad. Desgraciadamente, y a pesar del amplio apoyo que tiene, las pruebas no serán gratuitas en toda la UE”.
El eurodiputado de Ciudadanos y portavoz de Transporte y Turismo del Grupo Renew Europe, José Ramón Bauzá, ha aprovechado el debate para criticar a Reino Unido por restringir la movilidad de sus ciudadanos por “criterios políticos”.
“El país liderado por Boris Johnson es el principal emisor de turistas de Europa”, ha afirmado Bauzá, subrayando que “se trata de un enfoque innecesariamente restrictivo” ya que “no está basado en criterios sanitarios y responde, una vez más, a intereses políticos nacionales”.
La eurodiputada del PNV, Izaskun Bilbao, ha apoyado el certificado porque “permitirá recuperar progresivamente la libre circulación en territorio de la Unión este verano. La Unión Europea gana enteros cuando demuestra su utilidad”.
Jorge Buxadé, portavoz de Vox, ha dicho en la Eurocámara que “no va a apoyar ningún certificado COVID que privilegie a los vacunados y que busque atemorizar a las naciones”. El partido de extrema derecha se ha abstenido.