La oferta de Mariano Rajoy al PSOE de cambiar un hipotético apoyo de los socialistas a su investidura a cambio de que el PP garantice la estabilidad de los gobiernos autonómicos que se sustentan gracias al apoyo de Podemos. Pedro Sánchez ha dado este miércoles un ‘no’ rotundo al presidente en funciones al que se han sumado algunos barones, que han defendido sus pactos con la formación de Pablo Iglesias.
Así lo han hecho Emiliano García-Page y Javier Lambán. “Soy presidente de Castilla-La Mancha con el apoyo de Podemos, estoy contento sinceramente con el acuerdo”, ha dicho el primero, aunque ha admitido que el pacto que alcanzó fue para un Gobierno “monocolor” focalizado en la agenda social. A su llegada a Ferraz, ha mandado varios mensajes al secretario general. Uno de ellos ha sido al recordarle que no puede pactar si la consulta en Cataluña está sobre la mesa: “Si a mí me hubieran planteado que hay que cambiar Cataluña no sería presidente”, ha advertido.
También ha aprovechado su respuesta a Rajoy para avisar a Sánchez de que no puede formar Gobierno “para cubrir el expediente”: “Lo mismo que no pretendo un gobierno pastiche ni de cosas raras no hay que hacer cosas estrambóticas”. “Tampoco vamos hacer un cambalache”, ha dicho sobre la oferta de Rajoy de intercambiarse apoyos.
Lambán, a quien Podemos ha decidido este mismo miércoles apoyar sus presupuestos tras tener que prorrogar los del PP por su negativa inicial, también ha defendido la acción de su Gobierno, apoyado en Podemos, entre otros, tras el 24M. “En Aragón tenemos una hoja de ruta absolutamente establecida por los pactos de investidura con Podemos, Chunta Aragonesista e IU y eso es absolutamente inalterable”, ha enfatizado el presidente aragonés.
Ximo Puig, que gobierna en coalición con Compromís y con el apoyo de Podemos, ha rechazado cualquier tipo de acuerdo entre PP y PSOE. “No es bueno para España, no es la solución”, ha dicho el presidente valenciano en la mañana de este miércoles. Puig ha dejado claro que la “corrupción” del PP es uno de los motivos que hace imposible, a su juicio, cualquier entendimiento con los de Rajoy.
Quienes permanecen en silencio son Guillermo Fernández Vara y Javier Fernández. El presidente extremeño está negociando los presupuestos regionales después de que Podemos y PP los tumbaran antes de las Generales. Su homólogo asturiano, que mantiene una tensa relación con los de Iglesias en el Principado, permanece callado desde el viernes.
No obstante, tras el ofrecimiento de pacto de Iglesias a Sánchez, el presidente asturiano reconoció que la experiencia en Asturias “es negativa” aunque expresó que quizás no fuera “extrapolable” al resto de España.
Sánchez, en manos de Ciudadanos
Mientras el rey ha comenzado las consultas con los portavoces parlamentarios, Sánchez se reúne con sus barones de forma individual para preparar el Comité Federal del próximo sábado. Ferraz ha evitado una cita conjunta para evitar la tensión que se vivió en la sede del PSOE el pasado 27 de diciembre, cuando los dirigentes territoriales se alinearon para forzar a Sánchez a aceptar unas líneas rojas para sus pactos y que pasan por el ‘no’ a Rajoy pero también la imposibilidad de negociar con quien defienda el referéndum en Cataluña.
Sánchez inició las reuniones con los dirigentes más fieles, el murciano Rafael González Tovar y Luis Tudanca, de Castilla y León. Después recibió a María Chivite (Navarra), Sara Hernández (Madrid) y Javier Lambán (Aragón), que en las últimas fechas se ha mostrado distante con los pasos de la dirección.
Los barones más críticos apuestan ahora por que el pacto al que pueda llegar Sánchez para gobernar incluya a Ciudadanos. También el candidato socialista está en la línea de mirar “a izquierda y derecha”. No obstante, a la vez que piden un acuerdo a tres para evitar apoyarse en los independentistas, reconocen que es “difícil”.
“El PSOE, si quiere formar gobierno, tiene que ser con su propuesta a la que añadamos otras cosas, no con la propuesta de los demás”, ha dicho García-Page en referencia al órdago de Iglesias para apoyar a Sánchez en su investidura siempre y cuando Podemos entre en el Consejo de Ministros con varios puestos.
Guillermo Fernández Vara y Javier Lambán coinciden en ese planteamiento. El aragonés ha defendido que es necesario contar con fuerzas que den “coherencia y solidez” al Ejecutivo para lo que, a su juicio, necesita a Ciudadanos. Según Lambán, Susana Díaz piensa lo mismo: “Lo que pasa es que ella lo interpreta en cante jondo y yo en cante jotero”, ha ironizado.
Sánchez todavía no ha fijado una fecha para su cita con Díaz ni con Fernández, que fue el dirigente más crítico con la dirección en el último Comité Federal. Tampoco Fernández Vara ha pasado aún por Ferraz por complicaciones de agenda. El extremeño está en plenas negociaciones de los presupuestos.