Prueba del Toyota Yaris Cross Hybrid: todo lo bueno del Yaris en un formato mayor

Decir que el Yaris Cross es la versión SUV del Yaris, el popular utilitario de Toyota, resulta un tanto simplista, aunque solo sea porque mide 23 centímetros más de largo. Lo que sí se ajusta más a la verdad es que el Cross conserva prácticamente todas las virtudes del Yaris y las completa con una carrocería mucho más capaz en todos los sentidos -también en una eventual salida fuera de carretera- y algunas cualidades adicionales que le son propias.

Con 4,18 metros de longitud, por 3,95 m del Yaris convencional, 1,56 m de altura (9 cm más) y 16,5 cm de distancia al suelo, el modelo de Toyota se inscribe de lleno en uno de los segmentos más boyantes del mercado, el de los SUV de pequeño tamaño. En este se han generalizado los diseños de aire robusto y al mismo tiempo urbano y elegante como el que exhibe sin duda, y especialmente en el frontal, el Yaris Cross. El look del coche sale ganando mucho, además, si lleva techo en color diferente al de la carrocería.

También con respecto al Yaris, cambian el ajuste de la dirección y la suspensión, la posición de conducción, 63 mm más elevada, y la configuración del eje posterior en el caso de las variantes de tracción total AWD-i, que debe albergar un motor eléctrico adicional que se encargue de proporcionar par a las ruedas traseras.

Hemos podido conducir días atrás la versión de tracción delantera, que puede presumir de un maletero extraordinario, de 397 litros de capacidad, para tratarse de un coche que no deja de ser notablemente corto. Al volumen diáfano principal se suman en este caso dos huecos de buen tamaño a cada uno de los lados y, por debajo de la moqueta, dos compartimentos suplementarios donde cabe alojar todo aquello que no queramos que se vaya golpeando mientras circulamos.

Tan bien aprovechado como el maletero encontramos el espacio en las plazas traseras, donde se pueden acomodar con holgura dos pasajeros de más de 1,80 m. El asiento central, como suele suceder en muchos vehículos -y más grandes que el Yaris Cross-, resulta más incómodo y solo funcional para un niño, además de que la anchura total tampoco es suficiente para tres adultos.

Como en los nuevos Corolla y C-HR, aquí se utiliza la cuarta generación de la tecnología híbrida de Toyota, que incluye mejoras como que el motor eléctrico actúa a velocidades de hasta 130 km/h. La potencia del sistema de impulsión híbrido, compuesto por un motor de gasolina 1.5, de 92 CV, y otro eléctrico de 59 kW, asciende a 116 caballos y el consumo en conducción real, como veremos, no se sitúa lejos de los registros oficiales, que parte de 4,5 litros/100 km en los modelos 4x2 y de 5,1 litros/100 km en los AWD-i.

La batería de iones de litio empleada ahora, más compacta, ligera y potente, permite mayores aceleraciones sin revolucionar en exceso el pequeño motor tricilíndrico, efecto muy de agradecer en esta clase de vehículos en que el ruido generado al demandar potencia de forma decidida suele resultar molesto para el usuario.

Un consumo casi imbatible

En conducción real, el Yaris Cross registra consumos de gasolina que no suelen llegar a los 5 litros/100 km durante un desplazamiento largo por carretera, salvo que se pretenda realizar a velocidad demasiado alta o el trayecto presente un perfil muy accidentado. Por el contrario, si conducimos solo o fundamentalmente en ciudad, es fácil ver en el ordenador cifras inferiores a los 4,5 litros/100 km. No hace falta destacar que son registros de lo más ajustados que se puede encontrar en el mercado de modelos híbridos.

Como te contamos hace un año en esta misma página web, el Yaris normal consigue consumos aún mejores gracias a su inferior tamaño y peso: fuera de su hábitat natural urbano gasta unos 4,5 litros/100 km y el promedio supera por poco los 4 litros/100 km, datos que son poco menos que imbatibles para un modelo equipado con esta tecnología.

Recientemente, Toyota ha simplificado la gama Yaris Cross para concentrarse en tres acabados: dos para las versiones de tracción delantera (Active Tech y Style) y una para la AWD-i, denominada Adventure. La Style que hemos probado nosotros incorpora pantalla central de 9 pulgadas y mayor resolución, Apple CarPlay o Android Auto sin cable y cargador inalámbrico para móviles. Los servicios inteligentes comprenden navegación en la nube e información de tráfico y eventos en tiempo real, así como actualizaciones remotas.

En el equipamiento de seguridad destacan sistemas como el de precolisión con asistencia a la dirección, el control de crucero adaptado a las señales de tráfico y la primicia del airbag central delantero. A ellos se añaden la alerta de tráfico cruzado trasero, el monitor de ángulo muerto y el sensor de parking con frenado automático para evitar toques contra columnas o paredes.

Tras la reorganización de la gama y la subida de precios, generalizada en todas las marcas, el Yaris Cross está a la venta desde 25.350 euros en versión Active Tech y desde 26.350 euros en acabado Style. El modelo 4x4 sale por 28.850 euros.