Ya ha terminado la Gamescom, la que viene a ser, año tras año, la feria de videojuegos más famosa de Europa y una de las más importantes a nivel mundial junto con el E3 y el Tokio Game Show; el escaparate ideal para que los estudios y editoras más importantes del panorama, así como los pequeños desarrolladores y los grupos de trabajo europeos, presenten sus últimas novedades de cara a calentar la campaña navideña.
Tras el subidón del E3 en junio, la Gamescom de Colonia suele ser algo más relajada, sirviendo de reconfirmación para lo que se nos avecina, de segunda oportunidad para demostrar virtudes y elevar el hype. Sin embargo este año tiene un sabor distinto gracias a la multitud de nuevos anuncios. Se nota que Sony no quiere bajarse del primer puesto en la lucha por dominar la nueva generación mientras que desde Microsoft no van a dar la batalla por perdida tan pronto, ya que ambas compañías han contado con unas conferencias y presentaciones realmente fuertes.
Juegos como Quantum Break, Ori and the Blind Forest y Rise of the Tomb Raider han ejercido de artillería pesada para allanar el camino a una Xbox One que necesita de todos los grandes títulos posibles; mientras que Bloodborne, Rime, Until Dawn, Wild y el nuevo Silent Hills creado por Hideo Kojima y Guillermo del Toro han hecho lo propio para una PS4 cuyo despegue parece no perder fuelle.
Las grandes firmas como Electronic Arts también han presentado sus mejores bazas, confirmando por ejemplo el enigmático Shadow Realms y presentando un buen puñado de nuevos detalles de Dragon Age: Inquisition con un extenso tráiler gameplay; mientras que por otro lado también contamos con ausencias, como una Nintendo que no suele estar muy presente en la feria europea.
Y son precisamente las ausencias las que más nos interesan. No son muchas, pero ahí están, ya que hablamos de juegos que llevamos esperando mucho tiempo y que parecen habernos dado esquinazo de nuevo.
Tras posicionares como una de las franquicias emblema de la pasada generación de consolas, es lógico que la expectación en torno al nuevo Mass Effect, episodio que en teoría será exclusivo de PC y la next gen, sea realmente altísima. En BioWare lo saben, al igual que saben que cualquier nota soltada al aire sin una profunda meditación previa puede hacer que los fans de la franquicia se alcen en armas. Es por ello que todo lo que nos llega de este juego lo hace en cuenta gotas.
Ya durante el E3 pudimos ver un video con el equipo hablando de su proceso de desarrollo. Todo muy bonito, sí, pero nos faltaron detalles concretos sobre el juego en sí. Queremos saber cosas sobre su historia, sus personajes, las posibles nuevas mecánicas, sobre la vuelta del vehículo Mako, sobre la exploración, el sistema de combate y los matices RPG. Y por encima de todo, queremos verlo en movimiento.
Pero nada, ni el E3 ni la Gamescom 2014 han servido a dicho propósito, por lo que todo apunta a que tendremos que esperar al año que viene.
Tras ejercer de buque insignia de todas las anteriores consolas Xbox, no cabe la menor duda de que la próxima entrega de las aventuras del Jefe Maestro es el título más esperado de Xbox One, con la misión además de demostrar de lo que es capaz esta consola a nivel técnico.
Las expectativas por lo tanto son altísimas por lo que todos esperábamos que desde Microsoft y 343 Industries realizasen una presentación del juego por todo lo alto, con todo lujo de detalles y tráiler ingame, que viene a ser lo mismo que esperábamos del E3. Sin embargo nuestro gozó quedó en un pozo, con los de Redmond centrándose en la Master Chief Collection, título que llevará a One los cuatro primeros juegos numerados de la saga completamente remasterizados a 1080p.
De hecho el momento en el que empezaron a dar tanto bombo a las partidas multijugador en un mapa de Halo 2, con demostración gameplay incluida, llegó a ser de las partes más tediosas y frustrantes de la conferencia para todos aquellos que esperábamos noticias de Halo 5 más allá de las breves pinceladas presentadas sobre su beta. Con Halo Channel, una especie de punto de encuentro para todo lo que tenga que ver con Halo en Xbox One, ya remataron la faena.
Si Halo 5: Guardians es el encargado de crear un nuevo estándar de videojuego en Xbox One, lo mismo se puede decir de Uncharted 4: A Thieft’s End para Playstation 4.
Con permiso de The Last of Us, estamos ante la saga de mayor renombre para el que hoy por hoy es el estudio más aclamado de Sony, un Naughty Dog que parece estar apostando fuerte por esta nueva aventura pese a haberse enfrentado a la salida de muchos de sus principales talentos durante los primeros compases del año.
Ya durante el E3 tuvimos un primer tráiler con imágenes del juego en movimiento, luciendo un acabado sencillamente espectacular. Para esta Gamescom esperábamos nuevos detalles, y quizás -por pedir que no quede- otro tráiler más cargadito en cuanto a contenido. Sin embargo nos hemos quedado con las ganas, ya que ni este juego ni la propia Naughty Dog han tenido la menor presencia en la feria, dejando hueco a los estudios europeos de Sony.
Salvando las distancias lo mismo nos ha pasado con otros dos de los estudios internos más reputados de la firma nipona: Guerrilla Games, responsables de la saga Killzone, y Sony Santa Monica, creadores de God of War.
Ambos estudios andan inmersos en el desarrollo de proyectos secretos de los que poco o nada se sabe por ahora salvo pequeños retazos extraídos de diversas declaraciones y ofertas de empleo publicadas, aunque lo más destacable de todo es que ambos parecen querer dejar a un lado por un tiempo a sus sagas más emblemáticas.
De Guerrilla sabemos que andan inmersos en una nueva IP de mundo abierto con un fuerte componente online, un cuidado apartado sonoro y la posible presencia de dinosaurios; mientras que de Sony Santa Monica sabemos que la nueva IP en la que trabajaban, supuestamente con toques de ciencia ficción, ha sido cancelada o reiniciada tras la reestructuración de su plantilla. Ahora se dice que podrían haber vuelto a las andadas con un nuevo God of War, pero como decimos, aún hay nada oficial, y la Gamescom nos parecía una buena ocasión para quitar algo de misterio al asunto.
El retorno de una de las franquicias más queridas de Michel Ancel se estaba convirtiendo ya en un caso Half Life 3 o The Last Guardian. Es decir, que todos lo esperábamos desde tiempos inmemoriales pero nunca llegaba.
Finalmente, a pocas jornadas de que diera comienzo la Gamescom, desde Ubisoft decidieron soltar el bombazo de que Beyond: Good & Evil 2 se encuentra efectivamente en desarrollo en las oficinas de Ubisoft Montreal, aunque por desgracia no especificaron nada más concreto ni mucho menos adelantaron ningún detalle contundente. Nos pusieron pues la miel en los labios, y aunque sabíamos que la editora gala no tenía planeada ninguna conferencia para la feria, teníamos la esperanza de que contasen con un buen espacio en la conferencia de Sony o Microsoft para ofrecer los primeros detalles del que se espera que sea uno de los grandes juegos de 2015.
Finalmente nos quedamos con las ganas, aunque al menos tuvimos ocasión de descubrir el prometedor Wild, primer título desarrollado de forma independiente por Michel Ancel y que desarrollará en paralelo a Beyond: Good & Evil 2.
Ya durante la mismísima conferencia de Sony en la Gamescom no fueron pocos los usuarios que señalaron la total ausencia de PS Vita. La portátil parecía haberse esfumado, como si no existiera, dejando que todo el protagonismo cayera sobre los ya fornidos hombros de PS4.
El año pasado Sony realizó un considerable esfuerzo por llevar a Vita una buena batería de títulos Triple A de sobrada calidad como Killzone: Mercenary y el genial Tearaway (título que por cierto contará con una nueva versión para PS4), sin embargo tras el lanzamiento de la consola next gen parecen haberse olvidado de ella en los grandes eventos, algo que sólo sirve para potenciar la sensación de que finalmente acabará por convertirse en un ‘periférico caro’ de PS4.
En especial echamos en falta Gravity Rush 2, título que supuestamente está en desarrollo en las oficinas de Sony Japan y del cual esperamos tener nuevos detalles durante el Tokio Game Show.
Cuando Microsoft anunció su flamante Xbox One presentó Kinect 2.0 como una parte fundamental e indivisible de la misma, asegurando que era el instrumento ideal para disfrutar de una nueva experiencia en el terreno de los videojuegos, algo por lo que merecía la pena pagar 100 euros más respecto a su gran rival, PS4.
Sin embargo la realidad ha sabido superar todas esas afirmaciones, y finalmente la compañía ha decido comercializar su consola sin el periférico. ¿Quiere decir eso que todas las Xbox One que están ahora mismo en las tiendas son mancas, mudas o cojas? Ni muchísimo menos. De hecho la gran mayoría de los jugadores dicen no echar para nada en falta al periférico, al igual que no se echó demasiado en falta durante la conferencia de prensa de la compañía en la feria.
Así es, porque Microsoft decidió olvidar de repente que cuentan con un sistema de control por movimiento avanzado que seguramente les habrá costado una millonada en I+D, y a nadie pareció importarle. De hecho hasta se agradeció que volvieran a centrarse, tal y como hicieron en el E3, en los videojuegos, que a fin de cuentas es lo que realmente nos gusta a los jugadores.
La Gran N no está ejerciendo precisamente de Reina del Baile en las últimas grandes ferias, y en el caso de la Gamescom sencillamente ni se presenta candidata.
Este año los de Kioto han pasado por alto cualquier tipo de conferencia o presentación oficial para optar por lanzar nuevos detalles de forma discreta, dado que ya se jugaron todo lo que tenían en el E3 con una buena batería de anuncios como la presentación de las primeras imágenes en movimiento del nuevo Zelda de Wii U. De esta forma durante la Gamescom pudimos conocer algo más del esperado Super Smash Bros., fijar la fecha de lanzamiento de Sonic Boom: Rise of Lyric y poca cosa más.
Se sabe que en Nintendo guardan más de un As en la manga. Después de todo cuentan con una infinidad de grandes franquicias además de tener el talento suficiente como para crear nombres nuevos como por ejemplo Splatoon, pero ya sabéis que no son muy dados a presentar nada que no cuente con un estado de desarrollo avanzado, por lo que de momento no nos queda otra que esperar como poco al Tokio Game Show.