El humorista Ignatius Farray será el pregonero de las Fiestas de Pez 2019

Las Fiestas de la calle Pez ya tienen pregonero y avance de programa. El encargado de anunciar la celebración será Ignatius Farray, humorista tinerfeño-malasañero que es vecino del barrio y desde hace años permanece muy ligado al bar Picnic, uno de los locales emblemáticos de la zona.

El pregón anunciador tendrá lugar el viernes 14 de junio, a partir de las 19.00 en la pequeña plaza de Carlos Cambronero, donde se colocará un escenario para albergar actuaciones, al igual que sucedió el pasado año. Será el segundo fin de semana consecutivo con actividades especiales en la zona, ya que este domingo 9 de junio se celebra el festival de arte urbano Pinta Malasaña.

Este es el avance del programa (todavía no definitivo, sujeto a cambios), de las Fiestas de la calle Pez 2019:

JUEVES 13 DE JUNIO

JUEVES 13 DE JUNIO

VIERNES 14 DE JUNIO

VIERNES 14 DE JUNIO

Centro Dos Amigos: Taller de poesía y de animación a la lectura

Centro Antón Martín: Taller de Bailes de Salón y Taller de Sevillanas

Centro Benito Martín Lozano: Actuación en vivo del Grupo Sensaciones y Taller de encajes de bolillo

18:00-18:20 JUEGOS POPULARES (por grupos)

18:30-18:50 BODYCOMBAT (grupo general, cuantos más participantes mejor!)

Exhibición NINJA WARRIOR (CAMPEÓN NINJA WARRIOR USA)

19:00-19:20 Clase de HABILIDADES GIMNÁSTICAS (con nuestro gimnasta,

Aprender a hacer el pino)

19:30-19:50 BODYATTACK (grupo general, cuanto más participantes mejor!)

SÁBADO 15 DE JUNIO

SÁBADO 15 DE JUNIO

DOMINGO 16 DE JUNIO

DOMINGO 16 DE JUNIO

Presentación por la PLATAFORMA MARAVILLAS del último año de trabajo en El Barrio.

Celebramos los 10 años del periódico SOMOS MALASAÑA.

Actividad de sensibilización ciudadana sobre Movilidad Urbana organizada por la Mesa de Espacio Público, Movilidad y Medio Ambiente del Foro Local de Centro

SOS Malasaña, 10 meses de actividad en el Barrio

La CASA DE LEÓN y su compromiso con el Barrio por su Presidente Diego García Paz.

El TEATRO VICTORIA por acogida y disponibilidad con las iniciativas del barrio

Libros de las Malas Compañías y Ana Griott harán una presentación contada del proyecto “MUJERIZ: MUJERES MARAVILLOSAS”, escrito por Ana Rossetti.

Microactuaciones en las calles

Tótem - C/Pez 42

Viernes 14 de 20:00 a 20:30

Sábado 15 de 18:30 a 19:00

Domingo 16 de 18:30 a 19:00

Bar Picnic - C/Minas 1

Viernes 14 de 19:30 a 20:00

Sábado 15 de 19:30 a 20:00

Domingo 16 de 13:30 a 14:00

El Sobrado - C/ Pez 30

Viernes 14 de 19:00 a 19:30

Sábado 15 de 19:00 a 19:30

Espacio Vian - C/Marqués de Santa Ana 2

Viernes 14 de 21:30 a 22:00

Sábado 15 de 21:30 a 22:00

Bombón - Pza. Carlos Cambronero 1

Viernes 14 de 18:30 a 19:00

Sábado 15 de 20:00 a 20:30

Domingo 16 de 13:30 a 14:00

La Bonne Vie - C/Molino de Viento, 1

Viernes 14 de 22:00 a 22:30

Sábado 15 de 22:00 a 22:30

Domingo 16 de 12:30 a 13:00

Help, ayúdame! En Malasaña ya no caben mis pies

Este año sin la "colaboración" de ESA marca de cervezas... espero. Siento ser tan severo con los organizadores pero con lo del año pasado ya tuvimos suficiente. Agradezco mucho vuestro esfuerzo por contribuir y vivir en un barrio rico y variado culturalmente.



Me gustaría hacer una reflexión. Creo que no soy el único que piensa que el centro de Madrid no da más de sí (otros creen justo lo contrario, pero no viven aquí y tratan de echarnos). Malasaña, muy en particular, está insoportable. Vivo aquí y se me hace muy cuesta arriba el día a día, pero los fines de semana trato de huir para tener algo de dignidad y bienestar en mi tiempo libre. Sí: HUIR, literalmente, de donde vivo.

Creo que el barrio debe cambiar, hay que tratar de deslocalizar (un poquito al menos) el ocio de tantísima gente, que deben crearse otras zonas próximas también atractivas.

Creo que no damos más de sí y, sinceramente, lo que otros años ha sido un evento ilusionante y un orgullo vivir en un barrio activo, el año pasado y este es motivo de terror. Estas fiestas van a amplificar todos los problemas que denuncian las asociaciones del barrio y ya no podemos más. Sé que puede sonar a derrota no organizarlas, pero desde mi punto de vista sería algo muy inteligente. Se podría guardar la idea en la reserva hasta que baje un poco la presión, si baja alguna vez.



Se acerca el verano (aunque oficiosamente ya estamos de lleno en él, por el calorcito) y se suceden los eventos, sumados a los problemas que ya sabemos. El fin de semana pasado la Champions, el que viene Pinta Malasaña (marca de cerveza aprovechándose mediante, ¡olé!), dentro de dos semanas las Fiestas de Pez, luego el Orgullo Gay... Luego llega el verano de verdad, con sus noches de ventana abierta sí o sí y las terrazas llenas 12 horas al calor irradiado por el asfalto.



Yo no puedo más, señores y señoras. No creo que esto sea un barrio, sólo es el lugar donde sobrevivimos porque no tenemos otro lugar y aún luchamos por vivir en él y lo amamos. Pero ganas no me faltan casi todos los días para vender y largarme con viento fresco. Así ganarán, contribuiré a subir el precio del mercado inmobiliario, se irá un vecino hasta ahora preocupado y activista y llegará alguien individualista pensando en sacar tajada y sumarse a la fiesta. Seré, por tanto, otro que "vende" a sus vecinos y los debilita en su lucha por un barrio habitable.... pero ganaré yo. No quiero esta situación, pero no es sostenible indefinidamente. Mi salud mental y emocional va delante y si tengo que marcharme lo haré antes de que me lleve por delante.



Lo que quiero decir es que no veo lógico que tiremos piedras sobre nuestro propio tejado y contribuyamos a llenar nuestro barrio semana tras semana de gente que no piensa más que en pasarlo bien, porque no es compatible con la vida de los vecinos. Y eso quizá pase por no organizar más eventos de este tipo, por mucho cariño que podamos tenerlos sobre el papel o en base a experiencias pasadas. A día de hoy es una tortura para muchos vecinos, aunque no quiero hablar más que por mí.



¿Sería razonable entonces organizar fiestas de ..... "nada"? ¿Sería posible pedir permiso al Ayuntamiento para organizar un evento donde no se haga nada más que salir a la calle y que la gente pasee o los niños jueguen? ¿Se puede pedir permiso al Ayuntamiento para cortar el tráfico un fin de semana, pero que no haya NADA especial en las calles? Se van a llenar de gente, pero sin la presión de que en cada esquina haya nada especial.



Para mí poder bajar a la calle, disfrutar de mi barrio, de tomarme una caña, mirar hacia delante al caminar o mirar los preciosos edificios que tenemos porque no tengo que esquivar gente, bolardos, cubos de basura (o basura y mierdas varias, más o menos literalmente) o coches cuando me veo obligado a caminar por la acera, sería un lujo.

Si lo pensamos es lo NORMAL en cualquier lugar. ¿Por qué tiene que ser un lujo? Yo vivo atenazado, me da cierta ansiedad pensar que tengo que bajar a cualquier cosa, porque el esfuerzo es muy grande. No se trata de ir a hacer la compra, por ejemplo. Se trata de toda una carrera de obstáculos y de control mental. Y en cualquier lugar salir a hacer la compra no es nada especial. Poder salir a dar un paseo no es algo que planificar buscando las zonas menos malas.



Esto no es vida y consiguen ir echándonos. Por eso planteo la opción de dejar de convocar a la gente a más eventos que no consiguen más que un efecto contrario a la idea de "hacer barrio". Y dejo sobre la mesa la pregunta de si es posible pedir permiso al Ayuntamiento para cortar algunas calles algunas horas de los fines de semana para "nada" en concreto. Habría que vestir la idea y dejarla bonita, como "crear un espacio para el esparcimiento vecinal y la promoción de la vida en la calle" o cualquier cosa que se os ocurra, vosotros que tenéis experiencia organizado eventos....



Muchas gracias por leerme y un saludo.



Fdo: Un vecino muy cansado de salir a la calle y no hablar más que de lo mal que está el barrio.

Manuela Malasaña

Ningún año anterior se ha contado con la colaboración ni el apoyo de ninguna marca de cerveza para las Fiestas de la C/Pez por San Antonio, lo primero. Ese agradecimiento por el esfuerzo a la organización no es real, y está muy bien explicado en el resto de su texto a continuación. Por cierto el esfuerzo del escribirlo, resulta bastante menor que el de organizar unas fiestas como las de Pez, aunque modestas comparadas con otras, son totalmente inclusivas, y diseñadas con el afán de provocar el menor impacto en los vecinos más reticentes. Porque hay otros que también vivimos aquí, nos encantan estas fiestas, y no queremos echar a nadie. Se llama CONVIVENCIA.



Si estas fiestas son "motivo de terror" como para cancelarlas, quizás hay que buscar el problema en otro sitio

no en las fiestas. Habla usted de "huir", de que "tratan de echarnos", "yo no puedo más", "es una tortura", "vivo atenazado", "me da ansiedad"... y lo siento mucho, porque no parece que estemos viviendo en la misma Malasaña, o por lo menos, me da la impresión de que es una visión distorsionada por una mente que sufre en exceso sin necesidad.



Evidentemente, por aquí tenemos muchas cosas que mejorar, y hay que luchar por conseguirlo, pero la solución no es "aparcar" unas fiestas que se celebran 3 días al año y contentan a la mayoría de los vecinos que vivimos en esta zona del barrio. No se pueden meter en el mismo saco, ni la acción de "Pinta Malasaña", con macroeventos como "La Champions" o las Fiestas del Orgullo. Aunque claro, su alternativa es organizar unas fiestas de "NADA"... Suerte con ello.



La gente hay que esquivarla porque vivimos en el centro de Madrid, y ya había que esquivarla hace 50 años. Los bolardos están para que los coches no invadas las aceras. Los cubos de basura, pues para disfrutar de un servicio de recogida diario... y ya me dirá usted qué tiene que ver todo eso con las Fiestas de Pez.



Para estar muy cansado de "hablar de lo mal que está el barrio" no pierde oportunidad de soltar su discurso alarmista, pesimista, y si, egoísta, por mucho que lo venda como lógico, razonable, y "NORMAL".

Quizás es que Malasaña, aunque a muchos les pese y por eso se quieran ir, NO ES NORMAL, y la mayoría de los vecinos estamos muy orgullosos de eso.

Hola Doña Manuela

Disculpen todos si metí la pata. Pensé que el evento donde la marca de cervezas tomó nuestras calles eran las fiestas de Pez.

Sobre todo lo demás, reitero mi posición, creo que la presión sobre el barrio es excesiva y me dificulta la vida. Si a usted le parece exagerado, vale, pero no creo ser el único.

Sobre las fiestas (el sustantivo era para aprovechar el tema) de "nada" evidentemente no tiene cabida. Era una manera de llamar a posibilidad de pedir permiso al Ayuntamiento para cerrar las calles los fines de semana, porque nunca vi tal densidad de personas y cosas en las aceras, qué quiere que le diga...

Y sí, valoro muy positivamente que haya iniciativas en el barrio y aunque no lo crea se puede ser crítico con ellas. O yo lo creo. Sin intención de ofender, ojo.

Por otro lado, el orgullo que siento de pertenecer al barrio y vivir en él confronta con la realidad de su mercantilización y masificación.... qué voy a hacerle si eso cambia la forma de vida que tengo. ¿No soy tan adaptable como debiera?

Paula

Estoy totalmente de acuerdo con el primer comentario. Llevo muchos años en este barrio y, sinceramente, creo que en lo que se está convirtiendo ahora mismo no puede considerarse especial si no triste y agobiante. Un barrio que está sucio, turistificado y donde la gente mea en los portales y hace botellón cuando le viene en gana no es para estar orgulloso.



Por otro lado, a principios de octubre de 2018 vimos cómo Mahou tomó la Calle Pez poniendo incluso letreros en los que avisaba de que los que pasábamos por allí cedíamos nuestra imagen para ser grabados. El lema, lo recuerdo perfectamente, era "Celebra tu calle".



Como vecina de Malasaña (todos tenemos el mismo derecho a expresarnos, que usted se haga llamar Manuela Malasaña no hace que sus percepciones y opiniones sean las correctas o más correctas que las de otros) considero que el barrio se ha convertido en un lugar muy difícil en el que vivir. Y creo que muchos vecinos piensan así porque si no no existiría SOS Malasaña.