La Audiencia Nacional se asegura de que un conservador redacte las sentencias de Gürtel y la caja B
Un acuerdo de la Audiencia Nacional sobre su funcionamiento interno va a incidir de forma decisiva en los dos mayores casos de corrupción que afectan al Partido Popular, siempre que Enrique López sea apartado el próximo viernes de ambos tribunales por su afinidad con la formación política. Si eso ocurre, el magistrado que ocupará su sitió en el tribunal de Gürtel y de 'papeles de Bárcenas' será el conservador Ángel Hurtado, que además sustituirá a López en la tarea de redactar ambas sentencias.
El pasado 24 de julio, la Sala de Gobierno de la Audiencia Nacional se reunió con la principal novedad de que el presidente del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes, acudía a presidir la sesión. Se trataba casi de un acto casi de cortesía, habida cuenta de que se retiró en el momento de las deliberaciones. Según recoge el acta de la reunión, a la que ha tenido acceso eldiario.es, Lesmes departió con los miembros de la Sala de Gobierno “sobre el estado y funcionamiento de las distintas Salas y Juzgados, con distintas intervenciones e intercambio de reuniones”.
Aquel día, con varios magistrados de la Audiencia Nacional disfrutando ya de sus vacaciones, la Sala de Gobierno adoptó nueve acuerdos. Entre ellos, la ratificación de un informe solicitado al Poder Judicial sobre la provisión de una plaza en la Sala Tercera del Supremo, la rectificación de unos “errores materiales” en la denominada Sala de Vacaciones o el respaldo a la solicitud de una prórroga en su comisión de servicio a los jueces Fermín Echarri y Carmen Lamela.
El apartado sexto, que había propuesto la presidenta de la Sección Segunda de la Sala de lo Penal, Concepción Espejel, pasaba por ser uno de esos asuntos rutinarios que intentan mejorar el funcionamiento diario de la Audiencia Nacional. Espejel, recusada también de los tribunales de Gürtel y 'papeles de Bárcenas' por su aparente proximidad al PP, había solicitado que si impusiera un sistema de sustituciones en las distintas secciones, según el cual si un magistrado se ausenta por vacaciones, licencias, enfermedad u “otras causas”, sea sustituido por el compañero que tuviera asignado el siguiente procedimiento.
Como los otros ocho puntos del día, el sexto fue aprobado por unanimidad por los seis magistrados que componían ese día la Sala de Gobierno: el presidente de la Audiencia Nacional, José Ramón Navarro, el presidente de la Sala de lo Penal, Fernando Grande-Marlaska, y otros cuatro de sus miembros habituales.
Ese punto sexto, sin embargo, puede significar que el tribunal de los casos Gürtel y Bárcenas quede atado a una composición totalmente conservadora y que sea un magistrado conservador el que redacte ambas sentencias, si es que Pleno de la Sala de lo Penal decide el próximo viernes recusar a Enrique López. En esa reunión del Pleno también se abordará la recusación de Concepción Espejel, aunque distintas fuentes de la Audiencia Nacional consideran improbable que los motivos presentados contra ella puedan prosperar.
A que el acuerdo del punto sexto pasara desapercibido ayudó la redacción del mismo. En él se especifica que el nuevo sistema de sustitución afecta a vacaciones, licencias, enfermedad y a un cuarto apartado bajo la genérica denominación de “otras causas”.
Entre esas “otras causas” está la de recusación, que ni la magistrada que lo propuso, Concepción Espejel, ni el presidente de la Sala de lo Penal, Fernando Grande-Marlaska -al que correspondía defenderlo- se detuvieron a mencionar. Grande-Marlaska es también vocal del CGPJ a propuesta del Partido Popular.
Fuentes del tribunal especial consideran que un sistema de sorteo habría eliminado cualquier suspicacia. La Sección Segunda es de abrumadora mayoría conservadora, con José Ricardo de Prada como único magistrado de tendencia progresista. Sin un sorteo, las posibilidades de que De Prada sustituyera a Enrique López como ponente de ambas sentencias son simplemente inexistentes.
El acuerdo de la Sala de Gobierno es la guinda a un pastel que lleva cocinándose largo tiempo y que obliga a remontarse a la llegada de Espejel a la presidencia de la Sección Segunda, en enero de 2014, y a su decisión inmediata de presidir todos los juicios que celebre la misma, algo que no ocurre en las otras secciones de la Sala de lo Penal.
Por tanto, la presidencia de los tribunales que iban a juzgar los mayores casos de corrupción que afectan al PP ya estaba decidida de antemano. El sorteo quiso, además, que a Espejel se sumara Enrique López como ponente de ambas sentencias.
El primer escrito pidiendo la recusación de López y Espejel del caso Gürtel se presentó el 30 de junio, 25 días antes del acuerdo de la Sala de Gobierno que asegura un juez conservador para redactar la sentencia. Seis días después de la reunión se conoció que López también integraría el tribunal del caso de la caja B del PP y que igualmente redactaría su fallo.
Un sustituto aspirante al Supremo
Ángel Hurtado es un magistrado de marcado carácter conservador que, sin embargo, ha intentado no significarse demasiado, según fuentes de la Audiencia Nacional. En el pasado aspiró a integrar la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo y, siempre según estas fuentes, mantiene esa intención a día de hoy. Para ascender al Alto Tribunal es necesario contar con el favor de una mayoría del Consejo General del Poder Judicial, el politizado órgano de gobierno de los jueces. Esa mayoría, a día de hoy, está formada por los vocales propuestos por el PP.
El próximo viernes, el pleno de la Sala de lo Penal decidirá sobre la recusación de López y Espejel. Las acusaciones han alegado que ambos fueron vocales del CGPJ a propuesta del PP y que, en el caso de López, ha participado en medio centenar de cursos de FAES, la fundación presidida por José María Aznar, por los que cobró 11.320 euros en doce años.
Pero en el debate que mantendrán los magistrados de la Sala de lo Penal el próximo viernes tendrá un peso especial el posicionamiento de las fiscales de los casos Gürtel y Bárcenas. “No puede afirmarse que resulten de todo punto irracionales las dudas albergadas por los recusantes sobre la imparcialidad” de estos magistrados, afirman Concepción Sabadell y Concepción Nicolás en su escrito.
Cuando parecía que todos los argumentos contra Espejel y López habían sido presentados por las acusaciones populares y alguna defensa, las fiscales se descolgaron con uno que había pasado desapercibido para el resto: Espejel fue elegida vocal del Consejo General del Poder Judicial con el voto del senador Luis Bárcenas, y López fue propuesto para el Constitucional con el apoyo de cuatro diputados regionales del PP que se sentarán en el banquillo.