Cambio de proyecto a un mes de las elecciones para el Centro Deportivo Municipal de Las Rosas. El Ayuntamiento de Madrid ha aprobado este jueves la construcción de un pabellón polideportivo cubierto en el distrito de San Blas-Canillejas, sobre una parcela en la que inicialmente se había previsto un gimnasio con piscina que iba a explotar una empresa durante los próximos 40 años.
En lugar de ceder la gestión a una empresa privada, el centro deportivo lo levantará ahora el área de Obras y Equipamientos, que cambiará la piscina por una pista para deportes de equipo como fútbol o baloncesto, y dos graderíos con capacidad para acoger a un millar de personas. La parcela sobre la que se levantará está ubicada en la calle Mónaco.
El futuro Centro Deportivo Municipal Las Rosas, que tendrá 6.700 m2 de superficie, costará 14,1 millones de euros y contará también con gimnasio, vestuarios, zonas de control y administración, además de una cafetería.
El cambio del proyecto ha venido motivado por la cercana Ciudad del Deporte del Atlético de Madrid, que el club rojiblanco construirá a escasos metros, alrededor del estadio Metropolitano. El área de Obras explica que con ella “se cubren muchas de las necesidades deportivas que se planteaban” y que la Junta de San Blas-Canillejas advirtió que adolecía de “un pabellón polideportivo cubierto, que es además una histórica demanda vecinal”, puntualizan en declaraciones a Somos Madrid.
Respecto a esta Ciudad del Deporte rojiblanca, la única instalación acuática que se conoce hasta el momento es una piscina de olas para la práctica del surf al aire libre. También contará con varios equipamientos municipales en dos parcelas anexas. La primera tendrá pista de atletismo con graderío y un campo de fútbol en su parte central y la segunda cuatro pistas polideportivas cubiertas para la práctica de deportes de equipo como balonmano, fútbol sala, voleibol o bádminton. Además de cuatro pistas de pádel descubiertas.
Luz verde a dos privatizaciones de polideportivos en Las Tablas y Montecarmelo
El cambio de opinión del Ayuntamiento de Madrid en San Blas no se repetirá, de momento, en otras zonas de Madrid. En la misma Junta de Gobierno en la que se ha revertido la privatización del centro deportivo de Las Rosas se ha aprobado dos privatizaciones durante los próximos 25 años para construir sendas piscinas con gimnasio en Las Tablas y Montecarmelo, en el distrito de Fuencarral-El Pardo.
El primero estará ubicado en la calle Frómista, 33 y el segundo en la avenida Monasterio de El Escorial, 94. Ambos contarán con más de 5.000 m² bajo el modelo de piscina grande, otra de aprendizaje y tres plantas en las que también se ubican cinco salas para actividades dirigidas, dos salas de ciclo indoor y una sala multitrabajo (musculación, cardiovascular y peso libre).
Durante el cuarto de siglo de explotación, las empresas que ganen ambos concursos deberán construir las instalaciones y abonar al Ayuntamiento un canon fijo del 5% de los ingresos previstos y otro variable que consistirá en el 10% de la diferencia positiva entre los ingresos que figuren en las cuentas anuales aprobadas y auditadas del ejercicio que sean presentadas a la Administración y los ingresos estimados en la memoria económico-financiera del contrato.
La imposición de este último canon variable no ha sido habitual en el resto de concesiones de obra adjudicadas durante esta legislatura, que han desligado el canon de un mejor rendimiento económico respecto a los cálculos previos.
La inversión inicial prevista es de 12 millones de euros, IVA excluido, en el caso del centro deportivo de Las Tablas, y de 11,7 millones de euros, IVA excluido, en el caso del centro deportivo de Montecarmelo. Los licitadores que acudan al concurso podrán aportar mejoras en accesibilidad, reducción de emisiones de CO2 y de consumo de agua, así como más actividades deportivas que las mínimas exigidas, entre otros añadidos por los que sumarán puntos.
El Ayuntamiento de Madrid ha adjudicado o tiene previsto sacar a concurso hasta 12 centros deportivos municipales por el método de la concesión de obras, privatizando durante décadas la gestión de los centros a cambio de que la construcción le salga gratis. Es lo que ha hecho en el CDM Cuatro Caminos (en Tetuán), el de Ricardo Damas (Arganzuela) o en el Paseo de la Dirección.
El modelo no ha tenido éxito en todos los casos: la privatización del CDM de Valdebebas, que apostaba por el mismo modelo de cesión a 25 años, quedó desierta al no interesarse ninguna empresa por su explotación.