Noticia servida automáticamente por la Agencia Europa Press
Esta información es un teletipo de la Agencia Europa Press y se publica en nuestra web de manera automática como parte del servicio que nos ofrece esta agencia de noticias. No ha sido editado ni titulado por un periodista de eldiario.es.
La familia de Ángel Berrueta critica que su muerte se resolvió con una “justicia a medias”
La viuda de Ángel Berrueta, Mari Carmen Mañas, ha comparecido este martes en el Parlamento a petición de EH Bildu e I-E, acompañada de otros familiares, para dar su testimonio en el marco del debate de la proposición de ley foral de reconocimiento y reparación de las víctimas por actos de motivación política provocados por grupos de extrema derecha o funcionarios públicos.
Berrueta, que regentaba una tienda en el barrio de San Juan, murió el 13 de marzo de 2004, dos días después de los atentados del 11-M. Los hechos ocurrieron cuando una vecina del lugar le reclamó que pusiera un cartel con el texto 'ETA no', a lo que Berrueta no accedió. Tras esta negativa, el hijo y el marido de esta vecina bajaron a la tienda y mataron a Berrueta. El hijo le provocó dos heridas por arma blanca y el marido, agente de Policía Nacional, le disparó en cuatro ocasiones.
Mari Carmen Mañas ha reconocido que, “así como otras personas no han tenido justicia de ninguna clase, nosotros sí hemos tenido un juicio, pero fue justicia a medias, ya que la persona que provocó todo esto - la mujer-, fue condenada a diez años pero sólo pasó cuatro meses en la cárcel”. “A los otros se les condenó a 15 y a 20 años. El hijo ya está en la calle desde el año pasado y el padre me figuro que dentro de uno o dos años también saldrá”, ha lamentado.
AMENAZAS CONTRA LA FAMILIA TRAS SU ASESINATO
Además, ha señalado que en los años posteriores al asesinato de su marido la familia sufrió amenazas de muerte continuas por teléfono, rotura de cristales de la tienda, pintadas en la puerta de casa, o la colocación de un ataúd en la puerta del domicilio. “Nadie de las instituciones de Navarra se ha molestado en preguntarnos cómo estábamos”, ha dicho.
Una de las hijas de Mari Carmen Mañas, Aitziber Berrueta, ha relatado que ella estuvo recibiendo llamadas de forma reiterada a las 2 de la madrugada. Denunció todas ellas a la Policía Municipal, pero siempre acabaron sobreseidas.
“La Policía identificó una de las llamadas desde una cabina que está al lado de Diputación. Me imagino que tendrán cámaras de vigilancia”, ha señalado, para lamentar que sin embargo nunca se ha logrado identificar a los responsables. La familia ha explicado que de un tiempo a esta parte las amenazas han cesado.
Aitziber Berrueta ha pedido al Parlamento que la ley que sea aprobada “no excluya a nadie, porque la exclusión de una sola víctima es una herida que no cerrará y nos impedirá superar lo ocurrido y convivir en el mutuo respeto y entendimiento”. “Pedimos a este Parlamento reconocimiento de lo ocurrido en cada caso, sin tapujos ni distorsiones”, ha señalado.
Igualmente, ha pedido “respeto” para la familia Berrueta, algo que “nos ha sido negado desde las instituciones una y otra vez desde que se ordenó una carga policial en el tanatorio estando mi padre de cuerpo presente, o cada vez que se nos ha negado colocar una placa de recuerdo en la calle, o cada vez que una institución nos ha dado la espalda”.
Aitziber Berrueta ha afirmado que “es fundamental que el Parlamento haga lo posible por cerrar estas heridas que siguen abiertas” y ha añadido que “las heridas solo puedan curar con verdad, reconocimiento y reparación”.
PALABRA DE RECONOCIMIENTO DE LOS PARTIDOS
El portavoz de Aralar-NaBai, Patxi Zabaleta, ha afirmado que “la dignidad de las víctimas estriba en que son una aportación para la convivencia en paz de la sociedad y es importante que esa sociedad cuente con el tesoro del testimonio de todas las víctimas de todas las violencias”.
Por su parte, la portavoz de Bildu, Bakartxo Ruiz, ha afirmado que “es evidente que no ha habido ningún reconocimiento institucional y lo que han recibido los familiares son cargas policiales mientras velaban el cuerpo de Ángel o mociones que se han echado para atrás en el Ayuntamiento de Pamplona por no reconocer a Ángel como víctima por una motivación política”.
El parlamentario de I-E Txema Mauleón ha mostrado su “cariño, apoyo y solidaridad” a la familia “por el sufrimiento que ha parecido y sigue padeciendo” y ha explicado que su objetivo con la ley que está en debate es que “a todas las víctimas se les trate por igual con los principios de justicia, verdad y reconocimiento”.
El portavoz de UPN, Javier Caballero, ha agradecido el testimonio de la familia Berrueta, “realmente duro y difícil” y ha mostrado su “solidaridad en ese dolor personal que nos transmiten”. “Toda muerte violenta causada por otro es injusta y condenable, y nosotros siempre las hemos condenado. Nunca se debían haber producido”, ha señalado. Por otro lado, ha explicado que en una sesión de trabajo con la familia de Berrueta presente no iba a entrar “en las diatribas” de la portavoz de Bildu, “que evidentemente no comparto”.
Por último, el parlamentario del PSN Pedro Rascón ha afirmado igualmente que el testimonio ofrecido por los allegados de Berrueta ha sido “complicado y duro, pero nos clarifica y nos da luz” en el objetivo del debate de la ley, que es “buscar esos principios de verdad, justicia, reconocimiento y reparación”.