Convivir Sin Racismo ha pedido al Juzgado de Control Jurisdiccional del CIE de Murcia y a la Oficina del Defensor del Pueblo de España que “intervengan de forma urgente en este centro de internamiento”, mientras la Policía sigue buscando a nueve internos fugados el pasado lunes.
En la noche del lunes se produjo un nuevo amotinamiento con fuga en el CIE de Murcia, la tercera en poco más de un mes, tras una simulación de incendio por parte de los internos. Los funcionarios lograron sofocar el fuego, pero nueve policías resultaron heridos leves y sufrieron contusiones en la cabeza. La asociación quiso “trasladar el deseo de una pronta recuperación de las lesiones producidas a funcionarios policiales y a los internos que se vieron afectados en esté incidente”.
El pasado 7 de octubre tras la primera fuga, Convivir Sin Racismo presentó una queja formal ante el Juzgado de control jurisdiccional del CIE de Murcia. Además, el pasado 3 de noviembre, interpusieron una petición a la Oficina del Defensor del Pueblo tras el segundo incidente. En ambas pidieron el cierre de estas instalaciones ya que “cada día que pase abierto supone más sufrimiento y una amenaza para la seguridad de todos los internos y de cuentas prestan su servicio en ese centro”.
Desde Convivir Sin Racismo denunciaron “las considerables deficiencias organizativas y el incumplimiento de las medidas previstas en el Reglamento de Funcionamiento y Régimen Interior de los CIEs” y criticaron que “pese al carácter no penitenciario de estos centros, se siga apostando por endurecer las condiciones del internamiento, atribuyendo funciones a funcionarios policiales, ajenas a su cometido, preparación y formación profesional en lugar de apostar por resolver los problemas frecuentes en relación a la falta de transparencia y al derecho de información, tanto de los internos, como de los letrados y las ONGs que les asisten”
Además la asociación señaló que “se producen dificultades para el acceso al expediente personal del interno; a que se facilite información sobre los diferentes procedimientos administrativos y judiciales en que se ven inmersos; a la comunicación y visitas sin trabas e impedimentos con sus familiares, amigos y organizaciones sociales; a que sea informado en su propia lengua de los derechos y obligaciones que tienen, así como sobre las normas básicas de conducta en el CIE, a tener acceso a ropa limpia o a medios para poder garantizar un aseo adecuado, a la atención médica adecuada, a una alimentación suficiente”, entre otros aspectos.
Desde Convivir Sin Racismo reclamaron “tanto a la Jueza de Control del CIE de Murcia como al Defensor del Pueblo de España, que intervengan de forma urgente en este centro de internamiento, que acaben con las duras condiciones y con el clima de tensión constante que se vive, que indaguen en las razones por las que de manera reiteradas se producen estas situaciones y prevengan de posibles actuaciones lesivas de derechos”. Y añadieron que “las instituciones públicas que deben velar por su cumplimiento para que el derecho no se detenga en la puerta de los CIEs”.