La Cofradía Nuestra Señora la Virgen de la Soledad se constituyó como tal en 1965 y comenzó a salir en procesión un año después, portando el Viernes Santo a la Virgen de la Soledad, que representa el doloroso sentimiento de la Virgen tras la muerte de su hijo, y fue donada por Gabriel de Unsain en 1964 a La Redonda.
Se trata de una talla muy preciada, en la que, como explica el recientemente elegido Hermano Mayor, Alfonso Ruiz, destaca sobre todo el manto, que data de 1949 y es de terciopelo negro con bordados en oro. Posee tres kilos de oro, lentejuelas del mismo metal y encajes, con 4 metros de ancho por 5 de largo.
“Tenemos un gran patrimonio que tenemos que cuidar. El manto se va desgastando, tenemos que arreglarlo ahora y nos cuesta mucho dinero restaurarlo, con lo que esperamos que haya voluntarios para dar algún donativo para arreglar el manto que es una preciosidad, una verdadera joya”, asegura Ruiz.
Además, el Miércoles Santo la Cofradía, que cuenta con 200 miembros, saca en la procesión de 'El Encuentro' la imagen de la Virgen Dolorosa, que representa a la Virgen sola con el rostro destrozado por el dolor ante la Pasión de su hijo,