Cristina Salvatierra y Nayara Sánchez han comparecido ante los medios para explicar su versión al respecto de la acusación vertida contra ambas por supuestas irregularidades durante las primarias de Podemos, y sobre la decisión del partido de reordenar la lista y retrasarlas a ambas en la lista. Según Podemos, Ágora Voting, la empresa que organiza los procesos de primarias del partido, descubrió “patrones de voto” que les llevaron a deducir que pudo haber “anomalías”. Tras analizar los datos, se decidió “penalizar” a Salvatierra y Sánchez.
Ambas candidatas han explicado que su intención a la hora de convocar a la prensa era “dotar de transparencia a un proceso que hasta ahora se había caracterizado por una absoluta opacidad”, donde según ellas, “los representantes autonómicos delegaban la responsabilidad del proceso a Podemos estatal y las empresas auditoras”.
Al respecto de las primarias de Podemos en la Región de Murcia, han relatado que visitaron varias veces la sede del partido para formalizar la candidatura, y que se les entretuvo “con excusas inverosímiles como que no quedaba tinta para sacar más copias”. “Además, recibíamos correos personalizados donde se nos invitaba a retrasar la firma de la candidatura por diversas circunstancias que eran desmanteladas cuando compañeros de la candidatura firmaban sin objeciones la documentación”, han aclarado.
“Trato degradante”
Cristina Salvatierra y Nayara Sánchez afirman haber sido víctimas de un “trato degradante” y haber recibido presiones, “incluso antes de conocerse los resultados, por el temor de la cúpula a que la lista sufriera un vuelco inesperado, al constatar ésta los numerosos apoyos” con los que contaban las candidatas. “Algunos compañeros de la candidatura nos sugerían que contactásemos con Óscar Urralburu, Secretario General autonómico, para asegurarle que no pertenecíamos al sector crítico y renunciásemos a su apoyo”, han asegurado.
“No se nos ha permitido aportar nuestra versión de los hechos, tras ser las principales implicadas en un baile de rumores y acusaciones injustificados que nacían de los principales representantes del partido en la región y se extendía sin reparo entre multitud de integrantes de Podemos cercanos a la cúpula”, han relatado.
Ambas jóvenes han afirmado sentirse “desoladas al ver cómo este tipo de actuaciones desintegran, adulteran y desvirtúan el proyecto ciudadano de cambio que construimos entre todos”. “No vamos a convertirnos en cómplices de maniobras que bien podrían atribuirse a la vieja política que tanto hemos repudiado, y por eso damos un paso al frente”, han proclamado, y ello “a pesar de la dureza de las acusaciones y el trato”.
“Seguimos creyendo en el proyecto”
“Permaneceremos fuertes e impasibles para que esta práctica no tenga cabida en procesos que se definen a sí mismos como garantistas y democráticos”, han añadido, explicando que su trayectoria en el partido “resultó impecable” hasta que tuvieron la opción “de ocupar cargos que no entraban en la premeditada planificación de unos pocos”, así que a partir de entonces “comenzaron a desplegarse una serie de banales argumentos que perseguían destruir” su “buen hacer dentro del partido”.
Las dos candidatas de Podemos han asegurado que les resulta “abrumador que, a pesar de la irreversibilidad de las decisiones adoptadas, éstas no estén acompañadas de ninguna prueba, sino en supuestos testimonios” de cuya existencia afirman no tener constancia porque no se les ha permitido saber quién ha declarado en su contra o qué expresan sus declaraciones. “Además se ha producido una bochornosa gestión indiscriminada de los plazos, reduciendo las posibilidades de defensa al absurdo”, han dicho en alusión a que el plazo que se les dio para recurrir fue de un día, “dejando en evidencia la democracia empleada con este procedimiento”.
“La consecuencia irrefutable de esta pésima gestión conduce a un lamentable desenlace donde el resultado de reorganizar la lista beneficia a un candidato muy a fin a la cúpula y a los compañeros de Equo, principalmente”, han interpretado, de tal modo que “tras agotar las vías internas del partido, se procederá a emplear la justicia ordinaria para dilucidar lo ocurrido y limpiar la imagen de las personas perjudicadas en estos días de especulación gratuita y difamación desmesurada”. “Seguimos creyendo en el proyecto y en las cientos de personas que le dan vida en nuestra región, pero no en aquellos que ejerzan su voluntad impositiva y que empleen desesperadas artimañas para dotar de solidez a su vertido de acusaciones, sin base argumental fehaciente”, han declarado.