Un posible candidato a liderar el PSOE en Madrid admite que su decisión depende de Pedro Sánchez
“Ya está Ferraz metiendo la mano otra vez en Madrid”. Es la frase de un socialista madrileño sobre las maniobras de la nueva dirección de Pedro Sánchez con vistas al congreso regional para el que el PSOE aún no tiene fecha. Los 'sanchistas' dan por amortizado el mandato de Sara Hernández en la organización y buscan candidato. Uno de los posibles aspirantes a disputarle el liderazgo ha admitido, en contra de lo que aseguró el portavoz de la dirección federal, que la decisión dependerá del camino que marque el secretario general.
Franco, que es portavoz adjunto a Ángel Gabilondo en la Asamblea de Madrid, ha revelado que Sánchez le ha hecho “insinuaciones” que apuntan a que es una “de las personas adecuadas” para liderar el PSOE. Con esas declaraciones, reconoce abiertamente que el líder socialista ya no piensa en Sara Hernández, a quien impulsó en 2015, pero de la que se ha alejado en el proceso de primarias por su apoyo a Patxi López.
Además, el veterano diputado madrileño reconoce que su decisión depende de lo que diga Sánchez. Si el secretario general lo ve conveniente, Franco pensaría “con calma y mayor interés” dar el paso. Según El Mundo, el diputado madrileño, que coordinó la campaña de Sánchez en Madrid, espera reunirse con el secretario general en los próximos días.
Las palabras de Franco han caído como un jarro de agua fría en una parte del 'sanchismo' madrileño que no está de acuerdo con su idoneidad como candidato. Además, reconocen que rompe con el discurso que ha mantenido la dirección de Sánchez sobre su posicionamiento en los congresos regionales. El portavoz, Óscar Puente, aseguró que no impulsarán ninguna candidatura.
“No vamos a alentar candidaturas alternativas de nadie pero tampoco las vamos a cercenar”, expresó en su estreno en Ferraz. La acusación de que Sánchez se va a meter en los procesos regionales llega de varias federaciones. El que más claro lo dejó fue el presidente valenciano, Ximo Puig: “Alguien tendrá que explicar por qué se promueve un ataque contra el secretario general del PSPV”, sentenció el presidente valenciano, a quien le ha surgido un competidor para el liderazgo de los socialistas valencianos en Rafael García.
A la presentación de su candidatura acudió Susana Ros, que forma parte de la nueva Ejecutiva de Sánchez. Además, el equipo del secretario general le designó miembro de la mesa en el 39º Congreso Federal cuando los de Puig ya sabían que pretendía disputarle el liderazgo. “Han roto todos los acuerdos previos. Prometieron que no se iban a meter en los territorios y van a hacerlo en todos los que puedan”, dice un destacado dirigente muy enfadado.
En Cantabria se ha presentado un candidato, en Aragón temen que los 'sanchistas' impulsen una candidatura contra Javier Lambán. La contrincante de Guillermo Fernández Vara en Extremadura, Eva Pérez, aseguró en su perfil de Facebook que Sánchez metió en la Ejecutiva a la coordinadora de su campaña.
Las palabras de Franco han molestado a un sector que apoyó a Sánchez en Madrid y que no le ven con buenos ojos como candidato. “¿No decidían los militantes? Ahora resulta que depende de una conversación con Pedro”, lamenta un dirigente madrileño. En Ferraz callan.
Algunos socialistas consultados por eldiario.es creen que las declaraciones de Franco buscan “marcar terreno” en la batalla regional. De hecho, se han producido pocas horas antes de que se reuniera en Alcorcón la Plataforma de Apoyo a Pedro Sánchez, en la que su nombre fue propuesto como candidato. Le acusan de “usar el nombre” de Sánchez para hacerse fuerte. Esa reunión la ha presidido el propio Franco y han acudido dos miembros de la dirección de Sánchez, Isaura Leal y Mónica Silvana. Esta última intervino para dar su apoyo expreso a Franco en el proceso regional.
“Estoy convencida de que si de aquí sale esta propuesta a la calle, Pedro va a decir amén. Es más, Pedro está esperando que hagamos esta propuesta porque es que él ya nos lo ha dicho”, expresó Natalia de Andrés, líder socialista en Alcorcón y una de las organizadoras del encuentro de la plataforma. “¡Eso no está en el orden del día!”, se quejó uno de los asistentes. Otro reprochó que con esa posición se cercenaba la posibilidad de que se presentara otro candidato del 'sanchismo'.
El malestar existe también por la colocación de afines en los puestos relevantes de los órganos federales. “Fue él quien lo negoció”, señala uno de los conocedores de la negociación. En la Ejecutiva ha entrado Mónica Silvana, que es de su cuerda, y del Comité Federal formarán parte él y su hija, Isabel Franco, que fue una de las protagonistas del acto de cierre de campaña de Sánchez en Madrid. En el socialismo madrileño, incluidos algunos de los que apoyaron a Sánchez, ven descompensado el reparto.
“Es raro que Franco esté en el Comité Federal si quiere ser secretario general porque tendría puesto nato y que se haya expuesto tanto en las negociaciones si quiere llegar a algún tipo de consenso para liderar Madrid”, dice un dirigente madrileño alejado de la riña de los 'sanchistas'.
Franco ya ha ido tanteando a dirigentes madrileños que apoyaron a Susana Díaz o a Patxi López en las primarias para intentar lograr un mayor respaldo en la federación. El posible aspirante a la secretaría general genera un mayor consenso en sectores alejados del 'sanchismo' que otros de los dirigentes que rodearon a Sánchez en Madrid. “Franco tiene una virtud y es que no tiene grandes enemigos”, coinciden varios de los consultados.
Pero en la siempre convulsa federación madrileña hay más movimientos. Otros cargos y militantes socialistas se reúnen este martes por la tarde en una agrupación de la capital para analizar las posibilidades. Uno de los asistentes es el alcalde de Soto del Real, Juan Lobato, que estudia dar un paso al frente en las primarias. “El dilema de Pedro es elegir entre alguien de total confianza orgánica o permitir un proyecto que encaje con la fuerza y renovación general del partido”, expresa un diputado madrileño.
En ese ambiente de precongresual para una batalla que aún no tiene fecha, aunque todo apunta que puede demorarse hasta septiembre, Sara Hernández mantiene que se presentará a la reelección y asegura no temer un cambio en la actitud de la dirección federal. Sin embargo, la líder madrileña es consciente de que su relación con Sánchez se ha debilitado.