El viernes 12 de marzo un puñado de Ampas de colegios comenzó en Madrid una protesta para exigir a las administraciones que pacifiquen sus entornos escolares y convertirlos en espacios seguros y libres de humos.
Las familias de nueve colegios de la capital se movilizaron en esta jornada, con Chamberí a la cabeza en el número de centros participantes: la comunidad del Asunción Rincón, Fernando el Católico y Rufino Blanco se sumaron a la reivindicación para vaciar la calzada de coches y llenarla de niños.
En el Asunción Rincón se cortó cortó la calle Jesús Maestro y se organizaron juegos como ajedrez o tres en raya gigante, además de pintura con tiza y hasta un concierto a cargo del grupo Tereshkova Swing.
La calzada de la calle Vallehermoso situada entre el colegio Fernando el Católico y el Mercado Municipal albergó a decenas de niños pintando, jugando y aprendiendo repostería en un taller de galletas. También contó con la música en directo del grupo Jottock 445.
La mayor superficie ocupada fue la de los cuatro carriles de la calle General Álvarez de Castro, llenada por las familias del Rufino Blanco, que bailaron, patinaron y pintaron frente a su colegio, en una estampa inédita.
Los cortes al tráfico en Chamberí apenas causaron problemas de tráfico. Solo en el caso de la interrupción en Vallehermoso se produjeron ligeras retenciones, que fueron inexistentes en Álvarez de Castro y Jesús Maestro. Allí, algunas familias comentaban que si se peatonalizaran sus entornos de forma definitiva el tráfico de la zona no se vería alterado.
Algunos partidos políticos apoyaron la primera revuelta escolar de Madrid: los concejales Rita Maestre y Jorge García Castaño (Más Madrid) se pasearon por los cortes de calles, al igual que los ediles Mar Espinar e Ignacio Benito (PSOE).
Otros movimientos ciudadanos, como la Casa de Cultura de Chamberí, apoyaron la protesta con el sonar de su batucada.
La movilización que llegaba a la capital comenzó en diciembre en Barcelona, donde los cortes de calles se cuentan a día de hoy por decenas y el Ayuntamiento se ha mostrado abierto a mejorar los entornos escolares.
Las próximas manifestaciones de la Revuelta Escolar tendrán lugar en Madrid el jueves 25 de marzo, justo antes de las vacaciones de Semana Santa. Las familias de varios centros escolares que no participaron en esta primera movilización han comunicado ya que se unirán en la segunda tanda.