El pasado día dos de marzo cuando Navarra apenas contabilizaba un caso positivo por coronavirus, el Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea firmó un convenio “de colaboración” con el Servicio Vasco de Salud-Osakidetza para la compra por parte del Gobierno foral de 60.000 mascarillas FFP2 fabricadas por la empresa vasca Nueva Sibol, según informó el diario 'El Mundo'. Por el mismo convenio, el Gobierno vasco vendió otras 70.000 mascarillas a Galicia de un total de 500.000 adquiridas.
El acuerdo para la cesión de las mascarillas tanto a Navarra como a Galicia se alcanzó “por solidaridad”, según informó el Gobierno Vasco a sus socios de gobierno del PSE y a la oposición. Unas mascarillas que desde el departamento dirigido por Nekane Murga no se pensó que fueran a ser necesarias en un momento en el que ya estaban registrados los primeros casos en el en el hospital de Txagorritxu de Vitoria, que en el inicio de la epidemia constituyó uno de los principales focos de Euskadi. Mascarillas que, junto al resto de material sanitario de protección, se ha vuelto difícil poder adquirir ante la gran demanda de otros países.
Tal y como han informado fuentes del departamento de Salud del Gobierno de Navarra a eldiario.es, este convenio sigue todavía vigente ya que todavía no se han enviado todas las unidades adquiridas. Hasta la fecha, Navarra ha recibido 5.000 mascarillas, que ya están siendo utilizadas por el personal sanitario de los hospitales de la Comunidad foral. Está previsto que el martes lleguen otras 10.000 y que a final de mes hayan lleguen otras 10.000. Las 25.000 restantes del pedido realizado por Osasunbidea se prevé que lleguen entre mayo y junio.
El Gobierno de Navarra adquirió estas mascarillas a Osakidetza a través de ese convenio cuando en la Comunidad foral tan solo se había diagnosticado un único caso positivo por coronavirus, el de una mujer de 39 años que ingresó en la UCI con insuficiencia respiratoria y en la que llegó a estar varios días en estado muy grave, pero cuando ya se preveía que serían necesarias viendo la expansión del virus por el resto de comunidades autónomas y en otros países del entorno como Italia.
Estas mascarillas fabricadas en Euskadi que llegarán a Navarra a lo largo de los meses de abril, mayo y junio, se unen a las 16.000, también FFP2 que el Gobierno central envió a la Comunidad foral durante las primeras semanas de abril, destinadas en este caso al personal de la red de transportes de Navarra para su uso sobre todo a partir del pasado lunes, cuando se retomó la actividad en varios sectores laborales como la construcción y parte de la industria.