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La sombra del máster arroja dudas sobre la continuidad del consejero de Educación en el nuevo gobierno de Madrid

Ángel Garrido ya es el nuevo presidente de la Comunidad de Madrid. Tras dos meses de tensiones, “hemos dado a luz, ahora hay que ver cómo criamos a la criatura”, dice un consejero en los pasillos de la Asamblea de Madrid. Se refiere al siguiente escalón que debe afrontar el jefe del Ejecutivo: diseñar su propio Gobierno. Garrido ha anunciado que hará públicos los nombres el lunes y no ha querido dar ninguna pista.

Se sabe, de seguro, que tendrá que nombrar a un consejero para la nueva cartera de Justicia, uno de sus grandes anuncios de investidura, y a un portavoz para relevarle en la tarea que ha desarrollado en la legislatura como número dos de Cristina Cifuentes, además de a un titular de Presidencia que muchos apuntan que podría desgajarse de la portavocía.

“Hay precedentes de que el portavoz sea de otra cartera”, dicen varios altos cargos del Gobierno de Madrid, que ponen de ejemplo a Iñigo Méndez de Vigo. En esta ecuación tiene, para muchos, todas las papeletas el consejero de Medioambiente Pedro Rollán, que ya sonaba como posible relevo de Cifuentes.

También la veterana Engracia Hidalgo, consejera de Economía y Hacienda. Su entrada en la portavocía haría paritaria la estampa de cada martes en las ruedas de prensa posteriores al Consejo de Gobierno. Al estilo Cifuentes-Garrido antes de la dimisión de la primera pero con un presidente varón.

La remodelación del resto de carteras parece poco probable a menos de un año de las elecciones. El propio Garrido dijo que los cambios serán de “tono muy menor”. Educación sería la única duda entre las consejerías ya designadas, en tanto a su titular le ha alcanzado indirectamente el caso Máster.

Rafael Van Grieken era el jefe directo de la asesora que fue enviada a la Universidad Rey Juan Carlos para intentar apagar el incendio provocado por la información publicada por eldiario.es que revelaba que Cifuentes había obtenido un máster con notas retocadas irregularmente. Maite Feito ha sido imputada por la jueza y ha dimitido de su cargo. La profesora Cecilia Rosado, la principal investigada a día de hoy, contó a la magistrada que Feito la amenazó: “O arregláis esto o Cifuentes y el rector os van a matar”.

Podemos ha pedido su reprobación en la Asamblea de Madrid por este motivo al considerar que “cargos de confianza” de su cartera “actuaron bajo su responsabilidad directa y no es plausible que lo hicieran sin su orden y conocimiento expreso”. Con estas afirmaciones se refieren también a la secretaria de Van Grieken, la persona que recibió el correo de la URJC con el acta falsificada de la defensa del Trabajo Fin de Máster de Cifuentes. Además, el consejero era uno de los encargados, como vicerrector, de supervisar la actividad del instituto que organizó el máster de Cifuentes.