El tenista madrileño Fernando Verdasco, el murciano Nicolás Almagro y el catalán Tommy Robredo se convirtieron esta madrugada en los primeros españoles en alcanzar los octavos de final del Abierto de Australia, primer 'grande' del año, ronda en la que se encontrarán ahora con el checo Tomas Berdych, y con dos de los grandes favoritos, el serbio Novak Djokovic y el suizo Roger Federer, respectivamente.
El último de los tres componentes en llegar a la cuarta ronda en Melbourne Park fue Verdasco, noveno favorito, que tuvo de todos ellos el encuentro más plácido ante el japonés Kei Nishikori, mientras que Almagro peleó y mostró solvencia ante el croata Ivan Ljubicic, y Robredo remontó al ucraniano Sergey Stakhovsky.
El jugador madrileño tenía enfrente un rival con un fuerte saque y un tenis agresivo, pero ninguna de estas dos supuestas virtudes aparecieron en el juego del nipón, que apenas inquietó al semifinalista de 2009, cayendo en tres mangas por 6-2, 6-3 y 6-3 en dos horas.
Verdasco supo recuperarse del duro partido ante el serbio Janko Tipsarevic y dominó de principio a final a un Nishikori, que sólo conectó 15 'ganadores', por los 36 del español, y que con su segundo servicio no fue demasiado contundente.
El madrileño sólo perdió su saque en el primer parcial, pero lo compensó con tres 'breaks' que le permitieron encarrilar el choque. Sin bajar el ritmo ni relajarse, el noveno favorito logró roturas en el séptimo y quinto juegos de la segunda y tercera manga, respectivamente, para finiquitar su partido y citarse con su primer rival de nivel, el checo Tomas Berdych, finalista en Wimbledon 2010.