La Guardia Civil ha procedido a la desarticulación de una secta con la detención de sus seis presuntos responsables, quienes supuestamente se hacían con el patrimonio de sus miembros tras lograr “el control sobre sus voluntades” mediante coacciones con ritos esotéricos y satánicos.
Según informó el Instituto Armado en un comunicado, la denominada 'operación Creador' se inició a principios del pasado mes de septiembre, cuando tuvo conocimiento de que en una vivienda ubicada en Chiclana de la Frontera (Cádiz) se podrían estar practicando ritos satánicos en los que se sacrificaban animales.
Tras seis semanas de investigación, los agentes pudieron comprobar la veracidad de los hechos, logrando identificar a las personas que dirigían tales ceremonias, resultando ser una pareja formada por C.J.R.L., de 34 años de edad, y M.M.P., de 24.
ANUNCIO POR PALABRAS
Según la Benemérita, estas personas se anunciaban en la sección de “anuncios varios” de diversos medios de comunicación con el siguiente texto: “Profesor, Vidente, Brujo Satán Espiritual, experiencia y seriedad, poder en todos los ámbitos para solucionar problemas, especialmente de amor, recuperar pareja, quitar mal de ojo, impotencia sexual, etc. Garantizado 100 por 100. Resultados tres días”.
Una vez los potenciales clientes contactaban con la pareja mencionada, estos les ofrecían la solución a cualquier problema a través de todo tipo de actividades relacionadas con la santería, esoterismo y ritos satánicos, que se celebraban en la vivienda de los detenidos.
Con sus actividades, los presuntos autores llegaban a “anular la personalidad de sus víctimas, creando un vínculo de subordinación y dependencia total” hasta conseguir, en algunos casos, que accedieran a la venta de todas sus propiedades para entregar el importe de esa venta a la pareja en cuestión.
Del mismo modo y tras convencerles de que si desobedecían sus órdenes el diablo mataría primero a sus familiares y luego a ellos mismos, lograban que sus víctimas actuaran como sus “esclavos”. Los hombres llegaron a trabajar haciendo reformas en el domicilio de la pareja, mientras que las mujeres --a las que llamaban “mujeres de Satán”--, realizaban tareas domésticas.
EL “VERDADERO HIJO DE SATÁN”
Las víctimas sufrían todo tipo de vejaciones, insultos y en algunos casos privación de libertad, obligándoles a asistir a rituales satánicos, donde se sacrificaban animales. En estos ritos se entregaban elevadas cantidades de dinero --siempre superiores a los 3.000 euros--, tras autoproclamarse uno de los ahora detenidos como verdadero hijo de Satán.
Según las mismas fuentes, como consecuencia de todo lo anteriormente relatado, algunas de las víctimas podrían padecer algún tipo de trastorno y están siendo tratadas por personal cualificado. En el curso de la investigación se pudo comprobar que utilizaban el mismo número de teléfono de contacto para la venta de vehículos, sofás, aparatos de aire acondicionado y otros bienes arrebatados a sus víctimas.
Simultáneamente invertían el dinero obtenido con sus actividades en la compra de vehículos de alta gama procedentes de Alemania y, tras alterar las indicaciones del cuenta-kilómetros y falsificar la documentación, los vendían por un precio muy superior al de compra.
NUEVOS IMPLICADOS
Para el desarrollo de las actividades relacionadas con la compraventa de vehículos, C.J.R.L. y M.M.P. contaron con la colaboración de otras cuatro personas, encargadas de la importación de los turismos, manipulación del kilometraje, falsificación de la documentación y su traslado a los supuestos compradores.
Estas personas fueron identificadas como M.A.V.A., chileno de 46 años de edad, y D.E.R., de 26 años, ambos vecinos de El Bosque (Cádiz); A.D.L.Z., de 33 años y vecino de San Fernando (Cádiz) y M.H.D., de 44 años y vecino de Schwalbach (Alemania).
En los registros domiciliarios practicados por la Guardia Civil a los detenidos, les fueron intervenidos numerosos efectos que eran utilizados en los rituales, tales como dagas, objetos satánicos o “pócimas”. Igualmente aparecieron restos de animales sacrificados enterrados en el jardín del domicilio. Asimismo, fueron intervenidos cuatro vehículos de alta gama.
Finalmente, el Instituto Armado significó que la operación continúa abierta, por lo que no descarta próximas actuaciones tras la recepción de nuevas denuncias.