El pasado 17 de enero, la vida le cambió a Miguel, una persona de avanzada edad que mendiga habitualmente en la calle Fuencarral. Un joven de apariencia latina le robó a su perro, un menudo yorkshire, tirando de su correa y marchándose corriendo.
Miguel, que en ese momento estaba en la calle Alburquerque, no pudo seguirlo. A su avanzada edad se le suman unos problemas de visión que le hicieron imposible defenderse del robo y recuperar a Miki. A los pocos días denunció a la policía los hechos y la sustracción de su perro, que llevaba chip.
“No duerme desde hace diez días, lo está pasando muy mal”, explica a Somos Chamberí una de las personas que está ayudando a Miguel a intentar recuperar a su perro. La voz de alarma la dio hace unos días el periodista Gustavo Morales en su perfil de Facebook, donde relataba los hechos:
Las personas que están ayudando a Miguel han iniciado una campaña en redes sociales para intentar encontrar a Miki, a la vez que los vecinos y comerciantes cercanos se interesan por el estado de salud de su dueño y le ayudan en su día a día.
La campaña se ha lanzado con el hastag #mikirobado y busca cualquier pista que ayude a dar con el paradero de este simpático yorkshire. Las personas que crean que pueden tener alguna aportación que contar, pueden enviarla al correo mikirobado@gmail.com.
Se da la circunstancia de que casi al lado de donde habitualmente se encuentra Miguel, otra sinhogar denunció un episodio de violencia hace unos meses. Flor, una anciana rumana de 85 años, fue agredida por varias personas mientras dormía en la calle Cardenal Cisneros, una vía que corta con Alburquerque, donde se produjo el robo de Miki.