Una de las imágenes más reconocibles de Madrid vuelve a mostrarse tal y como fue levantada. Operarios municipales retiraban este lunes los 2.200 metros cuadrados de lonas que han cubierto durante los últimos 16 meses la Puerta de Alcalá, el tiempo que ha durado el análisis de sus daños y su restauración.
Un centenar de personas han participado en los trabajos, informa el Ayuntamiento de Madrid en la nota de prensa en la que ha comunicado el final de la restauración, dentro de un proyecto que la delegada de Cultura califica de “absolutamente preciso y exquisito”.
La Puerta de Alcalá llevaba cubierta desde que en julio de 2022 el consistorio la cubrió para estudiar los daños que había causado sobre el monumento la borrasca Filomena y el intenso tráfico que soporta cada día a su alrededor. Después de un análisis previo ejecutó un proyecto de rehabilitación que ha durado diez meses y que concluye ahora. Durante este periodo se ha propuesto repensar la movilidad en torno a la obra que levantó Carlos III.
El proceso para descubrir completamente la Puerta de Alcalá se desarrollará en tres fases, una por cada sección del monumento, comenzando por el lado sur -hacia Alfonso XII-, donde ya se ha retirado la lona y a lo largo de esta semana se desmontará el andamio, para pasar después a la parte central y a continuación al lado norte.
Durante la retirada de los andamios y de la lona, se levantarán las casetas de obra y se acondicionará el entorno ajardinado del monumento, trabajos que terminarán en fechas navideñas, por lo que finalmente se instalará un nacimiento.