Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Cisma en Ciudadanos: la gestora destituye a los pocos críticos que quedaban e Igea y otros cargos responden con dimisiones

el presidente de la Gestora de Ciudadanos, Manuel Garcóa Bofill junto a Joan Mesquida

Carmen Moraga / Laura Cornejo

36

Terremoto en Ciudadanos a escasas semanas de que comience el proceso preparatorio de la V Asamblea General extraordinaria, prevista para el 14 y 15 de marzo. Las destituciones decididas por sorpresa por la gestora del partido del asturiano Ignacio Prendes y de la castellano-manchega Orlena de Miguel, dos de los críticos que aún mantenían sus cargos como portavoces autonómicos, desencadenaba este martes una fuerte tensión interna que culminada a última hora de la tarde con la renuncia de Francisco Igea como secretario de Programas de Ciudadanos de Castilla y León. Tras él se sucedieron una cadena de dimisiones en esa región.

El vicepresidente y portavoz de la Junta de Castilla y León de Ciudadanos hacía pública su decisión en su cuenta de Twitter, en la que pedía “calma y confianza” a sus compañeros porque “todos son Ciudadanos y Ciudadanos es de todos”.

Aunque Igea no explicaba los motivos de su renuncia en su mensaje de Twitter, nadie dudaba de que estaba vinculada a esas destituciones, como él mismo confirmaba más tarde. Fuentes cercanas a Igea apuntaron hacia el secretario de Organización, Fran Hervías, como autor de una “purga” entre los críticos. Tras la renuncia de Igea, a través también de Twitter, y en los mismos términos, anunciaron su dimisión los secretarios de Programas de Valladolid, Palencia y Ávila.

Conmoción interna: “No pueden ser más torpes”

La conmoción dentro del partido no se disimulaba. “No pueden ser más torpes”, señalaban algunos de los dirigentes consultados por eldiario.es. Ninguno salía de su asombro tanto por la sorpresa que les habían causado las noticias, como por la formas empleadas por la Gestora, que dirige Manuel Gacía Bofill, para notificar sus relevos a los afectados.

A Orlena de Miguel le llegó a su correo un email -que vio a primera hora de la tarde- en el que el secretario general de la gestora, José Manuel Villegas, le comunicaba su cese y su sustitución en la portavocía autonómica mientras le agradecía “la labor realizada en el cargo”. En su mensaje, Villegas ni siquiera citaba el nombre de la que será su relevo: Carmen Picazo, la portavoz hasta ahora de Las Cortes de Castilla La Mancha. En una reciente entrevista con eldiario.es, De Miguel criticaba que en la formación que se dice “liberal” haya “una cierta intolerancia a la discrepancia”.

Por su parte, el asturiano Prendes, que se enteró de la misma forma que De Miguel de su cese, ha sido sustituido por el teniente de alcalde del Ayuntamiento de Oviedo, Ignacio Cuesta, un hombre de la “confianza” del partido. Prendes y De Miguel fueron dos de los dirigentes de la anterior Ejecutiva que mostraron su rechazo por los pactos decididos por Albert Rivera en la anterior legislatura y el veto que impuso al PSOE. El asturiano también protagonizó una dura intervención en el tenso Consejo General celebrado el pasado 1 de diciembre en el que se designó a la Gestora tras la dimisión de Rivera.

El malestar y la indignación interno era aún mayor porque, según ha podido saber esta redacción, uno de los destacados miembros de la propia gestora, como Luis Garicano, se enteró de ambos ceses por las noticias en prensa.

El jefe de la delegación europea de Ciudadanos mostraba su apoyo después a Prendes y De Miguel en su cuenta de Twitter.

La crisis, en realidad, había estallado después de que trascendiera que la gestora había decidido cubrir con dirigentes 'oficialistas' varios de los huecos que estaban vacantes en los Comités Autonómicos de Baleares y de Galicia.

Estos decisiones se tomaron también en la reunión que mantenía este órgano interino el lunes. Aunque en un principio se anunció una rueda de prensa de la portavoz, Melisa Rodríguez, ésta repentinamente se desconvocó para dar protagonismo a Edmundo Bal y a la presentación en el Congreso de la reforma de la ley del Ministerio Fiscal –idéntica a la que presentaron en 2018–, después de conocer la decisión de Pedro Sánchez de proponer a Dolores Delgado como como fiscal general del Estado.

El partido no hizo público después ningún comunicado con los cambios. Luego transcendió que el exdiputado socialista Joan Mesquida será a partir de ahora el nuevo portavoz autonómico de Ciudadanos en Baleares.

Mesquida, que fue nombrado por Arrimadas asesor del grupo parlamentario tras quedarse sin acta, sustituye al histórico dirigente Xavier Pericay que dimitió de sus cargos hace casi un año después de perder las primarias y de lamentar el nulo respaldo que había dado a su labor Albert Rivera. Además, se han cubierto varias plazas en la dirección autonómica que estaban libres tras otros abandonos en las islas.

Al mismo tiempo, la gestora decidía, después de una oleada de dimisiones, cubrir una serie de vacantes también en Galicia y designar a la exdiputada Beatriz Pino portavoz del Comité Autonómico. Tanto Mesquida como Pino forman parte de la propia gestora. “¿Puede un órgano que está en transición tomar estas decisiones a escasas semanas de que se celebre la V Asamblea General del partido?”, es la pregunta que, con enfado, se hacían algunos dirigentes críticos con lo que habló esta redacción.

En Andalucía también se han realizado cambios, en concreto, de los secretarios de Organización de al menos Granada, Almería y Huelva, que han conocido este martes sus ceses para colocar a afines a la gestora.

Todo ello ha provocado que distintos sectores internos crean que estos pasos del nuevo órgano de dirección -del que Inés Arrimadas no forma parte pero está dominado por miembros del antiguo aparato riverista-, van dirigidos a asegurarse el control de la V Asamblea General de marzo.

Hasta ahora, aparentemente reinaba la calma mientras los equipos responsables de las ponencias de Estrategia y Estatutos estaban centrados en ultimar los documentos base que serán aprobados el próximo 25 de enero en una reunión extraordinaria del Consejo General del partido. Una vez votadas ambas ponencias los afiliados podrán presentar enmiendas.

Movimientos a favor y en contra de Arrimadas

Pero lo cierto es que los movimientos a favor y en contra de Arrimadas se estaban intensificando estos días. La portavoz parlamentaria ha mantenido muchos contactos con dirigentes de la formación, primero para ir configurando su equipo, que ya tiene “en la cabeza” según confiesa, aunque se niega a desvelar si su 'número dos' será el eurodiputado y gurú económico de Ciudadanos, Luis Garicano, con el que dice solo que “habla mucho”. Fuentes del partido creen que todo lo que está pasando esto días va a influir y mucho en la decisión que pueda tomar Garicano de cara a las primarias.

Este mismo martes Arrimadas celebraba una reunión en el Congreso con algunos barones, entre los que estaba el diputado valenciano Toni Cantó, que no oculta su deseo de integrarse en su equipo. La diputada catalana está tanteando con qué apoyos territoriales contaría ante la posibilidad de que Igea decida presentar batalla.

El barón crítico, que también sigue moviendo sus fichas, confirmaba el lunes en una entrevista en Onda Cero antes de que se desencadenara todo este terremoto, que impulsará una alternativa en caso de que la portavoz parlamentario no asuma “un giro al centro” y promueva cambios para que los afiliados puedan participar más en las decisiones del partido y haya una mayor democracia territorial.

Igea pedía al partido que salga “de las trincheras” para ofrecer a los españoles “racionalidad” y animaba a la jerezana a que desvele “cuál es el modelo de partido que se ofrece desde su candidatura”. Él ya ha adelantado que quiere que los afiliados puedan elegir “a los cargos territoriales”, algo que actualmente no está previsto en Ciudadanos. Además, apuesta por mantener un discurso “de centro”, “equidistante respecto a los populismos de izquierdas y de derechas” y ser también “mucho más tolerantes ante la discrepancia”.

El pesimismo sobre la posibilidad de que Arrimadas pueda atreverse a acometer cambios de calado se extiende, mucho más después de todo lo acontecido entre el lunes y este martes. “No se atisban cambios. Ya lo vimos orgánicamente con la gestora”, lamentan fuentes de ese sector crítico en el que no gustó mucho la línea de confrontación seguida por Arrimadas en el debate de investidura de Pedro Sánchez. “Los votantes de centro moderados siguen encontrándose huérfanos”, afirman.

Los recelos hacía la gestora se han extendido también entre muchos militantes que creen que la nueva dirección interina está “maniobrando” para “limpiar el censo de voces incómodas para que durante las votaciones a los compromisarios perdamos fuerza frente a los oficialistas”. Las asambleas que han protagonizado estos días con afiliados García Bofill y Fran Hervías, solo han constatado que no se fían de la buena voluntad que expresan en público ninguno de los dos dirigentes. En la Asamblea extraordinaria de Valladolid del pasado miércoles la fractura se evidenció al impedir la entrada en ella de dos cargos de Ciudadanos, el viceconsejero de Transparencia, Fernando Navarrio, y el portavoz en el Ayuntamiento de Valladolid, Martín Fernández Antolín.

Etiquetas
stats