Este domingo, a las ocho de la tarde, se iniciará la tradicional procesión de los Santos Mártires san Emeterio y san Celedonio, acto con el que comenzará el programa religioso en honor a los patronos de la Diócesis, así como de la ciudad de Santander.
Será al día siguiente, el lunes 30, cuando se celebre la solemnidad de los Santos Mártires, jornada festiva en la ciudad de Santander, y en la que se conmemora la memoria litúrgica de estos dos hermanos que fueron martirizados, por su fe, hacia el año 298 en Calahorra (La Rioja).
En los actos programados participarán el Cabildo catedralicio y los miembros de la Corporación municipal de Santander.
Por su parte, el lunes, día 30, es la solemnidad de los Santos Mártires san Emeterio y san Celedonio y a las 12 del mediodía, el obispo de Santander, Vicente Jiménez Zamora, presidirá la misa solemne en la que también intervendrá la coral Valle de Piélagos-Salcedo.
A lo largo de esa jornada festiva, las reliquias de los patronos de la Diócesis y de la ciudad de Santander, permanecerán expuestas en el interior de la Catedral para que puedan ser veneradas por los fieles.
SAN EMETERIO Y SAN CELEDONIO
San Emeterio y san Celedonio eran oriundos de Calahorra (La Rioja) y sufrieron en esta ciudad el martirio durante la persecución romana de Diocleciano, en torno al año 298.
Los hermanos Emeterio y Celedonio militaban en las legiones romanas, pero las abandonaron para profesar, públicamente, su fe en Cristo.
Por ello, fueron llevados ante un tribunal en el que confesaron su fe, por lo que fueron atormentados en la cárcel durante algún tiempo.
Más tarde, en las afueras de la ciudad y junto al río Cidacos, afluente del Ebro, sufrieron el martirio y fueron decapitados en una jornada de un 3 de marzo. Allí quedaron sepultados sus restos.
Posteriormente, las reliquias de los Santos Mártires fueron traídas a Cantabria en la Alta Edad Media para protegerlas de las incursiones árabes, tal como también ocurrió con otras muchas que se veneraban entonces.
Las reliquias de san Emeterio y san Celedonio estuvieron ocultas durante mucho tiempo bajo la actual Iglesia de El Cristo de Santander, pero en unas excavaciones realizadas en 1531 se hallaron y se encerraron en los dos actuales relicarios para ser expuestas al culto en este templo, donde ahora reposan.