La Universidad Panamericana ha reaccionado ante la última polémica que pone en entredicho al presidente mexicano y que afecta a la institución. Tras la publicación de una investigación que acusa a Enrique Peña Nieto de plagiar casi el 30% de su tesis para obtener el título de Licenciado en Derecho, la universidad ha afirmado que revisará el caso.
En un breve comunicado, la Universidad Panamericana apunta que “la Facultad de Derecho está a cargo de revisar lo concerniente a este tema”.
Este lunes, Aristegui Noticias denunció que Peña Nieto plagió un 28,8% del contenido de su tesis universitaria, en la que se adjudicó palabras de autores a los que no había citado de manera correcta y, en algunas ocasiones, ni siquiera mencionó en su trabajo.
Según la investigación, de los 682 párrafos que componen la tesis, “197” fueron copiados. Al menos “diez autores” se vieron afectados por los 'corta-pega' del hoy presidente de México. El caso más sangrante, destacan los periodistas, es el del expresidente Miguel de la Madrid Hurtado, al que Peña Nieto no mencionó en ningún momento y “reprodujo íntegros al menos 20 párrafos” de su libro Estudios de Derecho Constitucional.
La Presidencia de México ha reconocido “errores de estilo como citas sin entrecomillar o falta de referencia a autores que incluyó en la bibliografía”, pero ha lamentado que sean de “interés periodístico” dos décadas y media después.
La Universidad Panamericana defiende sus criterios, “calidad” y “ética” y destaca que la institución no fue consultada en la investigación que acusó de plagio al presidente.
Además, el organismo recuerda que “cuenta con procedimientos para que los procesos de titulación cumplan con los requisitos previstos en la normatividad avalada por las autoridades correspondientes”. Ahora la Facultad de Derecho revisará si la tesis de Peña Nieto respetó esas normas.
Este nuevo escándalo se suma a otras investigaciones que afectan al presidente mexicano y a su esposa, como la publicada recientemente por The Guardian que los relacionan con apartamento de lujo de un valor superior a los dos millones de dólares comprado por el Grupo Pierdant, uno de los candidatos a construir puertos en México.