La dirección nacional del Partido Popular que preside Pablo Casado está oficialmente orgullosa de la intervención de su cabeza de lista por Barcelona el 28A, Cayetana Álvarez de Toledo, en el primer debate de la campaña que tuvo lugar este martes en Televisión Española. “Cayetana ganó el debate y reflejó la fuerza, el coraje y la valentía del nuevo PP”, explican en Génova 13.
Fuentes del equipo de Casado insisten en declaraciones a eldiario.es que Álvarez de Toledo, que protagonizó una de las principales polémicas de la noche al criticar la reforma del Código Penal para que solo sí sea sí en las relaciones sexuales y cargar contra el feminismo por convertirse en un “enfrentamiento absurdo entre hombres y mujeres”, fue “la clara ganadora y la que centralizó el debate en los temas obligando al PSOE a hablar de lo que no querían hablar”.
“Demostró que el PP de Casado es la única alternativa para echar al PSOE y decir un adiós definitivo a las mentiras, incompetencia y deslealtad constitucional de Sánchez”, concluyen las fuentes de Génova contactadas por este diario.
La valoración positiva realizada por la dirección nacional de los populares contrasta con la indiferencia con la que siguieron el primer debate de la campaña en las filas del partido. Dirigentes y exdirigentes del sector crítico –que no comparten la deriva derechista de Casado– aseguran que ni siquiera vieron el cara a cara. Tampoco lo siguieron varios cabezas de lista para el Congreso que sí son afines a la dirección del PP.
“Estaba en procesión en mi tierra”, explica uno de los dirigentes críticos, que en las primarias apostó por Soraya Sáenz de Santamaría y que ahora vuelve a figurar en las listas del partido para el 28A. “No vi el debate, la campaña de las generales no me interesa nada”, explicaba, por su parte, un candidato de las elecciones municipales y autonómicas del 26 de mayo díscolo con la dirección de Casado.
Tampoco lo siguieron exdiputados y dirigentes actuales consultados por este diario, que han evitado por ello valorar la polémica intervención de Álvarez de Toledo sobre el feminismo y el consentimiento sexual.