La campiña cordobesa ha sido la más afectada por las fuertes lluvias que AEMET había anunciado para la tarde del miércoles y que, finalmente como indicaban los pronósticos, cayeron. Lo hicieron con mucha fuerza en las localidades de Villa de Río y Cañete de las Torres, donde la riada desatada por la tormenta acabó con la vida de una anciana de 80 años, que fue arrastrada por la corriente que anegó las calles del municipio. La mujer no pudo evitar ser llevada por la fuerza del agua, que la arrastró a más de un kilómetro y medio de su casa hasta una finca ya a las afueras del pueblo.
Además hay un número indeterminado de viviendas evacuadas, pero que podría aproximarse al centenar en la zona de Huertos Familiares. Mientras, en Cañete este número asciende hasta las 150 casas desalojadas porque el agua ha llegado a alcanzar los dos metros de altura.
Desde la pasada madrugada, una vez cayó la tormenta, los vecinos de estas localidades limpian las calles y achican el agua de sus casas, que han quedado convertidas en un barrizal. Los bomberos de la localidad de Cañete han declarado que la situación es de “auténtico desastre” con dos calles “muy afectadas” ya que el agua ha canalizado por ellas “reventando” a su paso puertas de forja y arrastrando decenas de vehículos. Por otro lado, a lo largo del jueves los bomberos trabajarán en la limpieza del alcantarillado, que ha quedado bloqueado por la gran cantidad de material arrastrado por la corriente.
La tromba de agua, que comenzó a caer en torno a las 17:30, provocó también el corte de la vía del tren en Villa del Río, donde 140 pasajeros fueron evacuados y trasladados para seguir su viaje. La A-4 a su paso por Córdoba tambiéns sufrió cortes, aunque el tráfico ha quedado ya restrablecido.