La Rioja registró en 2009 un total de 118 siniestros forestales con 339,74 hectáreas de superficie forestal afectada en un año atípico en cuanto a siniestralidad por los incendios intencionados de Ezcaray responsables del 75% de la superficie total quemada durante el año pasado.
De los 118 siniestros contabilizados en 2009, ocho más que el ejercicio anterior, el 76%, es decir 89 siniestros, fueron meros conatos con menos de 1 hectárea afectada y se produjeron 29 incendios.
Datos generales de 2009
-Número de siniestros: 118
Número de conatos (menos de 1 hectárea): 89
Número de incendios (más de 1 hectárea): 29
-Superficies afectadas
Terreno forestal: 339,74 hectáreas:
Terreno arbolado: 82,18 hectáreas
Terreno no arbolado: 257,56 hectáreas
Terreno no forestal: 22,28 hectáreas
La superficie forestal media quemada en 2009 fue de 2,88 hectáreas por siniestro y los meses con mayor número de incendios fueron marzo y abril. En estos dos meses tuvieron lugar el 36% de los episodios y se quemó el 7% de la superficie forestal de todo 2009. Destacan, además, los meses de julio, agosto, septiembre y octubre en los que debido a un verano muy seco se produjeron el 35% de los siniestros y la superficie forestal quemada fue el 82% del total anual.
El pasado año fue un año atípico en cuanto a siniestralidad por dos factores: la adversa climatología durante el verano y el otoño con escasas precipitaciones y los cuatro incendios intencionados registrados en Ezcaray responsables del 75% de la superficie total quemada en 2009.
El incendio de mayor extensión se produjo en Azarrulla, en Ezcaray, el 5 de octubre y se quemaron de forma intencionada 109,72 hectáreas de matorral y monte abierto.
Desde el punto de vista meteorológico, 2009 se ha caracterizado por ser un año de predominante sequía estival en cuanto a la distribución de lluvias, con escasez de precipitaciones respecto a la media del último decenio. Las temperaturas medias fueron superiores a la media de los últimos diez años.
Causas de los incendios
Durante 2009, el 80% de los incendios se debieron al factor humano, con un 19% producto de negligencias y causas accidentales y un 61% tuvieron su origen en quemas intencionadas. En un 13% de los incendios no llegó a determinarse la causa.
De entre las negligencias y causas accidentales la más frecuente fue la propagación a terreno forestal de las quemas agrícolas. Entre las quemas intencionadas, la motivación más repetida fue la eliminación de vegetación en fincas, acequias y ribazos, así como la quema incontrolada de residuos agrícolas.
En 2009 se produjo un incremento de las quemas intencionadas relacionadas con prácticas agrícolas inadecuadas y un descenso parejo de las negligencias.
Evolución de incendios en La Rioja
La meteorología adversa y la intencionalidad de algunos de los incendios han marcado un año, 2009, que, no obstante, se mantiene en la media del último decenio en cuanto al número de incendios.
En la última década se viene constatando en La Rioja una disminución tanto del número de incendios como el de conatos y superficies quemadas.