El ex presidente Laurent Gbagbo ha negado que se haya rendido ante la presión internacional y la del legítimo presidente de Costa de Marfil, Alassane Outtara, que venció en los comicios celebrados el pasado mes de noviembre.
Pero, Gbagbo ha ido a más en su resistencia y ha declarado que él fue quien ganó las elecciones y, por tanto, quien debe seguir gobernando el país. En declaraciones a la televisión francesa, LCI, el presidente saliente ha pedido que cesen las hostilidades y ha admitido únicamente que se están “discutiendo las condiciones de un alto el fuego con otras fuerzas sobre el terreno”.
Sin embargo, este miércoles aún no se han tomado decisiones en lo que concierne al vacío de poder político existente en el país y la única solución que plantea es sentarse a dialogar con Alassane Outtara, a quien considera perdedor en la segunda vuelta y con quien debe sellar la paz, rota por este conflicto poselectoral y que está a punto de llevar al país marfileño a una nueva guerra civil.
El problemas principal es que ambos candidatos se declaran legítimos ganadores, como han declarado vía telefónica al canal francés LCI en una entrevista concedida en la tarde del martes. En esta misma intervención, el presidente saliente Gbagbo ha criticado la postura francesa por la intervención de su Ejército en los asuntos internos de Costa de Marfil. En este punto, el Gobierno Francés anunció a finales de la semana pasada que acudiría para proteger a sus nacionales, que se calcula en el orden de los 12.000 residentes en la ex colonia francesa.
Gbagbo acusa además a los soldados franceses de haber bombardeado su palacio presidencial y todas sus municiones para forzar su caída. Entretanto, testigos y habitantes de Abiyán han declarado que la situación es de extrema violencia en algunos barrios donde los residentes europeos son el principal objetivo de los grupos armados.
En último término, tropas francesas y de Naciones Unidas lanzaron el martes una ofensiva final a Gbagbo, que ha provocado deserciones en sus filas lo que le ha forzado a solicitar un alto el fuego.