La vicepresidenta del Gobierno en rueda de prensa posterior al Consejo de ministros del 26 Julio de 2013 anunció la puesta en marcha de la Estrategia Nacional contra la Violencia de Género 2013-2016 dotada con un presupuesto de 1.539 millones de euros para su periodo de vigencia.
Una lectura detallada muestra que dicha Estrategia Nacional es básicamente una recopilación ordenada de las acciones ya diseñadas con anterioridad a la llegada al Gobierno del PP que incluyen muchas medidas que competen a las Comunidades Autónomas.
A diferentes periodistas a los que me he dirigido, he manifestado mi desconfianza sobre el hecho de que el Gobierno de España hubiese asignado presupuestariamente esa cantidad para combatir la violencia contra las mujeres. También he insistido en explicar que, en todo caso, no hacía referencia a una financiación nueva y específica, sino que solo podía referirse a cantidades que compendiarían el total de partidas de diferentes ministerios y organismos gubernamentales. La mayoría de ellas serian, por tanto, partidas ya existentes y presupuestadas en ejercicios y gobiernos anteriores.
Dicho de otra manera, la Estrategia Nacional contra la Violencia de Género no significa un esfuerzo extraordinario sino que el Gobierno tan solo habría ordenado en un documento lo que ya se venía haciendo.
Durante los últimos presupuestos del Gobierno socialista el Ministerio de Justicia desglosó la cifra de 45 millones de euros para indicar cuáles eran las cantidades destinadas a actuaciones contra la violencia de género y promoción de la igualdad (ver ficha adjunta). Ese detalle de información ha desaparecido de los Presupuestos Generales del Estado 2014, pero cabe deducir que la suma de cada una de las partidas que destinan los diferentes organismos gubernamentales a estos fines seria lo que permitiría llegar a completar los, aún no acreditados, 1.539 millones de euros.
El problema es que, hasta la fecha, ningún Gobierno ha contabilizado la cifra global destinada a combatir esta violencia, entre otras cosas, porque no existen indicadores específicos. Sólo medidas como los brazaletes antimaltrato, las ayudas directas y alguna otra asignación específica, pueden asignarse de manera concreta, pero resulta complejo conocer –por ejemplo– qué cantidades del presupuesto de las Oficinas de Atención a Víctimas relaciona con la violencia de género ya que estas atienden a todo tipo de delito.
Un Estado moderno y exigente, para poder controlar su gasto, debería poder identificar estas cuestiones. El extinto Ministerio de Igualdad inició esa tarea y comenzó a recopilar la información referida a las actuaciones contra la violencia de género y promoción de la igualdad en cada uno de los ministerios.
Esa práctica decayó y esas cifras andan ahora dispersas en el fárrago numérico de los presupuestos. No solo es difícil de localizar; además, es improbable que se pueda cuantificar con certeza. Pero no es este el asunto al que quiero referirme.
La vicepresidenta del Gobierno, la ministra de Sanidad, su secretario de Estado y la delegada especial del Gobierno vienen repitiendo la cifra de 1.539 millones de euros como un mantra que pretende que veamos cuán grande es el esfuerzo de su Gobierno en esta materia. ¡Pero engañan!
Siempre he sospechado que la cifra referida por la vicepresidenta del Gobierno no es una cantidad real y efectiva de la inversión del Gobierno en materia de violencia de género. Es fácil de comprobar ya que, para ofrecer una cifra tan exacta, se deben recopilar las partidas de cada una de las actuaciones. Si es así, hay que demostrar que la suma de todas ellas den como resultado 1.539 millones de euros.
Pero hay más: tal y como está construido su mensaje parecería que el Ejecutivo del PP va a dedicar 1.539 millones de euros a combatir la violencia de género. Yo misma lo pensé, por eso examiné con detalle los Presupuestos Generales del Estado 2014 en busca de las partidas que lo avalase: ¡infructuosamente!
Llegaron las comparecencias de presupuestos y si el secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad pasó de puntillas sobre la cifra, la subsecretaria la franqueó de refilón. En el turno de preguntas solicité las partidas en que se hallan consignadas las cantidades referidas por la vicepresidenta del Gobierno en el citado Consejo de Ministros.
Pregunté:
“¿Esa cifra de 1.539 millones de euros corresponde a qué ministerios? ¿Esas partidas, existían ya en los ministerios con anterioridad a 2013? ¿Puede indicarnos con exactitud en qué ejercicios anteriores fueron creados esos apuntes contables, capítulo presupuestario y cantidad asignada en cada uno de los ejercicios por ministerio y área?”.
Solo conociendo la respuesta a estas preguntas, podremos saber si las acciones son nuevas, si aumentó o disminuyó, si atiende a programas de nueva creación o todo lo que hace el Gobierno es arrastrar lo diseñado con anterioridad. Solo conociendo la respuesta a estas preguntas sabremos si la vicepresidenta del Gobierno, la ministra Mato, su secretario de Estado y los responsables operativos y económicos hacen trilerismo político y contable.
¡¡¡No obtuve respuesta!!!
Como no la esperaba, entregué un documento con preguntas escritas sobre el proyecto de Presupuestos Generales del Estado 2014 reclamando “la dotación y partida presupuestaria en que se hallan consignadas las cantidades asignadas a la Estrategia Nacional contra la Violencia de Género de cada uno de los ministerios en el marco de las acciones que les hubiesen sido fijadas”.
Llegó la contestación del Gobierno a las preguntas:
- Ministerio de Justicia: respuesta abstracta sin ofrecer ninguna cantidad presupuestada.
- Ministerio Del Interior: respuesta abstracta sin ofrecer ninguna cantidad presupuestada.
- Ministerio de Educación Cultura y Deporte: respuesta abstracta sin ofrecer ninguna cantidad presupuestada.
- Ministerio Empleo y Seguridad Social: respuesta abstracta sin ofrecer ninguna cantidad presupuestada.
- Ministerio de Hacienda y Administraciones públicas: respuesta abstracta sin ofrecer ninguna cantidad presupuestada.
- Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación: respuesta abstracta sin ofrecer ninguna cantidad presupuestada.
Aun así, el Gobierno insiste en “señalar que las partidas económicas en materia de violencia de género se han mantenido iguales al año anterior”. Esta afirmación no puede comprobarse ya que no ofrecen los datos que permitan cotejarlos a excepción de los asignados a la Delegación Especial del Gobierno de la Violencia, que ha perdido, desde la llegada del PP al Gobierno, 8.508.700 de euros.
Pero, gracias a la respuesta escrita, se ha destapado la trampa de los 1.539 millones de euros. Lo hace porque el segundo párrafo desvela que el Gobierno, para hacer el cómputo, “ha contemplado el crédito que los Organismos de Igualdad de las Comunidades Autónomas destinarán, estimativamente, a la consecución de las acciones para erradicar la VG”. estimativamente,
A fecha de hoy seguimos sin saber cuántos de esos 1.539 millones de euros son reales, estimativos o ficticios, pero sabemos fehacientemente que solo es una cifra “aproximada” y dicha “a voleo” que incorpora (y hace suyo) un presupuesto ajeno... el destinado por las Comunidades Autónomas a combatir la violencia de género.
Un pufo más del Gobierno del PP. Quizás puedan decir que no mintieron... pero nadie podrá negar que han engañado.