La puesta en marcha de Madrid Central se retrasa de nuevo. La portavoz del Gobierno municipal, Rita Maestre, ha anunciado en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno que las restricciones del tráfico en el centro empezarán a funcionar el próximo 30 de noviembre, una semana más tarde de lo previsto. Se mantiene, según ha informado el consistorio, la inauguración de la nueva Gran Vía para el 23 de noviembre.
Con este cambio de fecha se evita la coincidencia del arranque de implantación de Madrid Central con el Black Friday y el inicio de la campaña madrileña. La patronal CEIM había pedido al consistorio que un retraso hasta después de navidades que ha sido escuchado parcialmente con una demora de una semana.
La decisión se anuncia un día después de que la Comunidad de Madrid solicitara por carta la paralización “con carácter inmediato” del plan de movilidad del Ayuntamiento. El presidente Ángel Garrido fundamentó su petición en la “la improvisación” con la que se quiere llevar a cabo; el “carácter ”unilateral“ de dicha actuación y por la ”ausencia total y absoluta de estudios previos necesarios para evaluar tanto el proyecto como los dispositivos de movilidad que se tuvieran que poner en marcha“.
También en el día de hoy, la Comunidad de Madrid ha convocado una reunión urgente y monográfica de su comisión delegada para tratar el asunto de Madrid Central el próximo viernes a las 11. Un encuentro que, según la delegada de Medio Ambiente del Ayuntamiento, su equipo había solicitado hace meses.
El presidente, Ángel Garrido, ha pedido al consistorio que lleve a esta reunión toda a la documentación y estudios que avalan Madrid Central, “más allá de las dos diapositivas” que, según su discurso, les han presentado, y las alternativas en cuanto a movilidad previstas. El PP ha basado su discurso de oposición frontal a la medida en que el Ayuntamiento no les ha ofrecido la información necesaria para poder hacer una planificación del transporte público, una competencia que corresponde a la Comunidad de Madrid.
Estos dos anuncios dan una tregua momentánea a las tensiones en escalada de los últimos días entre las dos administraciones, que culminaban el martes con una amenaza de la Comunidad de Madrid de poner en manos de los “servicios jurídicos” un recurso al plan del Ayuntamiento para reducir la circulación de vehículos privados en el centro de la capital.
Con los cambios de última hora, el calendario queda así: tras la reunión extraordinaria del CRTM, el lunes 29 se celebrará una Junta de Gobierno extraordinaria para aprobar definitivamente Madrid Central, medida incluida tanto en el Plan A de Calidad del Aire como en la ordenanza de Movilidad Sostenible.
La portavoz del consistorio, Rita Maestre, asegura que no habrá cambios sustanciales en su aprobación y califica el retraso de una semana como un cambio “leve”. “Una semana antes o después no afecta de manera estructural al proyecto”. “La salud de los madrileños y madrileñas es nuestra prioridad”, ha subrayado.