Una nueva y moderna Gran Vía: así es su nueva imagen

Este viernes la ciudad de Madrid será testigo de la inauguración oficial esta tarde de uno de los proyectos estrella del equipo de Manuela Carmena: la remodelación de la Gran Vía. Un acto que coincidirá además con la encendida de las luces de Navidad y el Black Friday, que incrementarán el tránsito peatonal por esa importante vía de la ciudad.

Meses de trabajos cuyos avances hemos ido viviendo de manera paulatina y que han convertido la Gran Vía en una calle más moderna, con árboles y plantas, con más espacio para caminar (y para las terrazas) y una nueva distribución de carriles por los que en cuanto esté operativo Madrid Central a partir del 30 de noviembre solo podrán circular algunos coches.

Estos son los principales cambios que nos trae la nueva Gran Vía de la era Carmena:

Aceras más anchas

El principal objetivo de esta reforma era darle mayor espacio a los peatones para caminar, que ganan uno de los carriles que pierde la calzada. Esto ha obligado a reordenar los carriles por los que circulan los vehículos y las bicicletas y a construir seis nuevos pasos de peatones.

6.800 metros cuadrados más para los peatones, que en total podrán caminar por  los 28.571 metros cuadrados de aceras de la Gran Vía madrileña.

Árboles y vegetación

La nueva Gran Vía también será un poco más verde que sus predecesoras. Además de crear un nuevo espacio verde a los pies del edificio Metrópolis, con alcorques circulares en torno a los cuales se han instalado también algunos bancos, se han colocado otros alcorques alargados en los que, además de árboles, también se han colocado algunas plantas.

Las especies de plantas que acompañarán a los árboles serán de diferente color en cada tramo de la Gran Vía: Alcalá/Red de San Luis, Red de San Luis/Callao y Callao/Plaza de España.

En cuanto a los árboles, en total se han plantado 89 de la especie Pyrus Chanticleer, de hoja caduca. Una especie muy popular por su fácil adaptación a las ciudades y su crecimiento contenido. El objetivo es que den sombra en verano y que tiñan de color la Gran Vía con los tonos ocres del otoño y las flores blancas en primavera.

Nuevo mobiliario urbano, bancos y asientos

Otra de las apuestas del Ayuntamiento de Madrid para la nueva Gran Vía es el mobiliario urbano. Salvo por las papeleras, que conservan el diseño de otras instaladas en el Centro, el resto de elementos elegidos para Gran Vía están de estreno.

Destacan especialmente la instalación de asientos de piedra y bancos de madera modulares, con uno de los diseños ganadores del concurso de ideas que convocó el Ayuntamiento y votó la ciudadanía madrileña, que permitirán poder descansar a lo largo de toda la Gran Vía.

También destacan las farolas, con una tecnología LED, más respetuosa con el medioambiente y más eficientes energéticamente, que proporcionan a la Gran Vía una mayor iluminación que las anteriores luminarias.

Semáforos de diseño

Otro de los elementos que más ha llamado la atención de los peatones han sido los semáforos. Con un diseño que apuesta por los elementos redondos en lugar de las líneas rectas, algunos de ellos incorporan también iconos de parejas de mujeres y parejas de hombres, aunque la representación mayoritaria sigue correspondiendo a la figura masculina.

Nuevo asfalto y nueva configuración de carriles

Tras la reforma la calzada de la Gran Vía queda con dos carriles de circulación para cada sentido: uno para transporte público (carril bus/taxi) y el otro para coches y bicis. Una distribución que cambia en el tramo de Callao a Plaza de España, donde se ha creado un carril bici independiente del resto de los vehículos, en sentido subida.

En cuanto a los materiales usados en la calzada, el asfalto es fonoabsorbente, lo que permite reducir el ruido producido por el contacto de las ruedas con el suelo.

Las obras de la Gran Vía en imágenes