Hoy 26 de julio es el Día del Abuelo y la Fundación Edad&Vida quiere rendir homenaje a los abuelos, que juegan un papel económico y social clave para comprender la evolución de España desde el comienzo de la crisis, contribuyendo a aumentar el bienestar de la familia.
Es un hecho comprobado que las pensiones de los abuelos están sirviendo en muchos casos para ayudar a hacer frente a las hipotecas de sus hijos, pagar las clases extraescolares de sus nietos e, indirectamente, al cuidar de ellos, promocionar el ahorro y que ambos miembros de la pareja, especialmente las mujeres, tengan mayores posibilidades de acceder al mercado laboral.
Para Joaquim Borrás, presidente de la Fundación Edad&Vida, es necesario reconocer el esfuerzo de todos los abuelos. “Para muchas familias se han convertido en el eje principal a nivel económico, además de jugar un papel clave en la educación de sus nietos”, afirma.
No obstante, según el estudio ‘La figura de los abuelos y abuelas esclavos en Cataluña’ promovido por la Fundación Mémora, “casi la mitad de las personas mayores de 60 años cree que existe la figura de los ‘abuelos esclavos’”, es decir, abuelos y abuelas que se ven obligados a atender a sus nietos de manera no voluntaria, normalmente por demanda de sus hijos.
Según este estudio, el 73,3% de los abuelos afirma que cuida de sus nietos. Normalmente los abuelos son los encargados de llevar y recoger a los nietos del colegio (27%) y darles de comer o de cenar (24%) cuando los padres están trabajando.
En cuanto a quién decide en qué momento se hacen cargo de los nietos, el 46,8% de los ‘abuelos cuidadores’ afirma que es una decisión que toman de manera conjunta, mientras que el 30,8% asegura que la decisión recae en el hijo o la hija, y sólo un 12,6% reconoce que son ellos quienes lo deciden.
El presidente de Edad&Vida ha incidido en el rol fundamental que desempeñan los abuelos en el cuidado de sus nietos, siempre que asuman esta responsabilidad de forma voluntaria.
Asimismo, ha recordado que las personas mayores son un colectivo especialmente desprotegido, por lo que se hace preciso “velar por el buen trato a los abuelos desde las administraciones públicas, instituciones, empresas y organizaciones sociales; pero también desde el ámbito privado de la familia y el entorno más cercano a los mayores”.
Borrás ha insistido en la necesidad de proporcionar un envejecimiento activo a los abuelos y abuelas. “Hay que hacer que se sientan más útiles y reducir los sentimientos de soledad y tristeza”, ha explicado.