El pasado miércoles la tienda de Loewe en el número ocho de la calle Gran Vía recibía la visita de unos ladrones, que a través del sótano del portal contiguo de la calle Víctor Hugo número 1 consiguieron acceder al establecimiento y hacerse con un botín de bolsos y complementos valorado en más de medio millón de euros.
Según explicaba este viernes el diario El Mundo, los delincuentes habrían forzado desde el sótano una puerta que da acceso a la tienda y, tras anular la alarma, recorrieron las tres plantas del negocio para coger los bolsos complementos y artículos exclusivos de la firma. También intentaron, sin éxito, abrir la caja fuerte.
Tras percatarse del robo, el responsable de la tienda acudió la mañana del miércoles a la Policía Nacional, donde denunció que los ladrones se habían llevado bolsos y complementos por valor de más de medio millón de euros. La Policía Nacional investiga el caso y está analizando las grabaciones de las cámaras de seguridad de la zona para localizar a los autores.
Las primeras pesquisas apuntan que los ladrones pudieron emplear una furgoneta de una empresa con rótulos de mantenimiento para aparcar en la zona y pasar desapercibidos.
El método empleado en la operación implicaba el estudio pormenorizado de los planos del edificio de Gran Vía y de las fincas aledañas, lo que sugiere una gran planificación.