Al menos 16 personas murieron tras la explosión de un coche bomba frente a la Embajada de Estados Unidos en Yemen, según informó una fuente de las fuerzas de seguridad del país, quien añadió que entre los muertos había seis terroristas y diez soldados yemeníes que se encargaban de custodiar el complejo diplomático.
Un portavoz de la embajada confirmó anteriormente que la explosión se efectúo con un coche bomba y que había víctimas mortales, sin precisar el número de ellas. “Esta mañana, un coche explotó frente a la entrada principal de la Embajada en Sana”, indicó.
La cadena de televisión Al Arabiya informó de que un grupo autodenominado Yihad Islámica en Yemen se responsabilizó del ataque y pidió al presidente del país, Ali Abdulá Saleh, la puesta en libertad de algunos de sus miembros, que se encuentran en prisión. En un comunicado, este grupo declaró su “responsabilidad por el atentado suicida contra la Embajada norteamericana en Sanaa” y amenazó con “llevar acabo una serie de atentados en otras embajadas” si sus peticiones no encontraban respuesta del Gobierno yemení.
Yemen, país de los antepasados de Usama bin Laden y que se unió a la guerra contra el terrorismo emprendida por Estados Unidos en 2001, ha sufrido atentados de Al Qaeda en los últimos años. Entre ellos, otro contra la Embajada estadounidense, uno más contra la italiana y varios que tenían como objetivo a turistas occidentales, entre ellos siete turistas españoles muertos en julio de 2007 por un atentado contra el convoy en el que viajaban.
El pasado mes de marzo, un grupo vinculado a Al Qaeda reivindicó el atentado contra la Embajada norteamericana que causó heridas a trece escolares por herida de mortero. Atentado por el que Estados Unidos ordenó regresar a todo el personal de la embajada “prescindible”.