El Senado de Estados Unidos, de mayoría republicana, ha anulado este viernes el veto del presidente saliente Donald Trump a la ley del presupuesto anual de defensa, valorado en 741.000 millones de dólares. Es la primera vez en los casi cuatro años que Trump lleva en la Casa Blanca que el Senado invalida uno de sus vetos.
Con 81 votos a favor y 12 en contra, el Senado superó holgadamente la mayoría de dos tercios que necesitaba para anular el veto de Trump y convertir en ley el presupuesto de defensa, después de que la Cámara Baja votara a favor de esa iniciativa el pasado lunes.
El veto llega en los últimos días de la presidencia de Trump y promete elevar la tensión entre el mandatario saliente y los líderes de su partido en el Senado, con los que ya se ha enfrentado porque la mayoría ya han reconocido como presidente electo a Joe Biden, algo que el republicano no acepta.
La semana pasada, Trump se convirtió en el primer presidente en 59 años en oponerse a aprobar el presupuesto de defensa. El mandatario decidió vetar la llamada Ley de Autorización de Defensa Nacional para el año fiscal 2021 porque, entre otras cosas, restringe su capacidad para retirar a las tropas estadounidenses de Alemania, Corea del Sur y Afganistán, como había prometido.
Además, el presidente saliente se oponía a la ley porque incluye una provisión para cambiar el nombre de una decena de bases militares bautizadas en honor a los líderes de la Confederación sureña en la Guerra Civil (1861-1865), que se consideran un símbolo racista por representar a quienes defendían la esclavitud.
Trump quería que la legislación incluyera una cláusula para acabar con la llamada 'Sección 230', que protege a los gigantes de internet como Twitter y Facebook de cualquier consecuencia legal por lo que publican terceras partes en sus sitios web.
La Ley de Autorización de Defensa Nacional sirve para financiar las operaciones del Pentágono en el extranjero e incluye subidas de salario para los soldados, fondos para nuevo equipo militar y para pagar el cuidado sanitario de las tropas.
La tensión entre Trump y los líderes republicanos en el Senado también ha aumentado como consecuencia del retraso de cinco días del presidente en firmar un nuevo plan de estímulo por la pandemia y su exigencia de que se aumenten de 600 a 2.000 dólares los pagos directos a ciudadanos incluidos en esa ley.
Los líderes republicanos en el Senado bloquearon este viernes por cuarto día consecutivo el intento de los demócratas de aumentar el monto de esas transferencias directas a los contribuyentes con una renta anual menor a 75.000 dólares. Eso significa que la iniciativa, que ya aprobó el pasado lunes la Cámara Baja, no saldrá adelante por ahora, y en todo caso tendría que considerarse y votarse de nuevo a partir del domingo, cuando tomará posesión un nuevo Congreso surgido de las elecciones de noviembre.
“(Aprobar ese cambio) sería socialismo para gente rica”, opinó este viernes el líder republicano en el Senado, Mitch McConnell, en un discurso en el pleno del Senado. Los estadounidenses que cumplan las condiciones de renta recibirán en cambio un pago único de 600 dólares, como contemplaba el plan de estímulo aprobado en diciembre.